Nike rompe barreras y contrata a la primera deportista en activo que confiesa ser homosexual

La marca de ropa deportiva Nike ha decidido romper una barrera más en el deporte. La empresa norteamericana ha firmado su primer contrato con un deportista homosexual de primer nivel, tras anunciar la contratación de Brittney Griner, considerada como una de las mejores jugadoras de baloncesto del momento en la WNBA -la NBA femenina-, con la que Nike ha decidido aumentar su cuota de ventas en un mercado 'inexplorado'.

Nunca antes una marca deportiva había firmado el patrocinio de un jugador nada más anunciar su tendencia sexual, y lo cierto es que Nike ha acertado plenamente con Griner. Está considerada como una de las grandes deportistas del futuro y la empresa norteamericana no ha dudado en lanzarse a por su fichaje, después de ser elegida en el número uno del Draft por los Phoenix Mercury, donde se asegurará un importante mercado.

Según estudios, el gasto total anual del público gay en ropa deportiva alcanza los 600.000 euros, lo que se ha convertido en un importante mercado, y que Nike quiere explotar con Griner. La personalidad de la jugadora encaja a la perfección dentro de una importante campaña de márketing, pues no sólo está llamada a ser una estrella de su deporte, sino que el propio Mark Cuban, dueño de los Dallas Maverikcs, ha pedido públicamente que juegue en la NBA.

Griner podría convertirse en la primera mujer de la historia de la NBA, y su tirón mediático puede ser más que importante. Por si fuera poco, su orientación sexual puede ser un importante reclamo, al ofrecer un nuevo ídolo deportivo a un mercado que no tenía ningún referente hasta el momento. De igual manera, esta estrategia serviría para dar algo de aire a la empresa, cuya imagen quedó dañada por los fracasos de Lance Armstrong u Oscar Pistorius.

Pero en este aspecto, Nike, además, se ha encontrado con la suerte de cara. Tras el acuerdo publicitario con Griner, la marca deportiva se ha encontrado de frente con la confesión de Jason Collins, que hace escasos días confirmaba ser gay. Este hecho histórico, al convertirse en el primer jugador de la NBA en activo en anunciar su homosexualidad, también será aprovechado por la marca, de la que el pivot ya formaba parte previamente.

Nike ha decidido seguir dando pasos adelante con la contratación de Britnney Grinner. La marca ha contratado a la joven jugadora para convertirla en un verdadero icono, que le servirá para entrar de lleno en un mercado completamente inexplorado por las empresas de ropa deportiva. Así, la llamada a convertirse en una de las mejores jugadoras de baloncesto femenino de todos los tiempos ya puede presumir de ser el nuevo referente de Nike.