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La mejor España llegó justo a tiempo
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clara victoria sobre argentina (86-53)

La mejor España llegó justo a tiempo

La selección española cerró su gira de amistosos de preparación con 8 victorias en otros tantos envites. La última, ante una Argentina floja y venida a menos

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Justo a tiempo. A escasos cuatro días de que empiece el Mundial, la selección española no dio opción a una Argentina decepcionante que sucumbió a los encantos de un grupo queculmina su gira de amistosos de preparación invicta (86-53). Apoyados en un juego interior empeñado en dar la razón a Ibaka ("España tiene el mejor juego interior del mundo"),y con la alegría de un perímetro que día a día ha ido encontrando su papel dentro del complejo engranaje, el combinado español alcanzó su sublimación extraoficialen la antesala de un campeonato donde los soldados de Orenga tienen puestas muchas esperanzas.

Los prolegómenos se estiraron más de la cuenta. Rudy confirmaba a su hermana Marta, encantada en su nueva faceta de reportera para la televisión pública, que está listo para la batalla final y que su ausencia responde al conservadurismo que impregna los días previos a un gran campeonato. Tampoco se vistió Felipe Reyes, porque hasta los gladiadores incombustibles necesitan un respiro.Martín Bertrán, el árbitro con más partidos en la historia de la ACB, recibía un merecido homenaje. Remató el anecdotario un Felipe VI que aplaudiendo al lado de la Vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, parecía alguna vieja gloria retirada de sus funciones en el parqué. Sobre la pista, el dominio de los pupilos de Juan Antonio Orenga fue incontestable de cabo a rabo. Era un secreto a voces que sin Ginóbili, Delfino y Juan Gutiérrez la última versión de la mejor generación argentina de la historia andaba coja, pero no hasta estos límites. Claro que enfrente tenían a un grupo tirano con las cosas claras y muestra, sin máculas en el expediente, estar preparado para el desafío.

Pau es el foco que ilumina el camino de un equipo que genera todo su juego a partir de los balones interiores, un seguro de vida y la opción más eficiente para desangrar al rival. Junto a su hermano Marc, encarnan el compromiso con una nación que espera con ilusión la llegada de un campeonato que alegre su día a día. Argentina multiplicaba su ímpetu en defensa pero condicionada por un triste plantel no le alcanzaba para frenar las innumerables vías de ataque de España. Un grupo sólido que poco a poco va limando sus asperezas (que las tiene). Con la máquina engrasada comosi de un partido oficial se tratara, no hubo lugar para los temblores y las dudas que surgieron en algunos choques donde, instalados en la ley del mínimo esfuerzo, sólo el talento ilimitado de los españoles pudieron decantar.

Scola se cargaba con dos faltas presa de la impotencia nada más empezar (20-5, minuto 7). Todo salió a pedir de boca. El ‘feeling’ en la pintura se contagió al perímetro y el coro empezó a recitar los versos de un poema bélico. Marc (14+10), Pau (13+11) e Ibaka (13+8), trío NBA llamado a gobernar la pintura, capturaban rebotes sin parar (31 sólo en la primera parte y 49 al final del encuentro). Las segundas opciones no existían y la chispa de los exteriores se unió para dar forma a la versión más enriquecida del combinado patrio. El ‘Chapu’ Nocioni, alma y líder espiritual de un grupo herido, era generoso en lamentos cada vez que el aro repelía los tiros que suele meter. El Palacio recogió eleco de su furia e intentó aplacar su ansiedad. ‘En octubre te esperamos vestido de blanco’, le decían sus muros de hormigón. (25-10, minuto 10)

En el segundo cuarto, la entrada de Walter Hermann humedeció los ojos a más de uno. Nadie olvida la enorme contribución de un jugador que marcó una época durante los seis años que pasó en nuestro país (Fuenlabrada, Unicaja y Laboral Kutxa). Porque a sus 35 años verle girar y agarrar el naranja con su enorme mano derecha sigue siendo una delicia. Ya sea como alero o de ‘4’, el de Venado Tuerto no se corta la coleta. El baloncesto fue su pasión, la vía de escape para remontar el vuelo tras el dramático destino que le tenía guardado una vida impredecible y perra. Con su inseparable cinta, la capacidad de sacrificio supuso un clavo ardiendo al que aferrarse para evitar un ridículo que sobrevolaba el ambiente (48-25, minuto 20).

