Estrellas de la NBA extienden la protesta al resto de deportes por la muerte de Floyd

LeBron James, Jaylen Brown, Steve Kerr y otros deportistas estadounidenses expresaron su indignación en las redes sociales por la muerte de un hombre afroamericano tras una detención violenta en el estado de Minnesota. Cuatro policías de la ciudad de Minneapolis, al norte de Estados Unidos, fueron despedidos el martes pasado a raíz de la difusión de un vídeo en el que se ve durante minutos a un agente blanco apretar con una rodilla el cuello del detenido, George Floyd, quien posteriormente murió en el hospital. Las duras imágenes y el posterior fallecimiento han provocado una guerra en Estados Unidos donde los deportistas del país están jugando un papel fundamental para acabar con el racismo, un mal enquistado. Hacía menos de tres meses que había sido asesinado el joven Ahmaud Arbery en Brunwsick (Georgia) por dos tipos que le persiguieron con armas cuando había salido a correr.

Con esta nueva muerte el país ha entrado en el caos. Miles de personas han salido a las calles este fin de semana en más de 50 ciudades, y en algunas de ellas, las manifestaciones continúan tornándose en enfrentamientos con la policía, saqueos y actos violentos. Algunos grupos de manifestantes incendiaron coches privados y vehículos de la policía, bloquearon autopistas, rompieron vidrieras... mientras las autoridades respondían con gases lacrimógenos e incluso balas de goma. En Indianápolis (al norte del país) una persona ha muerto y al menos otras dos recibieron disparos en el transcurso de las protestas que tenían lugar en el centro de la ciudad, según explicó en rueda de prensa el jefe de la Policía de la ciudad, Randal Taylor, en declaraciones recogidas por la CNN.

La NBA en pie de guerra

El baloncesto es uno de los deportes más practicados por los afroamericanos. Por eso, muchos jugadores han querido sumarse a las protestas en contra de la brutalidad policial. El más implicado es el escolta de los Celtics, Jaylen Brown, que condujo 15 horas para encabezar una marcha pacífica de protesta en Atlanta el sábado por la noche. Brown, quien transmitió parte de la marcha en vivo a través de su cuenta de Instagram y también publicó vídeos de discursos en su página, dijo: "Esta es una protesta pacífica. Ser una celebridad, ser un jugador de la NBA, no me excluye de ninguna conversación. Primero y ante todo soy un hombre negro y soy miembro de esta comunidad". "Nosotros estamos creando conciencia sobre algunas de las injusticias que hemos estado viendo. Como joven, tienes que escuchar nuestra perspectiva. Nuestras voces necesitan ser escuchadas. Tengo 23 años. No sé todas las respuestas. Pero siento cómo se sienten los demás", reamarcó.

LeBron James, por su parte, publicó en Instagram la imagen del policía con su rodilla sobre el cuello de un esposado Floyd junto a otra fotografía de la exfigura del fútbol americano Colin Kaepernick, arrodillado durante la interpretación del himno nacional estadounidense antes de un partido. Una imagen que se ha vuelto icónica en la lucha para acabar con el racismo en Estados Unidos.

Incluso Michael Jordan se ha mostrado en las redes sociales después de la muerte de George Floyd. Ha compartido un vídeo de la firma deportiva Nike en el que critica el racismo: "Por una vez, no lo hagas [contradiciendo el lema de Nike]. No finjas que no hay un problema en Estados Unidos. No le des la espalda al racismo. No aceptes que nos quiten vidas inocentes. No pongas más excusas. No creas que esto no te afecta. No vuelvas a sentarte y te quedes callado. No creas que tú no puedes ser parte del cambio. Seamos todos parte del cambio", puede leerse.

Una lucha que viene de lejos

Por esta acción, en la que Kaepernick protestaba contra la brutalidad policial y la injusticia racial, el jugador fue condenado al ostracismo en la NFL y no ha podido jugar un solo partido en cuatro años. Y es que el fútbol americano es el deporte de los blancos y el baloncesto de la población de raza negra. Así ha sido tradicionalmente y parece que en pleno siglo XXI algunas cosas no han cambiado.

