Vivas se contagió de Simeone para triunfar en Europa "lanzamiento a lanzamiento"

Borja Vivas (Málaga, 1984) ha sido el encargado de romper el hielo en el medallero en el Campeonato de Europa de Atletismo que se está disputando en Zúrich. El malagueño se colgó la plata en peso después de firmar un lanzamiento de 20,86. Un hito para el atletismo español que por primera vez se subía al podio en esta disciplina en un campeonato internacional al aire libre. Vivas ya está en Málaga, llegó ayer por la tarde tras un largo viaje desde Zúrich. “El viaje todo bien, cuando uno viene contento, todo pasa mejor”, reconoce a El Confidencial. El subcampeón de Europa de peso analiza, todavía muy emocionado, todo lo que ha vivido en las últimas horas.

Pregunta: ¿Qué tal Borja? ¿Has asimilado ya que eres subcampeón de Europa?

Respuesta: “Sigo un poco en esa nube, a medida que pasan las horas lo vas asimilando y lo vas valorando cada vez más. Todavía sigo recibiendo muchas felicitaciones, muchas llamadas y por ahora, todo es muy raro pero bonito.

P: ¿Ya sabes lo que vas hacer con la medalla?

R: Ahora mismo tenerla aquí para enseñársela a todos mis amigos y a todo el mundo. Que la cojan porque la verdad es que pesa bastante y es muy bonita. Después, la guardaré junto a un montón de recuerdos que me traigo, fotos, la camiseta, el dorsal… Esto es para recordarlo para siempre. Esto no se regala, me lo quedo yo, hasta que vaya conmigo a la tumba.

P: ¿Ya lo has celebrado en Zúrich? Y en Málaga…

R: El mismo día que conseguí la medalla estaba la expedición cenando cuando y allí lo pudimos celebrar. Al día siguiente, con la familia que estaba en Zúrich también pudimos pasear por el centro y estar con ellos. Y ayer, en Málaga con mis amigos, que son los verdaderos forofos, también lo celebré.

P: ¿Cuál fue tu secreto para mejorar y dar ese salto que te ha permitido estar entre los primeros?

R: La mentalidad cambió bastante. Hubo un día, después de los Juegos de Londres, donde no salió como yo quería, que cambié algo en la cabeza. Dije: ‘Hasta aquí podemos llegar’. Es verdad que lo de ir a competir a los sitios por la experiencia y demás está bien, pero lo de poner excusas ya se tenía que acabar. Había que empezar a cambiar esa mentalidad. Y así fue. Desde el año 2012, todavía me costó. He seguido compitiendo, algunas veces mejor y otras peor. Este año, la verdad que la cosa ha ido bastante bien. El nivel del peso ha crecido mucho en España y teníamos muy buenas competiciones. Creo que ha sido un cúmulo de cosas.

P: Si no me equivoco… ¿eres del Atleti verdad?

R: Soy del Málaga como buen malagueño pero aficionado del Atleti de toda la vida.

P: Y… ¿te has fijado en el Atleti del año pasado? ¿En ese espíritu de Simeone?

R: La verdad es que sí me he contagiado. Si te pones a analizar, al final es ir poco a poco sin tener ninguna pretensión mucho más alta. Ir competición a competición. A medida que iban pasando iba mejorando pero sin subirse a la nube, siempre con los pies en el suelo y sabiendo que se pueden conseguir muchas cosas. Pero hasta ayer que cogí la medalla, no habíamos conseguido nada. Hay que ir poco a poco. Ahora que uno lo ha conseguido, igualmente seguimos tranquilos porque hay que asimilarlo, pero ya la cosa cambia y ya la mentalidad hace que crezcamos un poco.

P: Manolo Martínez ha dicho que todavía te queda mucho margen de mejora, ¿dónde ves tu techo?

R: Uno cuando cumple los 30 años sí que ve la retirada más cerca que cuando empezó. Eso es lógico a medida que pasa el tiempo. Pero sí es cierto que mi momento llegó más tarde de lo normal. Se puede decir que igual no he ido quemando otras etapas que sí que han tenido otros rivales que de joven han despuntado más y seguramente hayan entrenado mucho más que yo. Cada situación es un mundo. En mi caso, lo hemos ido haciendo poco a poco. Cuando teníamos que llevar los estudios para delante, los hemos llevado, cuando hemos tenido que hacer otras cosas pues igual. Es verdad que en los últimos años, ya me estoy dedicando en exclusiva a esto. Parece que ahora va la cosa bien y, aunque nunca se sabe porque mañana te puedes lesionar y que la cosa cambie, en principio, me noto mucho más fuerte, mucho más feliz y con muchas más ganas que hace cinco años cuando se suponía que era más joven y tenía que estar mejor. Así que la edad no deja de ser un número y lo que tenemos que hacer es tener muchas ganas.

