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Raúl López, Marc Gasol y Carlos Cabezas celebraron el anillo con Pau en Los Ángeles
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'EL SEÑOR DE DOS ANILLOS' HABLA PARA EL CONFIDENCIAL

Raúl López, Marc Gasol y Carlos Cabezas celebraron el anillo con Pau en Los Ángeles

"Esto es como encontrarte una lámpara, frotarla, que te salga el genio y pedirle los tres deseos. Dos ya se han cumplido. Tan sólo falta uno

Foto: Raúl López, Marc Gasol y Carlos Cabezas celebraron el anillo con Pau en Los Ángeles
Raúl López, Marc Gasol y Carlos Cabezas celebraron el anillo con Pau en Los Ángeles

"Esto es como encontrarte una lámpara, frotarla, que te salga el genio y pedirle los tres deseos. Dos ya se han cumplido. Tan sólo falta uno y espero que se cumpla pronto", decía Pau Gasol, -'El Señor de Dos Anilos'- a El Confidencial horas después de terminar el séptimo partido de la final de la NBA y que significó la conquista del segundo anillo por parte del jugador español. Pau estaba radiante y así se lo hizo saber a sus amigos que estaban presentes en el Staple Center y a su familia, empezando por sus padres y terminando por un Marc Gasol que fue de los primeros en abrazar al campeón de la NBA nada más terminar el choque contra los Boston Celtics.
 
Todavía manchado en sudor, y con las heridas de la batalla aún frescas, el pivot de los Lakers fue al rincón español del pabellón angelino. Allí estaban las personas de confianza del pivot. Estaba Enrique, junto a Pepe, Joaquín, compartiendo palco junto a Marc Gasol y su amigo Raúl López. Unos asientos más arriba se encontraba Carlos Cabezas, que actualmente milita en la Liga rusa. Repartió abrazos, lágrimas y sobre todo felicidad, que la hizo extensiva a su familia. El punto culminante llegó cuando Kobe Bryan, en pleno festejo del título dijo, sin rubor, que: "Sin el español no hubiera sido posible". Y Gasol que creció otros tres centímetros más.
 
La fiesta siguió en el pabellón angelino. No hizo falta buscar un sitio para la celebración del mejor equipo del baloncesto actual. La sonrisa de Gasol era el fiel reflejo del triunfo, del éxtasis del triunfo. "No podíamos perder ante Boston, en casa, en el séptimo partido. Hubiera sido un drama y un fracaso". Siguió con el análisis: "Estoy en un a nube. Miro lo logrado y pienso ufffffffff". Gasol sabe que ya está entre los elegidos, que no son otros que los ganadores del anillo NBA por partida doble."
 
Gasol recibió los mensajes de los internacionales españoles concentrados en Sudáfrica y no reparó en elogios hacia ellos. "Van a hacer algo grande. Muchas gracias por haber estado pendiente de mí, pero en los últimos mundiales sabe que no puedo estar que mi cuerpo necesita descanso".
 
En cuanto a la presente temporda, la despidió diciendo que "todos hemos merecido el triunfo, pero nosotros aún más por el esfuerzo dedicado. Kobe es el mejor y lo seguir haciendo", afirmó un radiante Pau.

"Esto es como encontrarte una lámpara, frotarla, que te salga el genio y pedirle los tres deseos. Dos ya se han cumplido. Tan sólo falta uno y espero que se cumpla pronto", decía Pau Gasol, -'El Señor de Dos Anilos'- a El Confidencial horas después de terminar el séptimo partido de la final de la NBA y que significó la conquista del segundo anillo por parte del jugador español. Pau estaba radiante y así se lo hizo saber a sus amigos que estaban presentes en el Staple Center y a su familia, empezando por sus padres y terminando por un Marc Gasol que fue de los primeros en abrazar al campeón de la NBA nada más terminar el choque contra los Boston Celtics.
 
Todavía manchado en sudor, y con las heridas de la batalla aún frescas, el pivot de los Lakers fue al rincón español del pabellón angelino. Allí estaban las personas de confianza del pivot. Estaba Enrique, junto a Pepe, Joaquín, compartiendo palco junto a Marc Gasol y su amigo Raúl López. Unos asientos más arriba se encontraba Carlos Cabezas, que actualmente milita en la Liga rusa. Repartió abrazos, lágrimas y sobre todo felicidad, que la hizo extensiva a su familia. El punto culminante llegó cuando Kobe Bryan, en pleno festejo del título dijo, sin rubor, que: "Sin el español no hubiera sido posible". Y Gasol que creció otros tres centímetros más.
 
La fiesta siguió en el pabellón angelino. No hizo falta buscar un sitio para la celebración del mejor equipo del baloncesto actual. La sonrisa de Gasol era el fiel reflejo del triunfo, del éxtasis del triunfo. "No podíamos perder ante Boston, en casa, en el séptimo partido. Hubiera sido un drama y un fracaso". Siguió con el análisis: "Estoy en un a nube. Miro lo logrado y pienso ufffffffff". Gasol sabe que ya está entre los elegidos, que no son otros que los ganadores del anillo NBA por partida doble."
 
Gasol recibió los mensajes de los internacionales españoles concentrados en Sudáfrica y no reparó en elogios hacia ellos. "Van a hacer algo grande. Muchas gracias por haber estado pendiente de mí, pero en los últimos mundiales sabe que no puedo estar que mi cuerpo necesita descanso".
 
En cuanto a la presente temporda, la despidió diciendo que "todos hemos merecido el triunfo, pero nosotros aún más por el esfuerzo dedicado. Kobe es el mejor y lo seguir haciendo", afirmó un radiante Pau.

Marc Gasol