Hansen y Landin acaban con el sueño español de alcanzar la final del Mundial

La selección española no podrá jugar la final del Mundial de balonmano después de perder ante Dinamarca en las semifinales por 28 a 24. El conjunto de Valero Rivera mostró casta, raza y orgullo, pero la solvencia danesa y la impresionante aportación de Landin y Hansen impideron que el conjunto nacional alcanzara el partido definitivo del campeonato.

España mostró dificultades en la circulación de balón en ataque, y en determinados momentos cierta falta de solidez en defensa. La escasa participación de los extremos en la parcela ofensiva, y un evidente bajón físico en los momentos finales del partido lastraron a un combinado nacional que se jugará la tercer posición en el campeonato ante Suecia el próximo domingo.

El partido no comenzó nada bien para la selección española. La fuerza con la que salió al campo Dinamarca, la defensa blanda del combinado nacional y la velocidad del combinado nórdico pronto pusieron en ventaja al conjunto entrenado por Ulrik Wilbek. Las paradas de Landin, dos de ellas en los siete metros, aventajaron a Dinamarca en el marcador (6-4).

España estaba muy imprecisa en ataque, pero tres robos consecutivos en defensa le permitieron empatar el tanteador (6-6). Sin embargo, la igualada fue un espejismo, pues la velocidad en el juego de Dinamarca y la falta de puntería en ataque permitieron que los daneses se distanciaran en el marcador de manera peligrosa (10-6), gracias a la gran labor de Mikel Hansen. Con un parcial de 4 a 0 para los nórdicos, Valero Rivera decidió dar entrada a Arpad Sterbik.

La aportación de guardameta español fue básica para la remontada española. Las paradas de Sterbik, junto al notable incremento de la intensidad defensiva española cerraron el grifo de goles daneses. El gran trabajo defensivo permitió que Dinamrca no marcara un solo gol en más de ocho minutos. Cañellas, Ugalde y Raúl Entrerríos hicieron el resto para conseguir empatar el encuentro a falta de ocho minutos (11-11).

Antes del descanso, se produjo un nuevo intercambio de golpes para cerrar la primera parte con empate a 12. Aún así, Iker Romero tuvo la oportunidad de poner en ventaja al conjunto español antes de llegar al intermedio, pero la fortuna no acompañó al jugador español, que no logró acertar con la portería de Landin, cerrando la primera mitad con un más que merecido empate.

Dinamarca volvió a salir muy fuerte

La segunda parte comenzó de igual manera a como lo hizo la primera. España se mostró poco intensa en defensa y muy fallona en ataque, lo que permitió que Dinamarca volviera a distanciarse de manera peligrosa en el marcador (17-13). Las paradas de Landin empezaban a desesperar a España, hasta que Alberto Entrerríos rompió la tendencia negativa para meter a España en el partido.

Aún así, el combinado de Valero Rivera seguía sin circular el esférico de manera efectiva, pues los extremos prácticamente no participaban en el juego. A pesar de todo, España forzó a la defensa danesa, excesivamente dura, consiguiendo tres lanzamientos desde los siete metros que ponían a la selección a uno de los nórdicos gracias a la efectividad en el disparo de Cañellas (18-17).

Tras un intercambio de goles, España gozó de un nuevo lanzamiento de siete metros para empatar el partido, pero en esta ocasión falló Cañellas. En ese momento, cuando mejor estaba la selección, apareció Mikel Hansen para convertirse en el líder de Dinamarca. Tras varios goles, el danés se erigió como la figura cuando su equipo se encontraba en inferioridad númerica para distanciar a su equipo con tres tantos (23-20). 

Se ponían complicadas las cosas para España, más con la exclusión de García Parrondo. Pero entonces surgió el coraje nacional, que con un jugador menos conseguía empatar el partido a 23. Pero la suerte estaba echada: una nueva exclusión, esta vez de Viran Morros, 'mató' a la selección. Mikel Hansen hizo el resto, con una espectacular mecánica de disparo para poner un tanteador de 26 a 23 en el marcador.

Aún así, España no bajó los brazos y lo siguió intentando, pero el combinado danés había conseguido hundir el muro nacional, para llevarse la victoria por 28  a 24. El equipo de Rivera mostró coraje y garra, pero la poderosa Dinamarca consiguió derrotar por primera vez en el campeonato el conjunto español. Landin y Hansen fueron básicos en la victoria danesa, dos bastiones que España no supo sobrepasar para llegar a la final.

Ficha técnica:

28 - Dinamarca: Landin; Lindberg (6), Mads Christiansen (1), Spellerberg (1), Mikkel Hansen (9), Lars Christiansen (2, 1p) y Toft Hansen (2) -equipo inicial- Rasmussen (ps), Boesen (1), Lauge (-), Eggert (-), Knudsen (1), Noddesbo (-), Svan Hansen (-), Sondergaard (5) y Nielsen (-)

24 - España: Hombrados; Chema Rodríguez (1), Gurbindo (2), Morros (1), Roberto García (2), Alberto Entrerríos (3) y Juanín García (1) -equipo inicial- Sterbik (ps), Rocas (1), Maqueda (-), Raúl Entrerríos (3), Cañellas (6, 4p), Romero (1p), Ugalde (2), Garabaya (1) y Aguinagalde (-)

Marcador cada cinco minutos: 4-2, 6-4, 10-6, 10-7, 11-10 y 12-12 (Descanso) 15-12, 17-14, 18-17, 21-20, 23-23 y 28-24 (Final)

Árbitros: Horacek y Novotny (República Checa). Excluyeron por dos minutos a Knudsen (2) por Dinamarca; y a Roberto García (2) y Morros por España.

Incidencias: Segunda semifinal del Campeonato del Mundo de Suecia disputado en el Kristianstad Arena ante unos 4.000 espectadores. Asistieron al encuentro el príncipe heredero de Dinamarca, Federico de Dinamarca, y el secretario de Estado para el Deporte español, Jaime Lissavetzky.