Gran Canaria-Asvel, el partido infinito: tres prórrogas y un marcador altísimo (128-129)

Ludde Hakanson, jugador sueco del Movistar Estudiantes, tuiteó lo siguiente durante el Herbalife Gran Canaria-Asvel Villeurbanne jugado este miércoles por la noche: "El mejor partido que he visto nunca". En el momento de escribir ese mensaje ya se habían jugado 50 minutos y quedaban como mínimo otros cinco, pues el duelo encaraba su tercera prórroga.

Parecía que Granca y Asvel se habían propuesto no terminar de jugar nunca. El último partido del año en la Eurocup fue también el mejor, un festival de baloncesto que acabó con victoria visitante por 128-129, un resultado inusual no solo en la competición, sino en todo el baloncesto europeo, donde pasar de 100 puntos se considera casi una proeza.

Solo una vez un partido de la segunda competición continental ha durado más. Fue en 2009, en un ALBA Berlín-Bosna que acabó 141-127 tras cinco prórrogas. Esa anotación del equipo alemán es la más alta de la historia de la Eurocup, seguida por las dos de ayer. "Intentamos defender, pero anotaban de todas las maneras. Fue un partido muy, muy largo… Fue una locura y lo luchamos hasta el final, pero no pudimos ganar", declaró Luis Casimiro, técnico del Gran Canaria.

La exhibición de Roberson

El Asvel igualó el récord de triples con 20. Once de ellos los anotó un solo jugador, John Roberson, que realizó un partido para el recuerdo. Gracias a ese 11/16 en triples se fue hasta los 42 puntos, a los que sumó 4 rebotes y 8 asistencias. Es la cuarta mejor anotación de la historia de la Eurocup.

Pocas veces se ha visto en Europa a un jugador anotar como lo hizo Roberson este jueves. El estadounidense entró en trance en la segunda parte, cuando casi él solo igualó un partido que el Gran Canaria tenía controlado. Todos sus puntos los anotó a partir del tercer cuarto. Todos.