A Txikon sólo le quedan dos balas: se estrecha el margen para subir al Everest

Calma tensa en el Campo Base del Everest ante los partes meteorológicos de la tarde del domingo 18 de febrero. Esa información, debidamente cotejada con otros datos, va a determinar si la expedición partirá hacia la cumbre el martes 20 o miércoles 21. No hay más margen.

Cuando escribo esta crónica recibo un mensaje de Lorea Bilbao, diputada foral de Vizcaya, y persona imprescindible para que esta expedición haya sido posible: “Debe ser una experiencia vivir la naturaleza a ese nivel”. Le contesto que sí, sin entrar en detalles. “No calificaría el Campo Base del Everest como un lugar encantador”, escribía Jan Morris, el periodista de 'The Times' que acompañó a la expedición que coronó por primera vez la montaña más alta del mundo en 1953. “Se trata de un sitio demasiado inerte y apartado para ser bonito”.

Avalanchas diarias

Estás rodeado de un paisaje que te sobrecoge, con el pico Pumori y la Cascada de Khumbu como protagonistas. Con avalanchas diarias, algunas de ellas nocturnas. Pasear sobre hielo glaciar y piedras no es un buen modo de hacer ejercicio. Transcurren casi todas las horas en la tienda comedor y las restantes en tu tienda de altura, durmiendo o intentándolo cuando el viento se empeña en que no lo hagas. Un lugar inhóspito, rodeado de una belleza inalcanzable para el común de los mortales.

La colisión de la placa tectónica de la India con la del Tibet creó el Himalaya. La cima más alta de la Tierra se gestó en una de las simas más profundas. En la franja de roca amarilla que raya el Everest, justo por debajo de la cumbre, se encuentran cuerpos fosilizados de organismos que vivieron en el mar de Tetis hace cientos de millones de años. Montañas onduladas y suaves en sus orígenes. Las irregularidades que hoy vemos son obra de la erosión, los terremotos y los glaciares. El más espectacular de ellos, el Circo del Glaciar del Khumbu, es el que nos rodea.

Cada día, a las 18 horas, el equipo de Alex Txikon recibe los partes meteorológicos, que están situando la ventana de cumbre para el 24 o 25 de febrero. En consecuencia, la salida del Campo Base podría ser el 20 o el 21 de febrero. Esto es como la brisca. Todo se resuelve en las tres últimas jugadas. Pero con una singularidad: las cartas que tienes pueden cambiar en cualquier momento de la partida. Emoción máxima.

Comunicaciones y seguridad

La tecnología que portarán los miembros del equipo que van a intentar la primera la cumbre invernal y sin oxígeno tiene varios propósitos: la comunicación entre los campos de altura y el Campo Base; la comunicación de seguridad con el Centro de Coordinación de Emergencias, y también mantener el contacto con los muchos seguidores de la expedición a través de las redes sociales.

¿Qué dispositivos de comunicación utilizarán entre los campos de altura? Unos walkie talkies recios, pesados y con una singularidad: el menú esta en chino. “Son durísimos, solo tienes que tener la precaución de llevarlos pegados al pecho, porque a 10 grados bajo cero se muere la batería”, nos explica Alex. Estos walkie todoterreno son de la agencia nepalí que organiza la expedición.

¿Y el arsenal de seguridad? Alex y Temba Bothe llevarán un inReach de Garmin, y Ali Sadpara, un Spot. Son instrumentos que proporcionan comunicación vía satélite y, actualmente, los más eficaces en cuanto a localización en caso de emergencia, así como en facilitar a los alpinistas una llamada SOS. En el caso de Garmin, su GPS asegura la movilidad en montaña pero, además, permite comunicar a través de SMS vía satélite y también recibir y enviar mensajes a un móvil o a una dirección de correo electrónico. Quizá haría bien la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada en negociar con estos fabricantes para ofrecer, en condiciones ventajosas, este tipo de dispositivos de alta seguridad a sus federados.

Posición de Alex Txikon geolocalizador Garmin/Racetracker

http://racetracker.es/rt/alextxikoneverestwinter18

Escenas de la vida cotidiana en el Campo Base

Ringi tiene cara de bueno. Debe serlo. Y los gorriones y las chovas de pico amarillo lo saben. Se sienta y pone granos de arroz en sus manos; los gorriones lo festejan. Cuando otros miembros de la expedición lo intentan, los pajarillos recelan.

Él es quien manda en la cocina sherpa. Nos trae paños húmedos y calientes para limpiar las manos antes de comer. También nos acerca la comida y el agua caliente para hacer infusiones. Con las decenas de cuervos que sobrevuelan nuestras tiendas y acaban con los restos de comida, Ringi no tiene ningún trato.