No hace falta 'biscotto' en el Eurobasket: España se clasifica a los cuartos sin jugar

Junio de 2012. Eurocopa de Polonia y Ucrania. España se enfrentaba a Croacia en la última jornada de la primera fase en el Grupo C. Un empate entre españoles y croatas dejaba fuera a Italia. En la selección transalpina temían un posible pacto entre unos y otros para pasar a cuartos de final y dejar fuera al combinado de Cesare Prandeli.

Temían que se repitiera lo sucedido en la Euro de 2004 y donde precisamente un empate entre Dinamarca y Suecia les mandó para casa. Eso en Italia se dio a conocer como 'La pesadilla del biscotto' (pasteleo). Pero no volvió a suceder, España se comportó de manera absolutamente profesional, venció ese partido y los italianos, incluso, llegaron hasta una final en la que sucumbieron ante el equipo de Vicente del Bosque.

Cambiamos diametralmente de disciplina, pero algo muy similar podía haber sucedidoen la tarde de hoy en el Stocize Arena. Hacemos referencia al Eurobasket de Eslovenia, donde los pupilos de Juan Antonio Orenga se miden (17:45 horas) a la selección de Italia. Los nuestros se juegan la continuidad en el campeonato. España sabía que estaba obligado a ganar este lunes a Italia si quería clasificarse, pero a no será necesario, pues la victoria de Croacia ante Grecia (92-88) clasifica automáticamente a la selección de Orenga.

En el momento en el que España cayó ante Grecia el pasado jueves, las miras se dispararon rápidamente al partido de hoy. Todos daban por hecho que España ganaría a Finlandia, como así fue, y que se jugaría una plaza en cuartos ante un equipo italiano que realizó una primera fase impecable (cinco victorias), pero que en esta segunda cuenta sus compromisos por derrotas (ante Eslovenia y Croacia). El espíritu siempre competitivo de los italianos ponía en jaque a una selección española que sobre el papel es superior. Pero los croatas han facilitado la labor a España.

Llull, recuperado

A pesar de estar clasificados, no hay margen para los errores como los cometidos ante eslovenos y griegos,y continuar siendo los reyes del baloncesto continental. Para ello, el seleccionador recupera a un Sergio Llull que tuvo descanso ante Finlandia por problemas físicos y cuenta por tanto con todos sus efectivos para dar, de una vez por todas, un golpe de autoridad en el torneo.

Más que nunca estamos ante la hora de la verdad. El espíritu de campeón que caracteriza a esta selección española debe notarse esta tarde sobre la pista, que los italianos sepan desde el inicio que están jugando ante el actual campeón, que noten la dificultad de este enfrentamiento. Sólo así, la ÑBA volverá a ganarse el respeto de todos sus rivales y plantarse en los cruces, donde se dirimen las grandes batallas, como ese ogro que ha pasado por encima de todos en anteriores campeonatos continentales.