La cuenta atrás de Campos Meta

Adrián Campos trabaja contra reloj para salvar su proyecto, pero otro equipo rival muerde en su yugular para liquidar sus precarias condiciones de supervivencia. En estos momentos, según ha podido saber El Confidencial, hay muchas probabilidades de que el equipo desaparezca. Literalmente, el proyecto está en la cuerda floja, a falta de un acta de defunción que, a pesar de los rumores, aún no se ha certificado, y que el propio Campos intentar evitar durante estos días. Sin embargo, en determinados ambientes de altura en la Fórmula 1 se considera que el proyecto ya no cuenta con opción alguna.

 

Campos Meta intentó encontrar una solución a su falta de fondos en la figura del promotor automovilístico Tony Texeira, con quien se firmó un  reciente acuerdo por el cual  este se hacía con el control del equipo. Pero, en contra de lo esperado, Texeira no ha afrontado los pagos necesarios a los proveedores, especialmente Dallara, el constructor italiano en el que se había invertido siete millones de euros para el desarrollo del monoplaza.

El hecho de que haya expirado el último plazo de pago al constructor por parte del equipo –o de Texeira- y que formalmente se pueda alegar una ruptura de contrato, ha sido aprovechado por Dallara para intentar desvincularse  de Campos. Una  postura  espoleada por Zoran Stefanovic, quien exprime la situación de debilidad de Campos Meta para intentar rematar las opciones del equipo.

Stefan GP, en busca del hueco de Campos

El empresario serbio, propietario del Stefan GP, todavía sin licencia en la Fórmula 1, está buscando hueco  a toda costa y a expensas de Campos Meta. Con el apoyo de Ecclestone, Stefan GP está dando todos los pasos para estar presente en Bahrein, aún a costa de no contar con la licencia. Adrian Campos, por su parte, encontró el respaldo de sus colegas de la FOTA al explicar la situación del equipo en la reunión del pasado lunes y, sobre todo las inversiones realizadas hasta el momento. Pero, evidentemente, cualquier solución pasa por encontrar el capital necesario para desbloquear la situación actual.

Para  neutralizar  al equipo español –lo seguirá siendo si Texeira cumple con los acuerdos establecidos-, Stefanovic está presionando a Dallara para la compra de los derechos del proyecto que el constructor italiano está desarrollando para Campos.  El objetivo es liquidar definitivamente las opciones de Campos Meta, que quedaría sin opción alguna para participar en el Mundial, y se vería obligado vender su licencia al mejor postor. Pero Adrián Campos sigue defendiendo sus derechos con Dallara,  apoyados en ciertas estipulaciones contractuales y a las fuertes inversiones realizadas hasta el momento, que podrían perderse de no prosperar el proyecto. Según ha podido saber El Confidencial, Campos está trabajando con dos vías diferentes y contra reloj para salvar un proyecto que de sueño personal, está pasando a convertirse en una auténtica pesadilla.

Stefan GP ha adquirido los derechos de  propiedad intelectual del proyecto de Toyota, por lo que sus maniobras con Dallara tienen como objetivo causar la baja de una de las licencias. Stefan GP va a enviar material a Bahrein, ha anunciado unos tests privados en el circuito de Portimao, en Portugal, y esta llevando a cabo ofertas públicas de empleo para su estructura. Se rumorea, además, que Kazuki Nakajima y Ralf Schumacher podrían ser sus pilotos.