Ruth Beitia termina quinta y España firmará una medalla en este Mundial

No pudo ser. Ruth Beitia no logró subirse de nuevo al podio en un Mundial de atletismo. El 2,01 fue su bestia negra en El Nido de Pekín a donde llegó como una de las aspirantes a medalla, después de haberse colgado el bronce hace dos años en Moscú 2013. La capitana de la selección española no pudo cumplir con las expectativas de medalla con las que llegaba a esta cita y su salto a la primera en 1,99 le valió un quinto puesto. "Me voy triste y con mal sabor de boca, tenía expectativas de algo más. Me encontraba bien y estaba saltando bien. No sé lo que ha fallado. Estaba para saltar más", aseguró tras la final.

El listón en la final comenzó en 1,88. Ahí Beitia no tuvo problemas y tampoco en el 1,92, donde también saltó a la primera y dejó buenas sensaciones. Fue ahí donde empezaron a caer algunas rivales. Ana Simic, Levern Spencer, Mirela Demireva, Svetlana Radzivil y Doreen Amata no pudieron superar esta altura y cayeron eliminadas, quedando ocho atletas en competición. El listón iba subiendo y el 1,95 se le resistió a la española en el primer intento. En el segundo no tuvo problemas y superó el 1,95. Las rivales siguieron yendo a menos y ni Eleanor Patterson, ni Jeanelle Scheper pudieron seguir adelante.

Sólo seis de las trece atletas que comenzaron la competición pudieron llegar al 1,97. Y ahí Ruth Beitia no se vino abajo, se creció y saltó a la primera ante la atenta mirada desde la grada de su inseparable entrenador Ramón Torralbo. Lo mismo sucedió con el 1,99. La cántabra sólo necesitó un salto para seguir adelante en la competición y presentarse con todas las credenciales en el 2,01.

Sólo la rusa Maria Kuchina, sin ningún nulo en toda la prueba, y la croata Blanka Vlasic fueron capaces de saltar a la primera el 2,01 y seguir intratables en la competición. A la campeona olímpica, la rusa Anna Chicherova, a la polaca Kamila Licwinko, a la Alemana Marie-Laurence Jungfleisch y a Ruth Beitia les tocó seguir luchando. Pero la única que no falló fue Chicherova, que logró superar los dos metros en el segundo intento. La alemana Jungfleisch,la polaca Kamila Licwinko y la española Ruth Beitia cayeron eliminadas.

La capitana de la selección terminó quinta en una de las finales más exigentes de la historia de salto de altura en la que sólo tres atletas consiguieron superar los dos metros, un listón muy alto. Kuchina realizó tres nulos sobre 2,03 pero terminó llevándose el oro al haber llegado sin ningún nulo. La rusa lograba así la primera medalla de su carrera deportiva en un Mundial. Vlasic finalizó segunda con tres nulos también en 2,03 y otro que había realizado en 1,92. La croata demostró que vuelve a estar al más alto nivel tras pasar por momentos complicados por las lesiones. Chicherova terminó tercera, al acumular dos nulos, en 1,97 y en 2,01, además de los tres en 2,03.

Aunque había expectativas de medallas después del bronce logrado en Moscú 2013 con un salto de 1,97, Ruth Beitia, que afrontaba su séptimo Mundial y su quinta final mundialista, puede marcharse satisfecha de Pekín, donde a sus 36 años logró terminar como la quinta mejor saltadora del mundo con un salto de 1,99. Con este resultado, España terminará con una medalla en este campeonato del mundo, la lograda por Miguel Ángel López en los 20 kilómetros marcha.