Jayson Granger, un veterano en el cuerpo de un joven que lidera al Unicaja

Jayson Granger parece que lleva toda la vida jugando al baloncesto. A sus 25 años, esta es la octava temporada del jugador uruguayo en la ACB, en la que debutó en noviembre de 2007 con el Estudiantes. Del club colegial salió en el 2013 rumbo al Unicaja en busca de nuevos retos y un salto en su carrera que ahora, año y medio después, parece haber llegado. En el partido más importante del año, Granger respondió a la exigencia y acabo con 18 puntos en la victoria de su equipo contra en el Bilbao Basket en los cuartos de final de la Copa del Rey.

"Los que estuvimos el año pasado teníamos una espinita clavada, estabamos un poco presionados, pero por suerte este año hemos podido ganar", dijo en la rueda de prensa posterior, donde también mostró autocrítica: "Hemos hecho un partido completo en algunos aspectos, pero hemos sufrido en otros".

Desde el final de la temporada pasada, la mejora en el juego de Granger es evidente. Bajo el mando de Joan Plaza ha templado su juego, ha reforzado su capacidad defensiva y ha afinado su lanzamiento. Su rendimiento ha tenido recompensa en forma de confianza por parte del entrenador: es el jugador de Unicaja que más minutos está en pista.

Precisamente el entrenador catalán elogió a su jugador, que estaba sentado a su lado en la rueda de prensa. "El techo que tiene, ni él puede saberlo", dijo Plaza, que definió a Granger como "un currante al que le gusta esto del baloncesto". "Si sigue en esta línea es capaz de darnos muchas cosas. Es capaz de defender a cualquiera, incluso a cuatros. Es un tipo completo, aunque está lejos de su real capacidad. Su reto es querer ser mejor cada día".

"Tuve la suerte de llegar a Unicaja con un magnífico entrenador como es Joan Plaza, que me hace mejorar día a día. Él dice que lo importante es cómo acabes. Intento ser lo mejor jugador posible", explicaba Granger antes de la Copa a El Confidencial. En esa misma conversación, el charrúa aceptaba su condición de líder: "Llevo un año y medio en el club y asumo ese rol de líder, e intento ayudar en lo que el equipo necesita".

"Jayson, más que líder, tiene que tratar de ser un referente, sobre todo por la experiencia ue acumula ya en ACB y porque es su segunda temporada en Málaga. Debe tener esa responsabilidad. Pero somos un grupo sólido en el que todos deben aportar cosas. Él sigue creciendo, tiene muchísimo camino todavía por recorrer, mucho potencial, pero es cuestión de tiempo que siga evolucionando al ritmo que va", asegura Carlos Jiménez, secretario técnico de Unicaja.

Con mucha carrera aún por delante, este base al que confunden con Kobe Bryant es consciente de que tiene aún cosas que mejorar, como su dirección o su tiro exterior, pero ha alcanzado la madurez en su carrera. Dice que en Málaga está a muy a gusto, pero la NBA ya llama a su puerta. "No lo pienso. Si algún día me llega la oportunidad, si dios quiere que pueda ir a la NBA, pues encantado". Si repite el partido de ayer en la semifinal contra el Barcelona (sábado, 19:00 horas), seguró que la opotunidad estará más cerca.