La emotiva carta de despedida a un campeón de kayak tras morir a los 29 años

Diana Reményi era la mujer de Robert Toth, un joven deportista húngaro que llegó a proclamarse Campeón de Europa sub-23 de piragüismo. Sin embargo, la vida le tenía preparada la peor de las noticias: en 2017 le diagnosticaron un carcinoma adenoide quístico, un tipo de cáncer poco común que se suele localizar en la glándula salivar.

Toth, que además de en kayak había destacado como luchador de artes marciales mixtas (MMA), se sometió a diversos tratamientos, pero ninguno logró remitir el cáncer. Su mujer llegó incluso a crear una iniciativa de crowdfounding para poder pagar un tratamiento en Houston, pero aunque durante un tiempo mantuvo al tumor a raya, finalmente no pudo con él.

Robert Toth fallecía este domingo en Hungría y ha sido su propia esposa quien lo comunicaba a través de una carta de despedida que colgaba en su cuenta de Facebook. Diana, la mujer que siempre estuvo al lado del deportista para ayudarle a superar su enfermedad, quería darle así su último adiós.

La carta más emotiva

La carta de Diana comienza así: “Robi, mi amor: hace dos semanas, a estas mismas horas, todavía te estaba viendo en el kayak. Y ahora ya no estás vivo. Todo lo que pasamos en las últimas dos semanas es indescriptible. Después de meses de control constante, sin ningún signo de alarma, estalló un final inimaginable. Aun así, no puedo decir que el cáncer te haya derrotado”.

La carta de la viuda está llena de amor y pena por haber perdido tan pronto a su marido

La viuda del deportista continúa: “Era como si te dieras cuenta de que solo puedes detener a este demonio en tu cuerpo destruyéndote primero a ti mismo. Hasta el último minuto fue una lucha sobrehumana en la que diste hasta el último aliento. ‘El guerrero’: así te llamaban las enfermeras, los médicos… todos”.

Diana Reményi termina su mensaje en las redes sociales con esperanza: “Lo único que me da tranquilidad es que tu cuerpo perfecto puede descansar finalmente, mientras tu hermosa alma respira en un mundo donde ya no sufres la enfermedad ni el infierno de dolor que tuviste que pasar. Lamento que el amor inconmensurable que tengo por ti no fuera suficiente para sacarte de la cárcel en la que tu enfermedad te encerró”. Descanse en paz.