La peor derrota de los Grizzlies de Gasol: Curry y compañía les ganan por 50
No parece que nadie pueda parar a los actuales campeones. Ante los Grizzlies, rival la temporada pasada en la final del Oeste, consiguieron un parcial de 72-27 en el segundo y tercer cuarto
Una apisonadora. Eso son los Golden State Warriorrs, que la pasada madrugada aplastaron a los Memphis Grizzlies, su rival en la pasada final de la Conferencia Oeste, por 119-69. Esos 50 puntos son la peor diferencia en contra de la historia de los Grizzlies, que se vieron totalmente sobrepasados por un equipo que ahora mismo no se le adivina rival en la NBA.
Tras ganar dos veces a New Orleans Pelicans y una a los Houston Rockets, los Warriors afrontaban el que en teoría iba a ser su partido más complicado hasta el momento, pero lo solventaron con una facilidad pasmosa. Los Grizzlies apenas aguantaron un cuarto (22-21 a su favor) antes del vendaval que se les vino encima: un parcial de 72-27 entre el segundo y tercer cuarto. Además de un ataque devastador, lso Warriors sacaron a relucir una de sus mejores armas de la pasada temporada, la defensa, que en este curso aún no había destacado. Eso, sumado a la desastrosa noche en el tiro de los Grizzlies (26/96), dio como resultado un marcador histórico.
El mejor, como casi siempre, volvió a ser Stephen Curry, autor de 30 puntos. "Es sorprendente. No recuerdo la última vez que alguno de nosotros ganó por 50 puntos", dijo tras el partido. El base sigue imparable en este inicio de temporada. En los cuatro primeros partidos ha anotado 148 puntos en 127 minutos (1,17 por minuto). La temporada acaba de empezar y sus números volverá a ser más terrenales, pero ahora mismo sus promedios son espectaculares: 37 puntos, 5 rebotes y 6,3 asistencias. Hace dos días anotó 53, 28 en un solo cuarto.
En los Grizzlies, Marc Gasol fue de los poco que se salvó, con 13 puntos, 9 rebotes y 3 asistencias. Él y el base Mike Conley (10 puntos y 5 asistencias) fueron los únicos que llegaron a la decena. "No son 40 o 50 puntos mejores que nosotros", declaró el ala-pívot Zach Randolph, que se quedó en 4 puntos. Los Grizzlies están con dos victorias y dos derrotas tras la primera de competición.
Tiene razón Randolph cuando dice la diferencia no es tan grande -"creo que sólo han tenido una mala noche en el tiro", dijo Luke Walton, entrenador interino de los Warriors-, pero la derrota sí que es una importante llamada de atención a los Grizzlies, otra más. En una liga en la que cada vez se juega más rápido, con quintetos más bajos y en la que el triple es un arma esencial y muchas veces principal (es decir: una competición dominada por el estilo de los Warriors), los Grizzlies tienen casi imposible ganar el anillo con un ritmo lento y sin amenaza exterior, aunque tenga una de las mejores parejas de pívots de la liga.
Ricky, Calderón e Ibaka también pierden
Además de Marc Gasol, otros tres españoles jugaron la pasada madrugada. Y lo tres perdieron. Tras dos partidos fuera de casa, los Minnesota Timberwolves debutaron en casa, en una noche que sirivó como homenaje a Flip Saunders, entrenador y presidente del equipo fallecido poco antes del comienzo de la temporada. los Wolves no pudieron dedicarle la victoria y perdieron ante los Portland Trail Blazers por 101-106. Ricky Rubio se quedó muy cerca del triple doble: 12 puntos, 9 rebotes y 9 asistencias.
Serge Ibaka también anotó 12 puntos, a los que sumó 14 rebotes, en la primera derrota de la temporada para los Oklahoma City Thunder, que cayeron por 110-105 ante Houston Rockets. La buena actuación de Kevin Durant y Russell Westbrook (29 y 25 puntos) no fue suficiente. En los Rockets, James Harden brilló con 37 puntos.
Por último, José Manuel Calderón volvió a ser titular en los New York Knicks, que perdieron 84-94 ante los San Antonio Spurs. El base español anotó 6 puntos en 23 minutos.
Una apisonadora. Eso son los Golden State Warriorrs, que la pasada madrugada aplastaron a los Memphis Grizzlies, su rival en la pasada final de la Conferencia Oeste, por 119-69. Esos 50 puntos son la peor diferencia en contra de la historia de los Grizzlies, que se vieron totalmente sobrepasados por un equipo que ahora mismo no se le adivina rival en la NBA.