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El equipo Leopard, conjunto de Weylandt, anuncia su retirada del Giro de Italia
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CONTADOR YA ADVIRTIÓ DE UNA POSIBLE DESGRACIA

El equipo Leopard, conjunto de Weylandt, anuncia su retirada del Giro de Italia

El pelotón del Giro de Italia rindió homenaje a Wouter Weylandt en una cuarta etapa en la que no hubo competición, sino un cómodo paseo de

Foto: El equipo Leopard, conjunto de Weylandt, anuncia su retirada del Giro de Italia
El equipo Leopard, conjunto de Weylandt, anuncia su retirada del Giro de Italia

El pelotón del Giro de Italia rindió homenaje a Wouter Weylandt en una cuarta etapa en la que no hubo competición, sino un cómodo paseo de 216 kilómetros entre Génova y Livorno que empezó con un minuto de silencio en recuerdo del ciclista belga fallecido y terminó con el equipo Leopard unido en una sola mano cruzando la línea de meta.

Angelo Zomegnan
, director del Giro, anunció que se respetaría la voluntad de los corredores. La del equipo Leopard de Weylandt fue salir a la carretera, la del resto de escuadras también, sin disputa por medio. Una vez finalizada la etapa, el equipo ha comunicado su retirada de la prueba, además de anunciar que los miembros del equipo tienen la intención de participar en los actos fúnebres en honor de su compañero.

Quien también se retiró fue el ciclista estadounidense Tylar Farrar (Garmin), íntimo amigo del fallecido, también anunció que no va a continuar en la carrera.Caras tristes, cabezas mirando al suelo, pocas ganas de subirse a la bicicleta, pero los 206 corredores que siguen en el Giro conformes con dedicar la etapa a Weylandt. "Un Giro es poco al lado de una vida", comentaba Jorge Azanza (Euskaltel), uno de los que presenciaron la tragedia de cerca.

A un paso del puerto genovés, el Leopard formó con sus ocho corredores en línea. Pocos metros detrás los líderes de la general (David Millar, Garmin), de la montaña (Brambilla, Colnago), por puntos (Petacchi, Lampre) y de los jóvenes (Bakelanddts, Omega). A cinco metros el pelotón, en actitud de emoción y respeto. Tras un minuto de silencio se dio la salida poco antes del mediodía.

Contador ya advirtió al Giro de una posible desgracia

Día de luto en la bicicleta. ¿Mala suerte? ¿Se podía haber evitado? Wouter Weylandt se dejó ayer la vida mientras trabajaba. Descendía el puerto del Passo del Bocco durante la tercera etapa del Giro de Italia más controvertido de la historia. El belga de 26 años ha teñido de negro al pelotón y de rojo a los organizadores de la prueba. El riesgo era algo que tenían presente los ciclistas antes de comenzar esta 94 edición pero el límite se ha superado demasiado pronto. Y lo peor, aún no ha llegado.

Alberto Contador, durante su preparación para el presente Giro llegó a declarar: "Estos tramos no deben ser habituales porque los ciclistas nos jugamos la vida". El ciclista de Pinto hizo esa advertencia tras bajar el Crostis, puerto previo al Zoncolan. Ese tipo de descensos es el que ayer le costó la vida a Weylandt y del que el pelotón ya fue avisado justo antes de arrancar la etapa. “La bajada era peligrosa. En la reunión de la mañana ya nos dijeron que el descenso era peligroso" señaló Dani Navarro, compañero de Contador en el Saxo Bank, tras saber el fallecimiento del rodador del Leopard-Trek, equipo que finalmente continuará en la ronda italiana tras haber sopesado la retirada. "Es algo que se veía venir y esta mañana (por ayer) lo había hablado con varios periodistas", dijo Pablo Lastras.

La organización del Giro ha forzado la máquina en este 2011. El director de la carrera, Angelo Zomegnan, en conmemoración del 150 aniversario de la unificación de Italia, ha querido que este año se recuerde y tristemente lo ha conseguido, aunque no por ser el más duro de la historia. Zomegnan tuvo mucho tacto en dar la información ya que no se hizo oficial el fallecimiento de Wouter hasta que no fue informada su mujer, Anne Sophie, que tardó en ser localizada porque no estaba en su casa cuando se produjo el accidente.

El chicle se ha roto demasiado pronto

El calificativo común que el pelotón había dado a la carrera transalpina había sido de “inhumana”. Pero el chicle se ha estirado tanto que se ha roto antes de tiempo. Porque lo peor está por venir.

