Es noticia
Canceladas las dos primeras semanas de NBA por "el abismo" que separa a las partes
  1. Deportes
  2. Baloncesto
EL ACUERDO ENTRE PATRONAL Y JUGADORES CADA VEZ MÁS LEJOS

Canceladas las dos primeras semanas de NBA por "el abismo" que separa a las partes

Los amantes de la NBA se temían lo peor y lo peor llegó: canceladas las dos primeras semanas del Campeonato. Patronal y jugadores siguen hablando distintos

Foto: Canceladas las dos primeras semanas de NBA por "el abismo" que separa a las partes
Canceladas las dos primeras semanas de NBA por "el abismo" que separa a las partes

Los amantes de la NBA se temían lo peor y lo peor llegó: canceladas las dos primeras semanas del Campeonato. Patronal y jugadores siguen hablando distintos idiomas en la mesa de negociaciones y esta madrugada, en la sede neoyorquina de la NBA, las partes consumieron más de siete horas de diálogo de besugos y no lograron llegar a un acuerdo de mínimos, por lo que el bloqueo (lockout) definitivo sigue aferrado al alero.

David Stern, el máximo comisionado de la NBA, con gesto cansado y arrugas marcadas por la crispación, declaró ante los periodistas: “La brecha es tan grande que es materialmente imposible tender un puente.  Es que las partes (patronal y jugadores) se encuentran muy lejos en todos los temas que se abordan. Les separa un abismo”.

Derek Fisher, presidente de la Asociación de Jugadores y compañero de Pau Gasol en los Angeles Lakers, aseguró compungido: “Esta vía (la del aplazamiento) no era la que habíamos elegido, hemos estado luchando por un acuerdo más justo, pero fue imposible. Queremos seguir hablando, aunque ya no depende de nosotros”.

¿Qué es lo que se negocia y amenaza con un crack de consecuencias imprevisibles? Lo que está en juego es el reparto de beneficios bruto en el nuevo convenio colectivo. Los propietarios consideran que la excesiva flexibilidad del tope salarial está suponiendo una sangría económica en muchas franquicias (22 de las 30 en la NBA se encuentran en números rojos).  En la actualidad, los jugadores reciben el 57 por ciento de los ingresos de las franquicias en concepto de salarios, algo que la NBA, argumentando los coletazos de una crisis global económica, considera insostenible.

Los jugadores están de acuerdo en ello. Así, la última propuesta del sindicato de jugadores plantea un reparto 54,3-45,7 a su favor, mientras que los propietarios piden un 50-50. La clave es ese tope salarial que los propietarios quieren simplificar, mientras que los jugadores se muestran reacios a dejar escapar todas las excepciones (en tiempo y salarios) que han permitido contratos multimillonarios, no sólo a las superestrellas, sino también a su "clase media". Precisamente, son los jugadores un escalón por debajo del nivel All-Star los que perderán más en caso que el sindicato acepte las exigencias de los propietarios.

"El nogocio está más vivo que nunca"

En la madrugada de este martes, junto al comisionado Stern, se sentaron en la mesa Comisionado Adjunto Adam Silver, los propietarios Peter Holt ,de San Antonio; Glen Taylor, de Minnesota; y James Dolan, de Nueva York, y el vicepresidente senior y Director General Adjunto, Dan Rube. En la otra orilla de la mesa se sentaron el director ejecutivo del sindicato de jugadores,  Billy Hunter; el presidente Derek Fisher y el vicepresidente Maurice Evans , jugador de los Wizards. Con ellos, los abogados Jeffrey Kessler y Klempner Ron.

David Stern se tira de sus mechones plateados. “Llevo más de 28 años en el cargo y el negocio está más vivo que nunca. Las audiencias de televisión así lo dicen, pero las partes no se ponen de acuerdo. Nadie cede. No se muestran dispuestos a concesiones”.

El resultado de este diálogo entre estatuas ha llevado a la cancelación de las dos primeras semanas del campeonato, que iba a iniciarse el 1 del próximo mes. Ahora se intenta salvar los obstáculos para que el pistoletazo de salida pueda darse a partir del 15 de noviembre. De ello penden cientos de puestos de trabajos. Muchos auxiliares, técnicos de sonido, operadores y periodistas pueden irse a la calle si el lockout se prolonga. Pero nadie regala un metro de su terreno. El aficionado pierde.

Los amantes de la NBA se temían lo peor y lo peor llegó: canceladas las dos primeras semanas del Campeonato. Patronal y jugadores siguen hablando distintos idiomas en la mesa de negociaciones y esta madrugada, en la sede neoyorquina de la NBA, las partes consumieron más de siete horas de diálogo de besugos y no lograron llegar a un acuerdo de mínimos, por lo que el bloqueo (lockout) definitivo sigue aferrado al alero.