Óscar Fuertes, un debutante en el Dakar: "Me dicen que le pregunte al coche cada mañana"

"La información de que somos uno de los dos fabricantes oficiales nos la dio la ASO (organizador del Dakar)". Hasta cierto punto, el piloto español Óscar Fuertes se quedó sorprendido. Los de Peugeot y SsangYong son los únicos equipos de fábrica presentes en el Dakar. Pero el suyo es un proyecto nacido en España de la mano de la marca coreana y que llega a la prueba con un estatus singular. Pero sin ninguna experiencia.

"En principio estaba previsto ir al Dakar en tres años, pero todo se ha acelerado". Fuertes, veterano piloto de los rallies, se encontró de repente con que en pocos meses iba a dar un salto cualitativo brutal en su carrera. Hubo que poner en marcha un proyecto con el que no contaba. Pero su historia tiene además otra dimensión: la del debutante en el Dakar. ¿Cuáles son los temores, las preocupaciones, las incertidumbres de quien afronta por primera vez la carrera más dura del mundo?

Su conversación con El Confidencial podría ejemplificar la de tantos novatos que se enfrentan a su primer Dakar c​on tantas dosis de ilusión como de aprehensión. Porque, de momento, su cabeza está repleta de decenas de consejos no aplicados aún, de conversaciones con los veteranos, de escenarios visualizados pero no vividos todavía. Y es que cada debutante lleva en su fuero interno el temor que inspira la leyenda de la carrera. ​Un debutante en el Dakar es un mar de dudas por surcar. Óscar Fuertes está a punto de abandonar el puerto.

"Los temas, acompañados de números"

¿Y por qué saltar etapas para acudir a una prueba que requiere tanta preparación logística y personal? "Ha sido una cadena de confianza. Con SsangYyong España empezamos hace tres años un proyecto de correr el Campeonato de España. Para la marca, este es un mercado muy importante donde se comercializan sus coches, y el proyecto empezó a funcionar bien ese primer año”, explica Fuertes. "Luego hubo un segundo momento, cuando creamos el primer Tivoli Rallye. Por estética llamó la atención y desarrolló una buena conexión emocional con los clientes y la red. Incluso la marca nos pidió que lo llevásemos al Salón de París. Luego se aceleró todo cuando ganamos la Dakar Challenge en la Baja Aragón. Queríamos ir a Dakar en tres años, pero el segundo nos lo hemos saltado”. Y desde el verano, hubo que correr más incluso que en las pistas.

Han sido meses frenéticos en todos los sentidos. ¿Es difícil preparar un Dakar, con la infinidad de frentes por cubrir sin experiencia previa? "De momento no lo he corrido, solo te puedo contar la mitad de la historia, pero la mitad que he vivido es muy complicada”, comenta entre risas. "Todo es muy atractivo, pero todos los temas han de ir acompañados de números, hay que convencer a mucha gente y todo esto no es fácil". ¿Y qué espera una vez en acción? “Para mí, lo que más me preocupa es entender el ritmo en función de los medios, el coche que llevamos, y de la dimensión de la carrera. Si sabemos entender el ritmo, creo que podríamos estar en el final. Saber cuándo y dónde correr, dónde hay que ir más despacio, dónde parar y decidir... Porque en el Dakar hay muchos momentos donde hay que parar, y a esto los pilotos de rallies no estamos muy acostumbrados".

"En el Dakar hay muchos momentos donde hay que parar, y a esto los pilotos de rallies no estamos muy acostumbrados", explica Óscar Fuertes

"Un día, dos... ¿Y el resto?"

“Todo es nuevo, es una carrera de 14 días, 9.000 km... Honestamente, no sé cómo la voy a gestionar. Sé en lo que tengo que pensar, en qué tengo que enfocarme. La información la tengo, pero la experiencia no. La gente me dice 'piensa día a día'. Y yo me digo: 'sí, claro, un día, dos... ¿Y luego? ¿Cómo se gestiona?' Porque te haces infinidad de preguntas en muchos aspectos. Pues tengo la información, pero no sé cómo voy a responder (ríe). No sabes si estas situaciones las gestionas bien o mal hasta que suceden. Hay que tener la cabeza muy bien amueblada para poder sacar lo mejor de ti en estas situaciones y, sobre todo, para aguantar ese esfuerzo de larga duración, ese cansancio acumulado que no te deja pensar”.

Para empezar, en este Dakar habrá más arena que nunca en Sudamérica. “He intentado compartir con todos ellos (Sainz, Roma…), la experiencia de cada uno, cada uno me ha aportado diferentes cosas. En la conducción he intentado preparar la parte de la arena, porque aquí mi experiencia era cero: las dunas, cómo navegar, cómo entenderlas y cómo se pasan. Y luego, el apartado físico, que ha tenido que ser muy concreto, de recuperar, de preparar tu cuerpo no solo para tu esfuerzo, sino también para la altura”.

"Arranca el coche y escúchale"

Sin embargo, lo más importante para un debutante son dos tipos de convivencia cotidiana: con su copiloto, y con el coche. En lo personal, esa convivencia puede terminar en pesadilla por la falta de sintonía personal. En su caso, Óscar Fuertes irá acompañado con Diego Vallejo, uno de los mejores copilotos profesionales de los rallies españoles, con dos ediciones de experiencia en el Dakar y ambas terminadas. “Diego lleva más años que yo corriendo, pero somos de la misma generación, tenemos la misma edad y los dos vivimos las carreras desde hace muchos años. Lo importante es que estoy en sus manos, tengo claro que soy un novato y él tiene las cosas claras. No hemos corrido juntos, pero desde que decidimos hacer este Dakar todo el trabajo conjunto, toda la logística que te puedas imaginar, ha sido estupendo. Por eso creo que vamos a tener una magnífica relación incluso en un entorno tan hostil como puede ser tantas horas metidos en un coche en el Dakar”.

En el segundo apartado, su Tivoli DKR es un 'buggie', vehículo en la misma categoría que los Peugeot de Carlos Sainz y compañía. “Poéticamente, un buen amigo me ha dado un consejo muy bueno: 'por la mañana, arranca el coche, escúchale, déjale qué te cuente qué le duele. Mete la primera, escúchale... Luego la segunda, sigue hablando con él, que se vaya despertando, que necesita tiempo para despertarse'. En realidad, el Dakar te deja fuera en el 80% de los casos una avería mecánica, y las averías normalmente vienen por algo que has hecho mal, porque has ido más rápido en un sitio, porque le has pedido un esfuerzo que no tocaba… Hay una relación muy importante entre el coche y el piloto en una carrera tan larga. Tú le hablas al coche y el coche te habla a ti".

Y además de llevarse bien con su copiloto y hablar con su coche, ¿qué más espera un debutante como Óscar Fuertes del Dakar? "Me gustaría hacer un Dakar lo suficientemente bueno como para asegurarme estar en el 2019. Y para ello hay que hacerlo todo bien, tengo que acabar. Quiero llegar, conocer y entender el Dakar lo mejor posible para poder seguir en el futuro en esta carrera". Sin dejar de escuchar a su copiloto ni de hablar constantemente con su coche.