Rudy Fernández y Ayón, dos jugadores distintos y a la vez muy parecidos

Rudy Fernández y Gustavo Ayón no se parecen en casi nada, pero su forma de jugar tiene bastantes similitudes. A su manera, cada uno le da mucho al Real Madrid, en cantidad y en calidad. En la extensa plantilla que maneja Pablo Laso, quizá solo Facundo Campazzo compita con ellos en esa cualidad. Defensa, anotación, distribución... Ellos son capaces de hacerlo todo a un altísimo nivel, como demostraron este viernes en Kaunas: fueron los mejores en la victoria por 79-90 ante el Zalgiris, la décimotercera de la temporada para el equipo madridista, aún invicto.

Igual que hace dos semanas en Milán, el Real Madrid volvió a remontar. Entonces fueron 15 puntos, esta vez 14 (32-18 al final del primer cuarto). Entró en el último período perdiendo por seis (68-62), pero un parcial de 28-11 en los últimos diez minutos le dio la victoria. Aún está por aparecer un equipo que le aguante 40 minutos. El Zalgiris, muy superior en el primer curto, lo hizo durante 35.

Uno de los protagonistas de ese parcial final fue Rudy Fernández, que metió cuatro triples en los últimos cinco minutos del partido. Del empate a 73 que lucía el marcador cuando lanzó el primero a 4:22 del final se pasó al 76-90 cuando restaban 41 segundos. A eso sumó dos rebotes y siete asistencias. Es su tercer partido en Euroliga anotando al menos 10 puntos, casi la mitad de todos los que logró la temporada pasada.

El mallorquín sigue su idilio con el triple. El pasado fue su mejor curso en el triple desde su etapa en el Joventut de Badalona. En las últimas temporadas, Rudy se ha ido alejando del aro, hasta el punto de que ahora más de dos tercios de sus lanzamientos son de tres puntos. Si se tienen en cuenta todas las competiciones, la temporada pasada el 66,2 % de sus tiros fueron desde más allá del 6,75. En los 13 que ha jugado este curso, el porcentaje es un 69,5 %. En Euroliga, además, con un acierto del 56 %. Cuando está como en Kaunas (5/7) es imparable.

Ayón no tira triples, pero, como Rudy, también es capaz de hacer de todo. Terminó con 13 puntos, 10 rebotes, 4 asistencias y 3 robos. Y fue la solución a un problema que el Real Madrid se encontró por primera vez en lo que va de temporada: la anulación de Edy Tavares. El Zalgiris encontró la manera de crearle problemas al caboverdiano con la movilidad de sus pívots, Jankunas y Davies. Y Tavares, que estaba siendo de los más utilizados por Laso en el comienzo de la Euroliga, solo jugó 13 minutos.

Le sustituyó Ayón, que une capacidad de intimidación cerca del aro, capacidad oara rebotear como el mejor, unos pies ligeros que le permiten salir a defender fuera y unas manos rápidas para robar balones. Y a eso le suma su juego ofensivo, más desarrollado que el de Tavares. Es capaz de finalizar cerca del aro y de asistir al compañero que está abierto. Con los dos, el Madrid tiene posición muy bien cubierta durante 40 minutos. Esta vez, los más decisivos no fueron Llull o Randolph, aunque también rindieron a buen nivel. Fue el turno de Rudy y Ayón, dos de esos jugadores que hacen de todo y todo bien.