Es noticia
Aitor Ariño, el debutante preocupado "de que no suene el móvil para no pagar una multa"
  1. Deportes
EL 'NIÑO' DE LA SELECCIÓN ESPAÑOLA ESTÁ ILUSIONADO EN SU PRIMER MUNDIAL

Aitor Ariño, el debutante preocupado "de que no suene el móvil para no pagar una multa"

“Estaba un poco nervioso. Me llamó el míster, me quité el chándal, salté y... bueno, en cuanto recibí la primera pelota ya te concentras y no

Foto: Aitor Ariño, el debutante preocupado "de que no suene el móvil para no pagar una multa"
Aitor Ariño, el debutante preocupado "de que no suene el móvil para no pagar una multa"

“Estaba un poco nervioso. Me llamó el míster, me quité el chándal, salté y... bueno, en cuanto recibí la primera pelota ya te concentras y no piensas en nada más. Es la primera vez que juego en un campo así, con tanta gente... espero que sea la primera de muchas”. Media hora después de que España hubiera cosechado la victoria en la inauguración del Mundial de balonmano, Aitor Ariño todavía atendía a las grabadoras, los micrófonos y las cámaras en zona mixta. Con gotas de sudor aún en su rostro, El Confidencial mantuvo una charla con el integrante más joven de la Selección, donde aterrizó a última hora y por sorpresa tras una lesión de Cristian Ugalde.

Alegre, seguro de sí mismo y aprendiendo cada día de concentración. Fuera de la pista, Aitor está disfrutando el momento que le ha brindado el técnico Valero Rivera... dentro, no hay mucho espacio para la contemplación y la exigencia es máxima. “El partido fue bien pero hubiera estado mejor si no llego a fallar los dos chuts”. Más allá de estos errores irrelevantes para el devenir del partido (España derrotó 27-14 a Argelia), todas sus conversaciones con la prensa giraron en temas extradeportivos y anecdóticos.

¿Qué piensa un debutante cuando está en el vestuario de uno de los equipos aspirantes al Mundial? “Sobre todo estoy atento a que no suene el móvil para que no me multen”. Quizás no confíe tanto en su memoria como en su capacidad para desenvolverse en la pista. “Creo ciegamente en él”, manifestó ante su llegada el entrenador; el propio Aitor parece que también lo hace y sus preocupaciones giran en torno a otros temas.

¿Un “entrenamiento con guantes”?

Durante la conversación, de vez en cuando, al extremo zurdo del Barcelona Intersport se le escapaba alguna mirada hacia las gradas de la Caja Mágica, como queriendo revivir el momento de su estreno en un escenario como este. “Fue un placer. Jugar en un campo de un campeonato mundial y además con la afición española se agradece mucho. Yo no estoy muy acostumbrado...”.

Las instalaciones del madrileño barrio de San Fermín habían sido una de las preocupaciones de la organización por, entre otros temas, la gélida temperatura. “Todo está fenomenal salvo que para entrenar, al principio, estuvimos planteando la posibilidad de hacerlo con guantes. Hacía mucho frío. Hoy (por este viernes) hemos llegado a la pista y ya estaba mejor”. Afortunadamente para los jugadores españoles, el termómetro no impidió que sus músculos funcionaran a pleno rendimiento en aspectos como la defensa, “la clave de la victoria y de todos los partidos para llegar lejos” según Ariño.

A disfrutar, chaval

Con un gol y una asistencia este viernes, el jugador nacido en Penarth (Gran Bretaña) está llamado a ser uno de los pilares de la Selección en el futuro. Quién sabe si en este Mundial tiene más presencia y responsabilidad de la que se supone. De momento, simplemente se deja llevar por la situación y los consejos de los más ‘mayores’: “Me dicen que esté tranquilo, que disfrute, que me fije en el portero rival y que, si Dios quiere, esta va a ser la primera experiencia de muchas en una competición así”.

Con permiso de Ugalde, Aitor tiene el difícil reto de convertir el sueño que ha vivido en la Caja Mágica en una incansable monotonía. La ilusión que irradiaba tras sus primero minutos con la camiseta roja hacen presagiar que hará todo lo que esté en sus manos por repetir la experiencia.

“Estaba un poco nervioso. Me llamó el míster, me quité el chándal, salté y... bueno, en cuanto recibí la primera pelota ya te concentras y no piensas en nada más. Es la primera vez que juego en un campo así, con tanta gente... espero que sea la primera de muchas”. Media hora después de que España hubiera cosechado la victoria en la inauguración del Mundial de balonmano, Aitor Ariño todavía atendía a las grabadoras, los micrófonos y las cámaras en zona mixta. Con gotas de sudor aún en su rostro, El Confidencial mantuvo una charla con el integrante más joven de la Selección, donde aterrizó a última hora y por sorpresa tras una lesión de Cristian Ugalde.