En España nadie se atreve a sancionar a un 'problema' llamado Marta Domínguez

Marta Domínguez se ha convertido en un problema. Colgada esa cinta rosa, teñida en negro por cierto, que la convirtió en envidia de muchos por sus triunfos deportivos, su presente habla de la atleta como un auténtico marrón para esos políticos que dieron la cara por ella y que la defendieron por encima de todas las evidencias que la rodearon durante su carrera. El expediente abierto por la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) sigue sin resolverse. Ninguna institución española se atreve a sancionar a una senadora del Partido Popular que, además, es protegida directa de Mariano Rajoy. La IAAF se impacienta, quiere una sanción y España no responde. Calla.

La única actividad que se le conoce a Marta Domínguez es la de senadora, incluso ha tenido que pasar un control en el Senado. El atletismo lo aparcó de manera obligada por el expediente abierto, mientras que la competición terminó con su última carrera por la zona mixta del Olímpico de Londres para evitar dar explicación alguna sobre su triste aparición por los Juegos. Sus siguientes apariciones fueron simbólicas.

La IAAF se impacienta y ya prepara un recurso al Tribunal Superior de Arbitraje (TAS) ante la incapacidad de los órganos rectores españoles para sancionar durante cuatro años a la senadora. Saben que su carrera ha terminado, pero quieren que lo haga de la manera que según ellos se merece, que no es otra que sufriendo un castigo por las anomalías que padeció su pasaporte biológico. La sombra que la persigue, según la IAAF, es la de la transfusión sanguínea en 2009, año en el que se proclamó campeona del mundo.

La Federación Española de Atletismo envió el expediente a la Comisión Nacional Antidopaje del Consejo Superior del Deporte (no tenía potestad para sancionarla), que, tras estudiar detenidamente el caso, más de lo permitido por la IAAF, que en este caso amplió el plazo, lo reenvió a la Federación. Hablan de presiones políticas, de la sombra de Rajoy, de la defensa a ultranza hecha por algunos, pero lo cierto es que pasa el tiempo y nadie sabe qué hacer con Marta Domínguez y su expediente.

La que para José María Odriozola, presidente de la Federación, es la mejor atleta de la historia "porque lo dicen los resultados y nunca ha dado positivo; cualquier deportista es inocente mientras no se demuestre lo contrario" sigue siendo senadora e incluso haparticipado en reuniones de la Comisión de Educación y Deporte de la que es portavoz, relacionadas con el dopaje.

La IAAF habla de presiones gubernamentales y del propio Rajoy, que siempre ha respaldado a la fondista. Lo cierto es que el expediente abierto a Marta Domínguez sigue dando tumbos a la espera de un fallo que nadie quiere asumir en España. Todo hace indicar que será el TAS el que actúe, tal y como lo ha pedido la IAAF. En el limbo y sin explicación continúa, el famoso 'Urko' (nombre de su perro) de la Operación Puerto y su relación con Eufemiano Fuentes. El caso de la Operación Galgo, en el que también aparecía, quedó cerrado sin señalar a la ahora política.