Esta es una lucha que viene de muchos años atrás y que ha tenido dos puntos de inflexión: el 'I can't breathe' ("No puedo respirar"), utilizado como campaña viral por los jugadores de la NBA tras el asesinato de Eric Garner en 2014 (un oficial del Departamento de Policía de Nueva York lo estranguló durante unos 15 segundos mientras lo arrestaba) y la rodilla de Colin Kaepernick. "Saquen a esos hijos de puta del campo", respondió Trump tras las protestas de Kaepernick.

Ningún deportista se ha significado más por esta lucha que el exjugador Colin Kaepernick. Fue de los últimos, pero lo hizo con una contundencia fabulosa y se ha convertido en un icono contra la lucha racista en Estados Unidos. Su desafío provocó el rechazo de los equipos de la NFL. De ser el cerebro de un equipo finalista pasó al desprecio de las 31 franquicias restantes. Sin embargo, el apoyo de Nike y el respaldo de estrellas como Lebron James lo han convertido en uno de los líderes de la respuesta deportiva de esta lucha. "Cuando los actos cívicos nos conducen a la muerte, las revueltas son la única reacción lógica. Los llamados de paz caerán y cuando lo hagan encontrarán oídos sordos porque tu violencia ha traído esta resistencia. Tenemos el derecho de volver a pelear. Descansa, George Floyd", comentó el quaterback.

La NBA, en su protesta contra este nuevo caso de violencia policial contra un ciudadano afroamericano, ha apuntado también hacia la presidencia. El entrenador de los Golden State Warriors, Steve Kerr, ha vuelto a arremeter contra Donald Trump, que llamó "matones" a los manifestantes de las protestas."Esto es por lo que los racistas no deberían ser presidentes", escribió el entrenador en las redes sociales, recordando también el "hijos de puta" de Trump a los jugadores de la NFL. Los Warriors, además, ya se negaron a ir a la Casa Blanca en alguna ocasión tras proclamarse campeones. En las redes sociales, Kerr también celebró los mensajes del expresidente Barack Obama y su esposa Michelle. Jayson Tatum, escolta de los Celtics, le llamó "mi presidente".

"¿Seré yo el próximo nombre?"

La joven tenista estadounidense Coco Gauff ha sido una de las últimas voces que ha reaccionado tras la muerte de Floyd en Minneapolis. Ha utilizado el eslogan "Uso mi voz para luchar contra el racismo, ¿usarás la tuya?", para reclamar justicia. Gauff, una de las grandes sensaciones del pasado año y una de las mayores promesas del circuito WTA, aparece en un vídeo con la cabeza bajo una capucha negra y mirando a la cámara haciéndose esa pregunta. El vídeo muestra luego fotos de Floyd y otras víctimas negras. Al final de la secuencia, la tenista se pregunta: "¿Seré yo el próximo nombre en la lista de víctimas negras de la policía americana?". Otras tenistas como Naomi Osaka o Sloane Stephens también han pedido justicia.

El caso ha llegado hasta el deporte en Europa. En la Bundesliga, una de las pocas ligas que está en acción, Weston McKennie, jugador estadounidense del Schalke 04, se ha manifestado en contra del racismo luciendo un brazalete en el que se podía leer "Justicia para Floyd", algo que está en contra del reglamento de la Bundesliga. McKennie podría ser sancionado por parte de la DFL, ya que en su reglamento se especifica que los jugadores no pueden lucir ningún eslogan, sin entrar en valoraciones sobre su contenido. Jadon Sancho, uno de los mejores de la liga, el jugador todavía propiedad del Real Madrid, Achraf, y Marcus Thuram también lanzaron sus respectivos mensajes al marcar gol. Las protestas no cesan y Estados Unidos se enfrenta a una tensa situación que está provocando ya grandes conflictos en muchos estados del país.