"Me da miedo, nunca he visto una cosa similar, se va más allá del límite", señalaba Contador a La Gazzetta dello Sport cuando le preguntaron por la ascensión al inédito Crostis. La entrevista y sus correspondientes declaraciones, realizada en la última semana de abril, hizo la delicia de los organizadores al comprobar que realmente habían situado el listón muy alto. Tanto que el mejor ciclista del momento tenía “miedo”.

Una cosa es pánico a una subida y otra es al descenso, más vertiginoso y difícil de controlar. Sabiendo que, en bajadas normales, los profesionales van a ‘tumba abierta’, parece impensable que no haya percances en descensos de por sí peligrosos. Ayer Weylandt estableció un límite de la peor forma posible.

Contador, de ironía a cruda realidad

"Si uno sigue vivo tras el Zoncolan, esta etapa parecerá un paseo", relataba irónicamente Contador a los periodistas de la Gazzetta. Ahora, la ironía se ha transformado en cruda realidad.

El espectáculo ha ido demasiado lejos. Se busca mejorar la audiencia, limpiar la imagen del ciclismo y animar de nuevo al aficionado al deporte de las dos ruedas. Pero todo tiene un límite y, como en cualquier disciplina, este llega hasta que peligra la seguridad del competidor. Cuando uno observa imágenes del Crostis la primera sensación que llega al cerebro es de vértigo. En este caso, la protección del ciclista es algo que no se ha tenido en cuenta a primera vista. Eso sí, la emoción está asegurada.

Si nos llevamos a otros deportes el caso de forzar el espectáculo hasta el límite también encontramos ideas que distan mucho de garantizar la vida del deportista. El último ejemplo es el que protagonizó Bernie Ecclestone, patrón de la Fórmula 1, cuando declaró que deseaba crear lluvia artificial en los grandes premios para que haya más espectáculo. Rápidamente todos los pilotos consideraron inaceptable esa propuesta.

¿Soluciones? Lastras, ayer por la tarde, abogaba por algo sencillo: señalar las curvas peligrosas. En otras disciplinas de motor o esquí es obligatorio para que el recorrido esté homologado y en ciclismo es algo que no se tiene en cuenta. Bien es cierto que es dificir señalizar 200 kilómetros de trazado pero sí aquellos tramos que se consideren con más riesgo de accidente.

Weylandt falleció ayer durante la tercera etapa al caerse en el descenso del Passo del Bocco, a 25 kilómetros de meta. El impacto contra el asfalto le produjo, entre otras lesiones, la fractura de la base del cráneo que resultó mortal.

Weylandt aumenta la triste lista a 47 ciclistas profesionales muertos

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El pelotón del Giro de Italia rindió homenaje a Wouter Weylandt en una cuarta etapa en la que no hubo competición, sino un cómodo paseo de 216 kilómetros entre Génova y Livorno que empezó con un minuto de silencio en recuerdo del ciclista belga fallecido y terminó con el equipo Leopard unido en una sola mano cruzando la línea de meta.

Angelo Zomegnan
, director del Giro, anunció que se respetaría la voluntad de los corredores. La del equipo Leopard de Weylandt fue salir a la carretera, la del resto de escuadras también, sin disputa por medio. Una vez finalizada la etapa, el equipo ha comunicado su retirada de la prueba, además de anunciar que los miembros del equipo tienen la intención de participar en los actos fúnebres en honor de su compañero.

Quien también se retiró fue el ciclista estadounidense Tylar Farrar (Garmin), íntimo amigo del fallecido, también anunció que no va a continuar en la carrera.Caras tristes, cabezas mirando al suelo, pocas ganas de subirse a la bicicleta, pero los 206 corredores que siguen en el Giro conformes con dedicar la etapa a Weylandt. "Un Giro es poco al lado de una vida", comentaba Jorge Azanza (Euskaltel), uno de los que presenciaron la tragedia de cerca.

A un paso del puerto genovés, el Leopard formó con sus ocho corredores en línea. Pocos metros detrás los líderes de la general (David Millar, Garmin), de la montaña (Brambilla, Colnago), por puntos (Petacchi, Lampre) y de los jóvenes (Bakelanddts, Omega). A cinco metros el pelotón, en actitud de emoción y respeto. Tras un minuto de silencio se dio la salida poco antes del mediodía.

Contador ya advirtió al Giro de una posible desgracia

Día de luto en la bicicleta. ¿Mala suerte? ¿Se podía haber evitado? Wouter Weylandt se dejó ayer la vida mientras trabajaba. Descendía el puerto del Passo del Bocco durante la tercera etapa del Giro de Italia más controvertido de la historia. El belga de 26 años ha teñido de negro al pelotón y de rojo a los organizadores de la prueba. El riesgo era algo que tenían presente los ciclistas antes de comenzar esta 94 edición pero el límite se ha superado demasiado pronto. Y lo peor, aún no ha llegado.

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