Zion Williamson o cómo dar el pelotazo sin haber debutado en la NBA (todavía)

Apenas acaba de cumplir Zion Williamson 19 años y ya tiene su vida y la de 10 reencarnaciones más (por decir una cifra) solucionada. Su número uno en el Draft estaba más que cantado, pero nadie esperaba que su llegada a la NBA fuera a suponer tal terremoto, el cual solo se puede explicar mediante cifras: en su primera temporada como profesional va a cobrar 9,7 millones de dólares, cantidad a la que nunca había llegado antes otro novato en la historia de la liga.

Zion tiene en su bolsillo asegurados, si cumple el contrato de cuatro años con los Pelicans, poco menos de 45 millones durante los próximos cuatro años. Una vez finalizado ese contrato, la franquicia de Nueva Orleans o cualquier otro equipo podrían ofrecerle uno nuevo, pero este ya sería por un montante mayor si suge la progresión esperada. Zion es el 'rookie' mejor pagado de la historia porque aunque Glenn Robinson firmara en 1994 con los Milwakee Bucks un contrato de 68 millones, esa oferta tenía truco: se hizo antes de que entrase en vigor la limitación de años para los novatos (que pasó de diez a cuatro). Al no existir tal condicionante antaño, los Bucks le ofrecieron contrato de novato por el máximo, 10 temporadas. Así las cosas, el dinero que percibió en su día Robinson por curso fue en realidad de 6,8 millones por los 11,25 de media que va a recibir el ex jugador de la Universidad de Duke, una diferencia muy apreciable.

Dentro de la nueva regla mencionada anteriormente el jugador que más se aproxima al contrato que ha firmado Zion es Bogdan Bogdanovic. Su caso también es peculiar. El serbio llegó en 2017 a los Kings, tres años después de que estos le seleccionaran con el número 27. Al no aterrizar en la liga inmediatamente su salario no se regió por la norma de los 'rookies', amasando 9,47 millones en su primera temporada. A pesar de todo, incluso ese contrato de primer año lo supera también Zion por unos 200.000 dólares, cifras que irán en aumento cada año que pase. Bestial.

Su relación con Jordan

Pero la realidad es que incluso ese altísimo salario se queda en una 'pequeñez' en comparación a lo que ya ha acordado con la marca Jordan Brand. Hay que remontarse unos meses en el tiempo, en concreto al 21 de febrero: Zion estaba disputando la temporada con Duke y esa noche tuvo partido ante Carolina del Norte, uno de los duelos más esperados del año (se llegaron a vender entradas por más de 2.000 dólares). Apenas habían transcurrido unos minutos y el mundo del baloncesto se quedó en shock: Williamson se resbaló sobre el parqué y su zapatilla Nike se rompió por completo. Este hecho hizo que las acciones de Nike se desplomaran en la Bolsa de Nueva York un 1,05%, lo que equivale a unas perdidas de más de 1.100 millones de dolares. La firma quedó en ridículo delante del mundo: todos habían visto como su material, que no es precisamente barato, se había partido en dos mitades en pleno partido universitario.

Todos se hacían la misma pregunta: ¿iba Zion a firmar con Nike para dar el salto a la NBA o escogería otro patrocinador después del suceso? Las quinielas indicaban que, a pesar del incidente, elegiría a Nike. Pero entonces apareció Jordan Brand (una filial de la empresa de Oregón), que si bien tiene el aval de ser la marca del mejor jugador de todos los tiempos (Michael Jordan) apenas dispone de mercado en el baloncesto profesional (solo Chris Paul y Russell Westrbook las calzan). Se lanzaron sin dudarlo en una jugada estratégica a por el 'pez gordo' del Draft y han conseguido pescarlo. La oferta: cinco años de contrato por los que recibiría casi 75 milones de dólares.

No acaba ahí la cosa porque además del acuerdo con Pelicans y Jordan Brand, Zion también ha alcanzado otro contrato que le convertirá durante los próximos tres años en la imagen del videojuego NBA2K. No se sabe cuánto va a percibir por este concepto, pero sí se puede afirmar que Williamson ha firmado en apenas unos pocos meses contratos por valor de más de 140 millones de dólares. Es el jugador que más impacto ha causado en la NBA desde LeBron James.

Sus mates espectaculares, su capacidad atlética, su poderoso salto y sus veloces arrancadas a pesar de sus 130 kilos hacen de él el mayor fenómeno universitario visto en muchos años en el baloncesto americano. En su única temporada en la Universidad de Duke registró 22,6 puntos, 8,9 rebotes, 2,1 asistencias, 2,1 robos y 1,8 tapones por partido. Su calidad ha sido alabada por muchos jugadores: el propio LeBron, Kevin Durant, Julius Randle... El mítico entrenador Roy Williams fue mucho más allá y llegó a compararlo con Michael Jordan: "Probablemente sea el mejor jugador que se ha visto en la escuela secundaria desde Michael".

Sin ni siquiera haberse estrenado todavía en la NBA, pues debutará en octubre, Zion tiene al mundo del baloncesto impaciente, mordiéndose las uñas. Todos esperan que domine la liga en unos pocos años con autoridad y aplastamiento. Lo que está claro es que, a su corta edad, ha roto el mercado.