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¿Cómo acabó jugando Jordan un partido en la ACB? "Nike pagó una multa a la NBA"
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antes de barcelona 92, jordan jugó en españa

¿Cómo acabó jugando Jordan un partido en la ACB? "Nike pagó una multa a la NBA"

Jordan jugó un partido en la ACB en 1990 en medio de una gira promocional por Europa. Walter Szczerbiak, que lo acompañó en su paso por España, relata aquel episodio

Foto: Jordi Villacampa intenta taponar a Michael Jordan en el partido de presentación de la ACB en 1990. (ACB Photo)
Jordi Villacampa intenta taponar a Michael Jordan en el partido de presentación de la ACB en 1990. (ACB Photo)

Cada verano, muchas estrellas de la NBA se van de gira por Asia para promocionar los productos de las marcas que les patrocinan. China, Japón, Filipinas... en cada parada son recibidos por muchos aficionados deseosos de un autógrafo, una foto o un uno contra uno si tienen suerte. A finales de los 80 y principios de los 90, la expansión de la mejor liga del mundo comenzaba en mercados como el europeo, ahora ya conquistados. Al mismo tiempo, Michael Jordan se había convertido en el primer deportista-marca de alcance global de la mano de Nike. Esos dos aspectos están detrás de su viaje por el Viejo Continente en el verano de 1990, que incluyó una parada en España. A finales de agosto, el mejor jugador de la historia visitó Barcelona, pero no se dedicó solo a venderse. También jugó un partido.

No fue una pachanga con chavales. Fue amistoso, claro, pero había mucho nivel. Como presentación de la temporada, la ACB montó algo muy parecido a un 'All Star' con algunos de los mejores jugadores de la liga: Jordi Villacampa, Ricky Winslow, Audie Norris, Brian Jackson... "Te invitamos a la espectacular exhibición de baloncesto que enfrentará a 2 selecciones de la ACB, con la participación especial de Michael Jordan", se podía leer en las invitaciones repartidas por la liga.

El partido se celebró el 30 de agosto en el Palau dels Esports y fue televisado por La 2. Jordan jugó una parte con cada equipo. En principio iban a ser dos tiempos de 12 minutos, pero al final fueron de 15. El jugador de los Chicago Bulls jugó 28'35'' y anotó 37 puntos. La victoria se la llevó el equipo azul, entrenado por Manel Comas e Iñaki Iriarte.

El viaje de Jordan por Europa había comenzado en Italia el 23 de agosto y tambien tuvo paradas en Alemania, Francia y Reino Unido. Nike incluyó a España, pero no con la idea de que jugara un partido como el que jugó. Esa oportunidad se presentó más adelante. "La marca quería hacer promoción. Y coincidió con la presentación de la liga, un partido tipo 'All Star", cuenta Walter Szczerbiak, leyenda del Real Madrid que en entonces ejercía de delegado de la ACB en Estados Unidos. En los dos días que pasó en Barcelona, él estuvo muy cerca de Jordan e hizo de traductor en algún acto con la liga.

"La NBA no quería que Michael jugara, pero Nike quería promocionar sus productos en España y pagaron la multa que Jordan tenía que pagar a la liga. Para ellos era rentable. Ahora las cosas han cambiado. Esto fue antes de los Juegos Olímpicos de 1992, cuando todo se abrió más", recuerda en una conversación telefónica. En 1991 se repitió la experiencia con Charles Barkley, Scottie Pippen y David Robinson, aunque el tercero no jugó porque se lo prohibió su equipo, los San Antonio Spurs.

En 1985, Jordan ya había jugado un partido parecido en Trieste (Italia), donde incluso rompió el tablero al hacer un mate. Pero entonces era un recién llegado a una liga que dominaban Magic Johnson y Larry Bird. En 1990 ya era una superestrella, quizá la primera de su especie. El plan inicial era que viajara desde Alemania a Madrid el 29 de agosto, donde tenía varios actos promocionales y estaba previsto que realizara el saque de honor en el Estudiantes-Atlético Villaba que inauguraba el Trofeo Comunidad de Madrid. En cambio, viajó directo a Barcelona y se fue a jugar al golf al RCG El Prat, club donde pasaría muchas horas dos veranos después durante los JJOO. 'Mundo Deportivo' reveló que había pedido jugar un mano a mano con Severiano Ballesteros, del que dijo que era su golfista preferido por cómo se movía por el campo y su carácter competitivo y de campeón. Pero esos días el cántabro estaba jugando en Suiza y no fue posible que jugaran.

