La valentía del CAI en el festival de puntos no evita la clasificación del Real Madrid

El segundo semifinalista de los playoffs de la ACB salió del pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza. Pero probablemente, el Real Madrid habría agradecido llegar a esa penúltima ronda de forma más sencilla y no teniendo que dar absolutamente todo lo que tenían para eliminar al CAI. Ambos conjuntos alcanzaron una puntuación más propia de un partido con una o dos prórrogas, puesto que los blancos incluso superaron la centena de puntos. Ahora, ya esperan a su rival por un puesto en la final, que saldrá del duelo entre Unicaja Málaga y Herbalife Gran Canaria.

El CAI volvió a quedarse cerca del triunfo pero de nuevo sucumbió ante los blancos en un precioso partido de despedida de la temporada para sus aficionados. Los madridistas tuvieron que dar lo mejor de sí mismos, en un enfrentamiento en el que sólo en el último cuarto los blancos no llegaron a anotar veinte o más puntos, ante un rival que desde el primer minuto quería forzar el tercer partido y aunque tuvo algunas opciones para hacerlo terminó cediendo. Desde su primera acción de ataque los madridistas, con lanzamientos desde la línea de 6,75 plantearon el reto a los zaragozanos de ir a un partido con muchos puntos y, lejos de rehuirlo, los maños aceptaron gustosos y por poco no les salió bien.

El equipo de Pablo Laso salió decidido a anotar todo lo posible desde el triple y cuando no era capaz, empleó su mejor juego ofensivo posicional. En Zaragoza, además, no pudo emplear una de sus armas más características desde que Laso es entrenador, esto es, el contragolpe. Cuando se llegó al final del partido, el CAI había anotado más puntos a la contra que el Real Madrid, algo extraño conociendo las características del mejor equipo de la fase regular

Los blancos intimidaban con su potencia en el juego interior y su mayor estatura para capturar los rebotes. Tanto Bourousis como Mejri estuvieron enormes en el poste bajo y en su ausencia, aparecían Felipe Reyes y Nikola Mirotic para seguir sumando puntos. Con Viktor Sanikidze liderando a su equipo en uno de sus días inspirados, los zaragozanos protagonizaron un brillante primer cuarto que apuntaba a un partido con los dos conjuntos por encima de los cien puntos en su marcador final.

La profundidad de banquillo de los madridistas (Dani Díez fue titular y Rudy se reservó para jugar en momentos puntuales) se dejó notar durante algunos minutos en la recta final del segundo cuarto en la que mantuvieron su anotación y los maños tenían más problemas para encontrar el aro rival lo que les permitió alcanzar la máxima ventaja hasta ese momento a falta de minuto y medio, pero los locales querían irse vivos al descanso y lo lograron.

A los zaragozanos les costó algo arrancar en la segunda parte y vieron como su rival estiró un poco más la ventaja en el marcador, pero les contestaron con un parcial de 8-0 con dos triples para recuperar, aunque de manera efímera, el dominio en el marcador. Era esa la forma de decirle al Madrid que no iban a ganar fácil y que nunca se iban a marchar del partido. Laso decidió parar la sangría y le dio resultado ya que sus hombres volvieron con una mayor intensidad y consiguieron devolver el parcial a su rival, a todo ello se unieron algunas decisiones muy protestadas por los caístas que derivó en una técnica a Abós cuando pedía el mismo criterio arbitral en las dos zonas.

De ese río revuelto los más beneficiados fueron los madrileños que estiraron por primera vez su ventaja hasta una distancia de nueve puntos, aguantada hasta el final. El triple inicial del último cuarto de Rudy permitió a su equipo por primera vez romper la barrera de los diez puntos, pero lejos de dejar tocados a los maños la reacción llegó con dos triples consecutivos, con un Rudez decisivo en esos instantes. Laso recurrió a un tiempo muerto cuando el electrónico se puso 90-94 a falta de dos minutos y medio. Ahí se acabó el partido aunque los aragoneses tuvieron más de una opción para acercarse pero no fueron capaces de hacerlo.

Ficha técnica:

95 - CAI Zaragoza (29+22+24+20): Tabu (8), Tomás (4), Roll (15), Sanikidze (16) y Elonu (12) -cinco inicial- Llompart (4), Stefansson (3), Jones (13), Rudez (20) y Marín.

101 - Real Madrid (26+29+29+17): Llull (7), Darden (9), Díez (5), Mirotic (15) y Bourousis (11) -cinco inicial- Carroll (11), Mejri (6), Sergio Rodríguez (11), Reyes (13), Slaughter (3), Rudy Fernández (10).

Árbitros: Hierrezuelo, Araña y Manuel.

Incidencias: segundo partido de la eliminatoria de cuartos de final de la Liga Endesa disputado en el pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza ante 9.032 espectadores.