Helguera y Lasa, ex madridistas reconvertidos en atletas en la maratón de Nueva York

Colgar las botas es un paso crucial en la vida de un deportista, una decisión tan difícil de tomar como necesaria. Desligarse de una práctica a la que han dedicado la mayor parte de los años de su vida y de la que han hecho su profesión es complicado, por eso, y por su profundo amor por el deporte, muchos ex jugadores siguen unidos a este mundo de una u otra manera durante los años posteriores a su retirada. No es extraño ver a ex jugadores que siguen en activo en el fútbol indoor o torneos de veteranos, o que utilizan su experiencia en el banquillo ahora como entrenadores. Lo que sí puede resultar más raro es encontrarse a dos ex futbolistas como Iván Helguera y Mikel Lasa por las calles de Nueva York corriendo la famosa maratón.

Los dos ex madridistas, de 36 y 40 años, siguieron por un día el ejemplo de Luis Enrique (aficionado a las maratones y pruebas de Ironman) y cambiaron las botas de tacos por las zapatillas de running para participar en la última edición de la carrera popular neoyorkina celebrada el pasado domingo junto a los cerca de 20.000 asistentes. El cántabro se entrenó durante algo más de un mes, pero ni su dedicación ni su condición de deportista le sirvieron para bajar de las 4:05 horas, una marca ampliamente superada por su colega Lasa, con 3:23 horas y muchos otros compatriotas del sector financiero y empresarial asiduos a la mítica prueba de resistencia de 42 kilómetros.

La participación de Iván Helguera en la maratón fue un reto planteado por las publicaciones Runner's y Sport Life, quienes encargaron a Fran Torralba la preparación del ex madridista para la prueba bajo un programa de Gatorade. El cometido de Torralba, especialista en el entrenamiento de corredores populares en España, era que el internacional español completara la prueba sufriendo lo menos posible y evitando lesiones.

El preparador se mostró encantado con la base física del ex futbolista, que durante cuatro semanas y media se dedicó a entrenar, y diseñó una sesión preparatoria durante un fin de semana en León que incluía la media maratón de La Bañeza. Aun así, Helguera fue de los corredores más rezagados y tardó algo más de cuatro horas en cruzar la meta, dos horas más que el keniata Geoffrey Mutai, el más rápido de los competidores oficiales en el asfalto neoyorkino y artífice del nuevo récord de la ruta, establecido en 2:07.