Uribes, a preguntas de un senador... y periodista: "No estoy aquí para responder con quién como"

El presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), José Manuel Rodríguez, compareció hace unos días en la Comisión de Educación, Formación Profesional y Deportes del Senado. Con un talante conciliador y exquisitos modales, su discurso fue mayoritariamente cuestionado por falta de concreción. El que ya fuera ministro en materia deportiva —entonces con Cultura— solo estuvo a punto de perder la compostura ante la batería de preguntas del portavoz del grupo popular, Vicente Azpitarte.

"Me ha hecho usted más un interrogatorio o una entrevista. Como es periodista de profesión, igual esa deformación le ha llevado a eso, pero yo no estoy aquí para responder con quién como, con quién no, cuándo como o si me llevaba bien o mal", respondió Uribes a la pregunta de Azpitarte sobre su relación con Luis Rubiales, el inhabilitado e imputado expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), y el presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco.

"Esto parece más una rueda de prensa que una interpelación parlamentaria", se había quejado anteriormente el quinto secretario de Estado para el Deporte de Sánchez. Sin embargo, en este turno de réplica no se aguantó. "La verdad, señor Azpitarte, estaba pensando por qué estamos en dos códigos tan distintos. Su lenguaje, su estilo, mi lenguaje, mi estilo... A lo mejor tiene que ver con nuestros maestros. Usted tiene un maestro (se supone que en referencia a Jiménez Losantos, con quien Azpitarte trabajó en la emisora esRadio), yo tengo otro (no dijo quién), y es verdad que son muy distintos".

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"Me ha dicho usted que soy muy inteligente y a la vez que he sido el peor ministro de la historia", prosiguió Uribes visiblemente molesto con las incisivas preguntas del portavoz popular, aunque sin levantar la voz y manteniendo en todo momento la compostura. "Será que todo es compatible. Pero yo no soy tan inteligente ni tampoco creo que haya sido el peor ministro de la historia. Las cosas son siempre más matizables, pero usted es más de vuelo corto", añadió el valenciano, consciente de que su interlocutor sabía lo que le preguntaba y, sobre todo, por qué se lo preguntaba. .

...Y por fin habló de Rubiales, aunque sin nombrarle

"Como es periodista, puede leer la hemeroteca", le aconsejó. "En enero de 2020, el diario El País me hizo una entrevista y me preguntó por la Copa (sic) en Arabia Saudí. Lea usted lo que respondí. Sobre Rubiales, sobre la Copa (sic). Era enero de 2020, y yo llevaba cinco días de ministro, por lo que solo era el planteamiento reflexivo que podía hacer sobre una decisión que no me gustó desde el primer momento. No teníamos ningún tipo de idea, como hemos conocido después, hace muy poquito, de lo que estaba pasando", se excusó el presidente del CSD, aunque para entonces las oscuras maniobras de Rubiales ya habían sido denunciadas por este medio.

"Usted insiste en llamarme Rubiales o decir que éramos íntimos. La manipulación, el enredo, la tergiversación, yo los llevo mal", dijo Uribes

Y llegó el momento más tenso de las casi cuatro horas que duró la comparecencia de Uribes en el Senado. "Pero, bueno, usted insiste en llamarme Rubiales (Azpitarse se confundió y en una ocasión iba a llamar a Uribes, Rubiales, de lo cual se disculpó) o decir que éramos íntimos. Haga usted lo que quiera. ¿Qué hago yo ante eso? ¿Contestarle? Contestarle es descender a un nivel al que no soy capaz y en el que estoy seguro de que usted me va a ganar. Ni soy capaz desde el punto de vista ético, ni me veo en condiciones de igualdad de armas para competir con usted. Me va a ganar seguro. La manipulación, la tergiversación, el enredo, es verdad que yo los llevo mal y me defiendo mal", aseguró sin poder disimular más su enfado.

Para ir acabando, pues el tiempo se le agotaba, el presidente del CSD dijo: "Voy a contestar a sus preguntas, pero a las que se pueden contestar. Las que son serias o pueden tener un complemento más objetivo". De esta forma, se negó a comentar su estrecha y cómplice relación con los "hermanos" Blanco y Rubiales y, por ejemplo, explicó que "Del Bosque lo que ha hecho es poner sentido común", en referencia a la Comisión de Supervisión, Normalización y Representación creada para tutelar la RFEF, según Uribes, "formada por una representación de la sociedad civil, con hombres buenos y de prestigio".

Su postura sobre las lecciones en la RFEF

"Si nombramos a Del Bosque es que no hay voluntad de injerencia", añadió el secretario de Estado, quien recordó a Azpitarte que. "yo no voto y usted tampoco, pero sí deseo que como presidente de la RFEF salga elegida una persona con altura de miras y capacidad de diálogo, que no esté en el foco de la polémica". Aunque hubo quien lo interpretó así, en ningún momento Uribes propuso a Del Bosque como candidato, sino que dijo que "un perfil como el del ex seleccionador sería el adecuado para presidir la RFEF".

"Yo no voto y usted tampoco, pero sí deseo que como presidente de la RFEF salga elegida una persona que no esté en el foco de la polémica"

Respecto a la candidatura de España junto a Marruecos y Portugal para organizar el Mundial de 2030, que la FIFA debe aprobar definitivamente el próximo 11 de diciembre, Uribes divagó con comentarios como que "responde al liderazgo de nuestro país y del presidente del Gobierno" o que “espero que podamos incorporar como sedes a Vigo y Valencia, si hacen sus deberes". Para acabar a lo Mahatma Gandhi diciendo que "este Mundial también contribuirá a la paz en el mundo".

Aunque es verdad que sus preguntas más importantes no obtuvieron respuesta, si de algo sirvió la incisiva interpelación del senador Azpitarte fue para demostrar que mientras los políticos preguntan —y responden— lo que les interesa a ellos, los periodistas preguntan lo que interesa conocer a la gente. En el caso de Uribes, que confesara su estrecha relación con Rubiales y Blanco, la cual le costó a Irene Lozano el cargo que precisamente ahora él ostenta.

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La vueltas que da la vida, aunque el único que permanece en el mismo sitio es el superministro de Sánchez, a la sazón presidente del COE, a quien Uribes ha descubierto ahora que no está por encima de él. De ahí la pertinente pregunta de Azpitarte sobre el deterioro de su relación con un Blanco al que tanto molestó que este periódico recordara el papel de su hijo en la polémica tesis del presidente del Gobierno. Clave para entender el porqué de su influencia sobre Sánchez y el título de superministro. Es decir, por encima de Alegría y, por supuesto, Uribes.