P: Hablas de estudios… ¿Qué estudiaste?

R: Estudié Empresariales en Málaga y he terminado Administración y Dirección de Empresas en la Universidad Católica de Murcia (UCAM). Además, tengo un Máster en Dirección y Gestión Deportiva. Es importante ir formándose porque el atletismo no es un deporte de masas ni mayoritario como el fútbol donde puedes jugar unas temporadas y retirarte. Aquí ni mucho menos. Desde el primer momento sabía que había que seguir formándose. Me sigo planteando que si puedo y tengo tiempo quiero seguir.

P: ¿Dónde te marcas tu próximo objetivo?

R: El objetivo a largo plazo se puede decir que son los Juegos Olímpicos de Río. Quedan dos años, parece que queda mucho pero los entrenadores, que son los que planifican, saben que tenemos una temporada y media para preparar los Juegos. Parece que es a largo plazo, pero eso es lo que realmente quiero preparar bien. Obviamente, el año que viene tenemos Europeo de Pista cubierta, en el cual no sé si rememorar la medalla pero por lo menos intentarlo y hacerlo bien. Y también tenemos un Mundial al aire libre (Pekín) y son retos que son muy grandes y también tenemos que ir planteándonos.

P: Los dos atletas que habéis conseguido medalla sois de la UCAM, ¿qué significa la UCAM para ti?

R: Significa muchísimo. Hace un par de años ellos confiaron en nosotros. Todos nos asombramos porque es una cosa que no suelen hacer las Universidades en España, pero por ejemplo en Estados Unidos, que tan buenos deportistas tienen, pues es lo normal que hacen, fomentar el deporte y el estudio. Parece muy simple y muy sencillo, que todo el mundo lo ve bien, pero en la práctica es complicado. Lo que hacen ellos es darte una ayuda para que puedas estudiar una carrera con ellos, darte todas las facilidades del mundo para cambiar los exámenes, para poder ir a clase cuando puedas... A cambio simplemente te piden que estudies. Lo que tiene que tener todo el mundo claro es que el deporte, al fin y al cabo, es una etapa en tu vida, pero que cuando se termina tienes que ponerte a trabajar como el resto de la gente. Así que, qué mejor que tener algo de formación. Creo que no es poco que te ayuden sin recibir nada a cambio. Todo es agradecimiento.

P: ¿Cómo estás viendo al equipo español en el Europeo?

R: La verdad que hay un ambiente que hacía mucho tiempo que no se vivía. Desde la llegada de Ramón Cid (Director Técnico de la RFEA), el ambiente cambió mucho. Hemos pasado momentos malos en los que el nivel del atletismo español no pasaba por el mejor momento, pero parece que la cosa está cambiando. Hay muchísima gente motivada y, gracias a Dios, yo fui el primero en conseguir una medalla, lo que supuso una inyección para que todos se crecieran. Al fin y al cabo, yo he sido uno más que ellos. He competido muchas veces en las que me ha salido mal y al final, lo que quiero es transmitirles es que a todos nos llega nuestro momento, tarde o temprano.

P: Dijo Ramón Cid que habría entre 4 y 6 medallas… ¿Las ves factibles?

R: Es verdad que el nivel es bueno. Hay mucha gente que se está metiendo en finales, hay muchas finales que tenemos pendientes y al final, eso es como un chorro de aire fresco que nos llega a todos y todo el mundo se enchufa en ese aire para seguir adelante. Ojalá pudiéramos conseguir más de seis medallas. Es verdad que ellos son los grandes entendidos en la materia y si hacen esos cálculos ya tendrán bien hecho el estudio. Yo no lo he hecho mucho pero ojalá que sean seis y si pueden ser ocho muchísimo mejor.

P: Ya que el Europeo es en Zúrich… ¿Has aprovechado para abrirte una cuenta en Suiza?

R: (Risas) Ya quisiera. Todavía no he recibido nada, así que poco he podido abrir. Hemos estado paseando por ahí. Es un país extremadamente caro, supongo que el nivel de vida será muy alto y eso incitará a la gente a abrirse cuentas, pero lo máximo que he hecho ha sido gastar el poco dinero que tengo con la familia, así que he vuelto con saldo deudor más que acreedor. La ciudad es muy bonita, se ve todo bastante lujoso y beber y comer es muy caro en comparación con nosotros, pero me ha gustado. Eso sí, no lo cambio por Málaga ni por España por muy bien que esté.