Joan Garriga, el 'enfant terrible' que encontró su salvación gracias a Sito Pons, su 'peor enemigo'

Joan Garriga vive uno de los peores momentos de su vida. El que fuera uno de los grandes referentes del motociclismo español en la década de los ochenta se encuentra hospitalizado, aunque estable, después de sufrir dos infartos este miércoles. Su vida desordenada ha provocado que en los últimos años sea noticia por culpa de sus excesos, pero entre tanto problema acumulado ha encontrado a su salvador: su 'enemigo' Sito Pons.

Con tan sólo 20 años, Garriga se destapó como uno de los pilotos más prometedores del momento. Campeón de España en 1984, 1986 y 1987, su gran momento en el motociclismo mundial tuvo lugar en 1988, cuando estuvo a un sólo paso de convertirse en campeón de 250 cc. Su emocionante pelea por el título con Sito Pons dio lugar a que ese campeonato ya forme parte de la historia del motociclismo, en una de las luchas más igualadas de todos los tiempos.

Por aquel entonces, Garriga consiguió hacerse con tres victorias, además de conseguir diez podios. Pero sus grandes resultados no fueron suficientes para derrocar a su 'enemigo' Sito Pons, que siempre consiguió ir un paso por delante de su rival para terminar levantando el título. El 'fracaso' de 'Boeing 747' -como se le apodaba- le empujo a un camino marcado por problemas y penurias, por culpa de un tropiezo que no fue capaz de encajar.

El piloto catalán no supo asumir la pérdida de aquel campeonato, y pronto comenzó su declive personal. Su adicción a la cocaína provocó que perdiera buena parte del talento que había mostrado en sus primeros años, derivando en sus posteriores fracasos 250 cc, 500 cc y Superbikes. Con sólo 30 años, Garriga dejaba el motociclismo profesional, y sus problemas no sólo no desaparecieron, sino que fueron creciendo con los años.

El vacío que había dejado el motociclismo en su vida le granjeó graves problemas, cayendo poco a poco en un pozo del que no encontraba la manera de salir: tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas o provocar el incendio de su negocio para cobrar el seguro fueron algunos de los grandes escándalos de Garriga. Pero en todo ese tiempo, siempre tuvo a su lado al que en otro tiempo fuera su 'enemigo' en las pistas, Sito Pons.

Sito Pons, un amigo que supo estar a la altura

Rivales en la pista, fuera de ella Sito era consciente de los graves problemas de Garriga. De hecho, hacía escasos meses que había perdido su casa después de que fuera desahuciado de su vivienda en Vallvidrera (Barcelona), y Pons se había encargado de gestionarle el alquiler de una habitación de hotel. Dicha estancia se convirtió en su casa desde hace algunos meses, donde Garriga sufriría un primer infarto.

Los servicios médicos acudieron a su ayuda, y ya en la ambulancia volvía a tener lugar un segundo infarto. Sito Pons, el que fuera su gran rival en las pistas, ha sido una de las pocas personas que ha estado a la altura de las circunstancias. De 'eterno enemigo' a su 'ángel de la guarda': aquel piloto que le robará el Mundial de 250 cc en 1988 hoy ha sabido salvarle la vida. Una ayuda que nunca olvidará Garriga a pesar de aquel Mundial de 1988.