Garbajosa, a la ACB: si no me ayudas con lo que necesito, no te daré lo que quieres

Que los episodios más importantes (no los más interesantes) del baloncesto español y europeo se desarrollen en despachos a puerta cerrada no dice nada bueno de la salud de este deporte. Pero así están las cosas. Apenas ha comenzado la temporada y los conflictos se multiplican. Por un lado, FIBA y Euroliga siguen enfrentadas por un calendario sobrecargado que ninguna de las dos quiere aligerar. Por otro, ACB y Federación Española de Baloncesto (FEB) negocian un nuevo convenio para dar una solución definitiva a la reducción de la liga y los ascensos y descensos. 'A priori' son dos asuntos diferentes, pero están muy ligados.

En España, todo estaba solucionado con un principio de acuerdo en julio. Habían descendido dos equipos, habían ascendido otros dos y las condiciones de acceso a la Liga Endesa se habían suavizado. Pero un auto de un juzgado de Barcelona instando a la readmisión del Real Betis Energía Plus (uno de los dos equipos descendidos) acabó con ese panorama idílico. Por eso esta nueva negociación, otra vez con la mediación del Consejo Superior de Deportes (CSD). La ACB sofocó una rebelión de los grandes y aprobó el lunes una hoja de ruta para llegar a una liga de 16 y un solo descenso a partir de 2019, pero no vale de nada si la FEB no está de acuerdo. Y de momento no lo está.

La FEB dejó clara su postura este martes: antes de cualquier acuerdo sobre el tamaño de la ACB debe llegar la solución al conflicto entre FIBA y Euroliga por las ventanas de selecciones. "La Federación se mantendrá a la espera de la respuesta de Euroliga a la última propuesta presentada por FIBA y considera que no debe afrontar otros debates sobre modelo organizativo hasta tener una respuesta sobre las cuestiones más acuciantes", explicó. Teniendo clara esa postura se entiende todo su comunicado, donde la negociación con la ACB es un asunto secundario.

La Euroliga recibió este lunes una propuesta de FIBA para solucionar las ventanas de noviembre y febrero. La federación internacional propone adelantar la jornada de Euroliga del 23 y 24 de noviembre (días en los que coincidirán clubes y selecciones si no hay acuerdo) al 21 y jugar los dos encuentros de esa ventana entre el 24 y el 27. De momento, Euroliga no ha dado una respuesta definitiva, pero sí ha publicado un comunicado en el que critica la propuesta. La semana pasada ya sucedió algo parecido en sentido contrario.

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Con su postura, Jorge Garbajosa traslada un mensaje a la ACB: solo le dará lo que quiere si él recibe lo que necesita, que es un cambio de calendario para contar con la mejor selección posible (NBA al margen). "La FEB lo quería condicionar todo a eso", cuenta a El Confidencial uno de los representantes de la liga en la reunión que prefiere mantener el anonimato. La respuesta de la ACB es que ese asunto no depende de ella y no tiene capacidad para influir. Quizá el mensaje del presidente de la FEB va dirigido a los cinco equipos que juegan la Euroliga, los que más han presionado para reducir la Liga Endesa. Tres de ellos (Real Madrid, Baskonia y Valencia) estaban en el encuentro de este martes.

"Es normal que su prioridad sea la selección. Su preocupación porque no se clasifique en las ventanas la tenemos todos", dice el mismo representante. "Pero el problema de que la selección merme su calidad es de la NBA. No es justo que la federación hable solo de la Euroliga. Y la ACB no tiene nada de culpa porque para en las ventanas y nadie va a poner ningún impedimento si convocan a alguno de sus jugadores. Creo que esto es una estrategia".

Otra parte del comunicado de la FEB, la que dice que "el actual calendario de Euroliga supone un grave perjuicio para la convocatoria de jugadores durante la ventana fijada por FIBA para noviembre de este año", se contradice con lo dicho por Garbajosa la semana pasada. Entonces aseguró que la federación va conformar la mejor selección posible y que eso pasa por la convocatoria de los jugadores de Euroliga. "La Ley del Deporte nos ampara y estoy seguro y convencido de que el CSD va defender la participación de los jugadores que sean convocados", dijo.

Ahora la FEB se queja de que el calendario le perjudica para convocar a esos mismos jugadores. ¿Significa eso que va a dar marcha atrás en su intención? ¿O ya da por descontada una respuesta negativa de los convocados? Este lunes, en la presentación de la Liga Endesa, ni el español Joan Sastre ni el uruguayo Jayson Granger, dos de los que están en esa situación, se mojaron. "Estamos un poco al margen. Solo esperamos que se llegue a un acuerdo lo antes posible", declaró el alero del Valencia Basket, medallista con España en el último EuroBasket.

Del texto se desprende también un mensaje poco elegante para los jugadores que no juegan NBA ni Euroliga. "La FEB manifiesta su preocupación por la amenaza de que la selección española no pueda participar en campeonatos internacionales hasta el año 2021", reza el titular del texto. La FEB no oculta su preocupación por el nivel del equipo que pueda tener Sergio Scariolo a sus órdenes en las ventanas si no hay un acuerdo por el calendario. Y al hablar de la amenaza de quedarse fuera de la Copa del Mundo 2019 (y como consecuencia de eso, también fuera de los JJOO de Tokio 2020), la federación pone en duda que la selección pueda cumplir sus objetivos sin jugadores que compitan en NBA y Euroliga.

Posturas "alejadas" por los ascensos

La FEB asegura que su postura y la de la ACB "se encuentran alejadas" y "resalta la importancia de respetar los acuerdos adoptados el pasado mes de julio para la temporada 2017-18 por la Asamblea General", que estableció dos ascensos (así lo recogen las bases de competición de la Liga LEB Oro para esta temporada).

La principal diferencia entre la propuesta aprobada este lunes por la ACB y el acuerdo del mes de julio es que ahora la liga no incluye una compensación anual de 500.000 euros a la FEB.