La ACB va más lejos que la NBA para arreglar un problema que quizá no exista

El aficionado casual que acuda a partir de este domingo al Palacio Multiusos de Guadalajara para ver el Circuito Movistar de pretemporada quizá no se dé cuenta, pero el que vea baloncesto con asiduidad no podrá evitar fijarse. La cancha en la que se van a jugar los seis partidos del torneo es más ancha de lo habitual. En concreto un metro más. Es el intento de la ACB por encontrar respuesta a un debate frecuente entre jugadores y entrenadores: ¿se ha quedado pequeña la cancha?

"La gente habla, pero nadie ha hecho una prueba experimental con esto. Como no se puede hacer en partidos de competición oficial, porque para ello necesitas la autorización de FIBA, hemos decidido hacerlo en esta sede el cicuito", explica Joan Roca, director deportivo y de competición de la ACB, que señala que la iniciativa nace de la liga, que nadie les ha pedido realizar este experimento, aunque son conscientes de que es un tema de conversación desde que FIBA alejó la línea de tres puntos desde el 6,25 hasta el 6,75 en 2010.

La pista montada en Guadalajara es idéntica a la habitual salvo en su anchura: del 28x15 se pasa al 28x16. La línea de tres puntos no se tocará y seguirá estando a 6,75 y a 6,60 en las esquinas (desde que se alejó, la distancia del triple no es la misma desde los lados). Eso hará que en las esquinas la distancia entre la línea de tres y la lateral pase de 0,9 a 1,4 m. "Hemos estado analizando y hemos visto que con medio metro se puede ganar bastante en la mejora del juego de ataque. Igual vemos que es poco o que es mucho", dice Roca.

Entre las situaciones de juego que pueden beneficiarse con más espacio, señala el uno contra uno en los laterales, las salidas de tiradores tras bloqueos indirectos o el juego dentro-fuera, en teoría más difícil de defender. "Si el pívot saca el balón, al defensor que hace la ayuda le va a costar más llegar a puntear al tirador. Lo pívots pueden tener más espacio para jugar el uno contra uno y acabar el movimiento hacia canasta", dice. No descarta más pruebas en el futuro, como alejar del triple hasta el 6,75 también en las esquinas. Siempre en el circuito de pretemporada, evento que la ACB está convirtiendo en su banco de pruebas.

Las medidas de la pista NBA son muy parecidas a las del baloncesto FIBA. En concreto mide 65 centímetros más de largo y 24 más de ancho

Pocas pérdidas por pisar fuera

Una de las razones esgrimidas por la liga para probar una pista más ancha es que la poca distancia entre la línea de tres y la línea lateral provoca pérdidas por pisar fuera. Pero la liga reconoce que no sabe cuántas (en Guadalajara sí las contará). El mismo Roca admite que no es una infracción que vea a menudo en los partidos. La NBA tampoco publica esos datos, aunque hay alguna web, como NBA Miner, que los recopila. En la temporada 17-18, la media de los 30 equipos fue de 0,34 pérdidas por partido por pisar fuera (incluye la línea lateral y la de fondo), la cifra más alta de la última década. En la NBA los partidos son de 48 minutos, no de 40.

Las medidas de la pista NBA son muy parecidas a las del baloncesto FIBA. En concreto mide 65 centímetros más de largo y 24 más de ancho. Pero al tener la línea de tres más lejos, la distancia entre el triple y la línea de banda en las esquinas es casi idéntica: 91 cm y 90. "Sorprende mucho. La gente cree que es más grande, y solo lo es por muy poco", dice Joan Roca.

"Es una idea interesante", declaró a 'ESPN'​ en 2014 Kiki VanDeWeghe, vicepresidente de la NBA, sobre agrandar la cancha, pero no es algo que la liga norteamericana se haya planteado en serio. Al menos no tanto como para realizar una prueba.

Otro debate es si las normas deberían ser las mismas en todo el mundo. "Unificar el juego, evidentemente, sería lo lógico", señala Roca. "Pero primero en Estados tienen que plantearlo, porque tienen dos monstruos que juegan totalmenmte distinto: NBA y NCAA. Yo no lo tengo tan claro. El juego de la NBA no me gusta mucho. Hay 25 o 30 jugadores que son maravillosos. Y cuando ves jugar a Golden State, te engancha. Pero si tienes que ver a según qué equipos que juegan andando y no bajan a defender y no hacen un 'flash' de ayuda... Luego sí, hay explosividad. Igual aquí estamos en el otro extremo".

"Las pistas son iguales que hace 40 años, pero los jugadores han evolucionado con unos físicos espectaculares. La pista es la misma, pero el juego no", resume Roca. A la ACB le gustaría hacer el experimento en la Supercopa, pero necesitaría el permiso de FIBA. "Y dudo que los equipos quisieran", añade Roca. Tendrá que conformarse con el torneo de pretemporada que organiza en Guadalajara. Serán solo seis partidos y cualquier conclusión habrá que cogerla con pinzas, pero ya es mucho más de lo que se ha hecho hasta ahora. El análisis de los resultados serán enviados a FIBA, que es la instancia que en un futuro tendrá que tomar una decisión.