España-Francia: una semifinal con sabor a revancha y a Río de Janeiro

A los jugadores españoles no les gusta hablar de revancha, pero hay cosas que son inevitables. Si pudieran diseñar un partido ideal para devolverle a la selección francesa el golpe de la eliminación el año pasado en la Copa del Mundo, se parecería mucho al de este jueves (21:00 horas, Cuatro). Francia es el rival a batir por el nivel de sus jugadores, porque es la vigente campeona, porque juega en casa y porque tendrá a casi 27.000 aficionados en las gradas animando. Hace un año se enfrentaron en cuartos de final y este año lo harán en semifinales, lo que añade trascendencia, pero no sólo por meterse en la final y asegurar una medalla: el ganador consigue el billete directo para Río 2016, el gran premio del EuroBasket.

"Al final en el baloncesto no puedes vivir de revanchas porque juegas contra tantos equipos que unas veces gana uno y otras veces gana otro", dice Sergio Llull, que añade: "Pero sí que es verdad que sería bonito, ya no por ser Francia y ser aquí, sino por llegar a la final, que es lo importante, y conseguir el billete directo para los Juegos Olímpicos". Jugar el preolímpico al final de la próxima temporada cansa solo de pensarlo. Algunos jugadores se juegan tener al menos unos días de vacaciones el próximo verano.

"Técnicamente tengo bastante claro lo que pasó el año pasado, pero los dos equipos son muy diferentes. Por exceso o por defecto. Hay protagonistas muy diferentes y la situación anímica es distinta. Hay formas diferentes de digerir esto, pero no me parece buena idea mirar al pasado", dice Scariolo, que no estaba hace un año. Sí estaba Vincent Collet, seleccionador francés, que se ha referido a la semifinal como "la batalla que todo el mundo espera".

"Francia es el monstruo de la competición"

Antes del EuroBasket, Scariolo dijo que Francia y Serbia le habían impresionado en la preparación. Dos semanas después, ambas selecciones están en semifinales y son las principales candidatas para meterse en la final. "Dije que Serbia y Francia estaban por encima de todos y no creo que haya sido mal profeta", comentó el italiano este miércoles.

"Desde el primer día parece que Francia es el monstruo de la competición, en positivo, y lo ha refrendado", explicó el seleccionador. A Francia se le caen las estrellas: Tony Parker, Boris Diaw, Nicolas Batum, Rudy Gobert, Nando De Colo... Centrarse en uno sería un error, pues su potencial no lo explica un solo jugador. Hace un año llegó a semifinales de la Copa del Mundo con buena parte del grupo de este EuroBasket, pero sin Parker, lo que demuestra que el nivel del equipo que ha ensamblado Collet no depende solo del genial base.

"De Colo está en un momento de forma impresionante, Diaw es como tener dos bases en cancha. Batum y Gelabale son dos aleros con una complexión física increíble. Son nueve o diez jugadores de primerísimo nivel mundial. A este nivel, si te desangras para parar a uno, te pueden matar los otros", avisa Scariolo.

"Entre todos vamos a intentar parar a Parker"

El seleccionador no cree que el partido tenga que reducirse a un Parker contra España ni a un Gasol contra Francia: "Tienen tantos y tan buenos jugadores que contenerle será importante, pero no a costa de que se abran espacios para Batum o De Colo". La selección española ha demostrado ser más dependiente del pívot de los Bulls que la francesa del base de los Spurs. A pesar de eso, Parker es el máximo anotador y asistente del equipo con 12,1 puntos y 4 asistencias (los números de De Colo son muy parecidos).

"Entre todos hemos parado a Spanoulis y entre todos vamos a intentar parar a Parker y a Batum, Diaw y todos sus grandes jugadores", dice Llull. El base de los San Antonio Spurs siempre acaba apareciendo. En los cuartos de final, ante Letonia, lo hizo cuando peor lo estaba pasando Francia para anotar 9 puntos seguidos y cambiar el partido. España lleva sufriéndolo desde el 2001. Desde entonces ha construido una carrera en la selección que le permite ser el único capaz de aguantar la comparación con Pau Gasol o Dirk Nowitzki. En este EuroBasket se ha convertido en el máximo anotador de la historia de la competición.

"Queremos seguir haciendo historia"

"Jugar en un pabellón lleno, ante su afición y ante un equipo con grandísimos jugadores como Francia, pone", reconoce Llull. España espera que el apoyo de los aficionados y el ambiente de euforia que rodea a la selección perjudique a Francia. El ejemplo lo tiene en casa con lo sucedido hace un año. "Parecía que íbamos a jugar la final antes de hora y al final nos quedamos en el camino. Ellos llevan un Europeo muy cómodo, ganando bien todos los partidos, y esperamos que eso les pase factura", comenta Llull.

En esta ocasión el reloj jugará a favor de España. "Si somos capaces de aguantar y ven que no se pueden ir, ahí yo creo que será nuestro momento", dice Pau Ribas. "Del año pasado tenemos un ejemplo doloroso bastante cerca de que el público no decide. En un último cuarto igualado puede haber reacciones distintas según la personalidad de cada equipo", explica Scariolo.

"El partido va a ser muy igualado hasta el final, como el ayer (ante Grecia). En este campeonato ya hemos tenido varios finales apretados y sabemos cómo jugarlos", dice el capitán, Felipe Reyes, que jugará su séptima semifinal de un EuroBasket. "Lo que nos daría más satisfacción sería conseguir esa plaza para los Juegos Olímpicos de Río. Y también conseguir una medalla más para el baloncesto español". Sería la novena desde 1999. "Queremos seguir haciendo historia, como llevamos tantos años haciendo".