En el descanso, momento para dar ánimo a las chicas de Lucas Mondelo antes de que ultimen su preparación de cara al Mundial femenino que se celebrará en Turquía del 27 de septiembre al 5 de octubre. A la vuelta de la caseta, en la oficina las cosas estaban donde las habían dejado. El Séptimo de Caballería acompañaba las alevosas y descaradasemboscadasespañolas. Las aguas no amainaban y a Argentina se le vaciaba el depósito. A Scola, indolente desde que fue consciente de la que se le veía encima, se le borró la mirada felina de su rostro. La sangre no corría por sus venas y el ala-pívot de los Pacers acumulaba errores desde la cabeza de la bombilla, su posición fetiche. Las distancias se movían en torno a los 20 puntos. Nocioni despertó con timidez de su letargo, Campazzo, otro de los que jugó en la que será su casa en poco más de un mes,seguía pasado de revoluciones y hacía la guerra por su cuenta. Julio Lamas daba barra libre a un equipo que olvidado el sonrojante resultadoy se conformaba con encontrar sensaciones antes del Mundial (67-41, minuto 30).

El encuentro había tornado en un partido de patio de colegio. España se negaba a levantar el pie del acelerador. Nocioni era el vivo reflejo de la desesperación. No aguantó más y optó por desbaratar un vuelo de Ibaka con un feo y peligroso empujón. Poco después el congoleño se tomaba su particular venganza de la forma más sangrante: tapón en un lado de la pista y mate a dos manos para culminar el ‘coast to coast’. Orenga dio pasoa Dani Díez y el canterano del Real Madrid respondió con un triple nada más salir a pista. No entróÁlex Abrines que, pese a la petición popular que brotaba desde la grada y a hacer la rueda de calentamiento al mismo ritmo que sus compañeros, se quedó con la camiseta de calentamiento en el banco. El escolta del Barcelona deberá aguardar hasta la competición oficial para vivir su puesta de largo con la absoluta. “No corremos riesgos pero seguimos jugando intensos”, advertía Orenga en uno de los últimos tiempos muertos. La ola animaba a una hinchada enloquecida ante el festín y Víctor Claver conseguía su primera canasta para poner el pleno de anotación en el roster español. El colofón a una plácidanoche de verano en el Palacio de los Deportes.

Y así se acabó la gira. Ocho envites y otras tantas victorias con el objetivo de perfilar su asalto al cetro Mundial logrado en Saitama en 2006. Ahora llega la hora de la verdad. Un país entero aguarda con impaciencia la puesta de largo ante Irán (sábado, 22 horas) de un equipo diseñado para soñar. Un inicio suave que, a priori, permitirá entrar en calor de forma progresiva. La tendencia se mantendrá ante Egipto (domingo) antes de meterse de lleno en la batalla con Brasil (lunes 1 de septiembre) Francia (miércoles 3) y Serbia (jueves cuatro. Tres partidos cruciales de cara a dirimir los cruces de octavos de final."Los aspectos técnicos están hechon el 80 por ciento.Nos falta coger ritmo en la fluidez del ataque cuando dominamos el balón interior, nos falta coger ese espacio, vamos a ello, cada vez estamos mejor. En defensa hemos ido aclarando todos los aspectos, pero tampoco hemos podido hacer defensas zonales", reconocía Orenga antes del partido. Tras ver el encuentro ante los argentinos no queda duda de que este grupo de amigos llega en plenitud a Granada.

Ficha técnica:

86 - España (25+23+19+19): Rubio (9), Llull (9), Navarro (12), Pau Gasol (13), Marc Gasol (14) -cinco inicial-, Claver (2), Ibaka (13), Sergio Rodríguez (8), Calderón (3), y Díez (3).

53 - Argentina (10+15+16+12): Campazzo (9), Prigioni (7), Nocioni (10), Delia (-), Scola (2) -cinco inicial-, Gutiérrez (-), Hermann (11), Laprovittola (-), Gallizi (2), Safar (10), Bortolín (2) y Mata (-)..

Árbitros: Antonio Gómez, Juan Luis Redondo y Miguel Ángel Garmendia. Eliminado el visitante Galizzi.

Incidencias: Partido amistoso disputado en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid ante 16.000 espectadores (lleno), con la presencia del rey de España Felipe VI. Antes del partido se impuso la insignia de oro de la Federación Española de Baloncesto al árbitro José Antonio Martín Bertrán y se guardó un minuto de silencio por los tres guardias civiles fallecidos en una misión de rescate en León.

Justo a tiempo. A escasos cuatro días de que empiece el Mundial, la selección española no dio opción a una Argentina decepcionante que sucumbió a los encantos de un grupo queculmina su gira de amistosos de preparación invicta (86-53). Apoyados en un juego interior empeñado en dar la razón a Ibaka ("España tiene el mejor juego interior del mundo"),y con la alegría de un perímetro que día a día ha ido encontrando su papel dentro del complejo engranaje, el combinado español alcanzó su sublimación extraoficialen la antesala de un campeonato donde los soldados de Orenga tienen puestas muchas esperanzas.

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