Es noticia
Roma 1960, los Juegos que mostraron al mundo a Muhammad Alí
  1. Deportes
EL COE HOMENAJEA SU 50º ANIVERSARIO

Roma 1960, los Juegos que mostraron al mundo a Muhammad Alí

Cincuenta años han pasado desde que Roma se vistiera de ciudad olímpica. Los de 1960 serán siempre recordados como los Juegos en los que Cassius Clay,

Cincuenta años han pasado desde que Roma se vistiera de ciudad olímpica. Los de 1960 serán siempre recordados como los Juegos en los que Cassius Clay, Mohammad Alí, se presentó al mundo, Abebe Bikila ganó el oro corriendo descalzo y Sudáfrica aparecía en el ruedo Olímpico por última vez hasta 1992. Para celebrar el quincuagésimo aniversario, el Comité Olímpico Español (COE) rinde hoy homenaje a los deportistas que participaron aquel año en un acto presidido por la Reina Sofía, también presente en la XVII edición de los Juegos Olímpicos Modernos como abanderada del equipo griego de vela.

 

La cita olímpica congregó a 83 países, 5.338 deportistas -de los cuales solo 611 eran mujeres- y 150 pruebas. Se trataba de los Juegos que más representantes españoles reunían hasta el momento, con 150 atletas distribuidos en 16 deportes. Aun así, el balance en el medallero fue decepcionante para España, que solo se trajo de Roma el bronce en hockey hierba.

Roma, que iba a acoger los Juegos en 1908, tuvo que declinar ante Londres y esperar 54 años para ser elegida por el COI y convertirse en sede. Los treinta millones de dólares invertidos en la organización de los Juegos se tradujeron en un despliegue inédito hasta el momento. Además, la ciudad clásica ofrecía un marco arquitectónico único para el desarrollo de tan poderoso evento deportivo. Las ruinas de la basílica de Maxence sirvieron como escenario para las competiciones de lucha; en las termas de Caracalla, antiguo complejo de baños de la Roma imperial, se celebraron las pruebas de gimnasia; y el arco de Constantino, situado entre el Coliseo y la colina del Palatino, representó el término de la maratón. 

Pero los Juegos Olímpicos de Roma tienen tres nombres propios: Abebe Bikila, Wilma Rudolph y Muhammad Alí. Bikila hizo historia al convertirse en el primer negro africano en ganar el oro olímpico. Su imagen corriendo la maratón con los pies desnudos por las calles de Roma le consagró como uno de los atletas más carismáticos. La historia de la segunda protagonista es tanto más sorprendente. Tras permanecer postrada en una cama durante años afectada de poliomielitis, Wilma, Gacela Negra, Rudolph, ganó en Roma tres medallas de oro en pruebas de velocidad convirtiéndose en la primera mujer americana en hacerlo. Sin embargo su gesta no sirvió para combatir la discriminación que sufrió en su propio país. Su vida se convirtió en un calvario de tragedia y pobreza hasta el punto de tener que vender sus medallas.

Alí, "el más grande"

Muhammad Alí aún era Cassius Clay cuando dejó claro que sería uno de los más grandes plugis. Para muchos el mejor. La presea de oro en la categoría de peso semipesado sería el principio de una exitosa carrera profesional durante la cual se proclamó campeón del mundo de peso pesado en tres ocasiones. Los combates de The Greatest siempre serán recordados por su peculiar forma de luchar, que él mismo definía con la frase: "float like a butterfly, sting like a bee" (flota como una mariposa, pica como una abeja). Su nombre pasó a la historia por ser, además, uno de los rostros más conocidos en la defensa de su religión (cambió su nombre en 1964 cuando abrazó el Islam) y por sus problemas con la justicia por evadir el servicio militar y oponerse a la guerra de Vietnam. Hoy, el combate más duro de su vida lo libra con el Parkinson, enfermedad que sufre desde hace años.

Roma también marcó para Sudáfrica un antes y un después. Su política racista le costó la expulsión de los Juegos durante 32 años. Tras el apartheid, se permitió de nuevo la participación del país africano, que volvió a la competición en 1992.

Cincuenta años han pasado desde que Roma se vistiera de ciudad olímpica. Los de 1960 serán siempre recordados como los Juegos en los que Cassius Clay, Mohammad Alí, se presentó al mundo, Abebe Bikila ganó el oro corriendo descalzo y Sudáfrica aparecía en el ruedo Olímpico por última vez hasta 1992. Para celebrar el quincuagésimo aniversario, el Comité Olímpico Español (COE) rinde hoy homenaje a los deportistas que participaron aquel año en un acto presidido por la Reina Sofía, también presente en la XVII edición de los Juegos Olímpicos Modernos como abanderada del equipo griego de vela.