placeholder Uno de los mates de Jordan en aquel partido. (ACB Photo)
Uno de los mates de Jordan en aquel partido. (ACB Photo)

La explicación al cambio de planes en su viaje a España, por increíble que parezca, fue la Guerra del Golfo. "La versión oficial de su 'espantada' madrileña fue que no había confirmación exacta de la visita por parte de la organización y que al haberse complicado la situación en el Golfo pérsico el jugador había contraído el compromiso con el Embajador norteamericano en Alemania para quedarse en las bases alentando con sus exhibiciones a sus compatriotas militares. Porteriomente, después de madrugar mucho la pasada madrugada, no tuvieron oportunidad de encontrar un enlace para la capital española", informó 'ABC' el 30 de agosto.

Szczerbiak no recuerda si hubo un motivo bélico. "Fui a Alemania para facilitarle el viaje a España, pero Michael decidió coger su propio vuelo, imagino que un chárter individual. No te puedo decir, pero no me extrañaría que se hubiera ido a Mónaco a jugar al golf. Es solamente una opinión". Szczerbiak viajó a Barcelona junto a dos de las personas que acompañaban a Jordan en la gira y a las que ya conocía: Sonny Vaccaro y Howard White, dos personajes clave en la relación entre Jordan y Nike. Los dos trabajaban en la compañía de Oregón cuando firmaron el primer contrato en 1984. En la actualidad White todavía es vicepresidente de Jordan Brand, la marca que creó Nike alrededor de jugador y que en 2017 facturó casi 3.000 millones de dólares.

El día del partido, la agenda de Jordan, que se alojó en Hotel Princesa Sofía, incluía una visita a primera hora de la mañana a la sede de la ACB, otra a las obras de Montjuic para los JJOO, una rueda de prensa y la inauguración de unas instalaciones de Nike. En el pabellón, antes del partido, se celebró la final nacional del concurso Air Jordan. "Jordan disfrutó mucho del partido", dice Szczerbiak. "Respetaba mucho el talento de los jugadores que jugaron".

Con lo que no disfrutó fue con la fiesta posterior que organizó la liga porque no fue. "Eduardo (Portela) me dijo que lo intentara convencer, pero no hubo manera. No quería ir y disgustó a mucha gente", recuerda Szczerbiak. Jordan tenía otros planes y acabó la noche en la discoteca Up&Down, donde coincidió con varios jugadores. "Me invitó a su habitación a hablar de baloncesto. Estuve dos horas hablando con él y Howard White. Hablando de tipos de mates... Después de me fui y coincidimos en la discoteca", apunta el exjugador del Real Madrid. Días antes de su llegada, 'El País' informó de que Jordan había pedido que le consiguieran una audiencia con el Rey Juan Carlos I, algo que al final no sucedió. Aunque desconoce si se llegó a trabajar para que se celebrara, Szczerbiak no lo descarta por completo.

"No me importaría acabar mi carrera deportiva en España", declaró ante la prensa Jordan. No lo hizo, pero dos años después ayudó a escribir allí una de las páginas más importantes de la historia del baloncesto. En su visita de 1990 dijo que los siguientes JJOO no entraban en sus planes. El Dream Team era un sueño en aquel momento. Pero dos años después se hizo realidad.

Cada verano, muchas estrellas de la NBA se van de gira por Asia para promocionar los productos de las marcas que les patrocinan. China, Japón, Filipinas... en cada parada son recibidos por muchos aficionados deseosos de un autógrafo, una foto o un uno contra uno si tienen suerte. A finales de los 80 y principios de los 90, la expansión de la mejor liga del mundo comenzaba en mercados como el europeo, ahora ya conquistados. Al mismo tiempo, Michael Jordan se había convertido en el primer deportista-marca de alcance global de la mano de Nike. Esos dos aspectos están detrás de su viaje por el Viejo Continente en el verano de 1990, que incluyó una parada en España. A finales de agosto, el mejor jugador de la historia visitó Barcelona, pero no se dedicó solo a venderse. También jugó un partido.

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