Robben no es Prosinecki, de momento

Robert Prosinecki, la estrella mediática que Ramón Mendoza fichó en 1991, jugó en sus primeros nueve meses 3 partidos de liga y 2 de UEFA. Entre septiembre de ese año y abril del siguiente tuvo cinco lesiones musculares, un hecho que llegó a pensar a los médicos del club madridista que se trataban de problemas psicológicos y no musculares. Arjen Robben no ha comenzado su quinto mes de estancia con muy buen pie ya que ayer le diagnosticaron una nueva lesión muscular. Aún así, está lejos de la trayectoria del jugador croata.

Los términos fichaje y lesión tienen en Jonathan Woodgate a su máximo exponente en el Real Madrid moderno. El inglés estuvo 13 meses lesionado desde que fichara, por 22 millones, hasta su debut. Sin embargo, en cuanto a racha de lesiones consecutivas Robben recuerda más al de aquel joven -insuperable- Prosinecki. En tres temporadas disputó 67 partidos y anotó 10 goles, uno de ellos de falta ante el FC Barcelona. Hasta el momento, Robben ha disputado 14 encuentros (8 en Liga, 4 en Champions y 2 en Copa) y ha marcado 1 gol de blanco -en Copa ante el Alicante- por lo que rebasa con creces los ‘más que preocupantes’ números del balcánico (los del holandés sólo llegan a ‘preocupantes’).

Lo de Prosinecki fue un quebradero de cabeza para los médicos merengues. Miguel Ángel Herrador, jefe de aquél cuerpo médico, llegó a decir que era un “problema psicológico” porque no encontraban solución a los dolores del ex campeón de Europa. Pensaban que la dura adaptación a su vida en España también era una de las principales culpables. También le revisaron la manera de andar, de correr y potenciaron su musculatura en las piernas. Le mandaron al dentista para tapar las caries y arreglarle la dentadura y hasta le impusieron una dieta con buenos hábitos alimenticios. Pero cuando el balón de bronce de 1991 notaba una molestia alarmaba a los médicos con una nueva y gran lesión. Este pasado diciembre el crack declaró que sufrió “entre 15 y 20 lesiones” en toda su carrera deportiva.

En cuanto a su manera de ser contratados también adquieren mucha similitud. Ramón Calderón peleó por traerse a una de sus promesas electorales hasta que el 22 de agosto se hizo realidad. Los 36 millones que costó están por encima del precio real de mercado y de su rendimiento hasta el momento. También otro Ramón, Mendoza, luchó más por conseguir el transfer del jugador de 22 años (uno menos que cuando Robben puso su firma en el Santiago Bernabéu) ya que la Federación Yugoslava de Fútbol impedía que los jóvenes nacionales jugasen en el extranjero. Su precio también estaba muy por encima de su rendimiento, 2.500 millones de pesetas. Ambos fueron los respectivos fichajes estrellas de la temporada.

Hoy Robben no estará en el Ono Estadi de Mallorca porque sufre una "sobrecarga en los isquitiobiales del muslo izquierdo"https://www.elconfidencial.com/deportes/2008-01-09/la-enfermeria-trastoca-los-planes-de-schuster_366003/ target=parent>parte médico que desconocía Bernd Schuster. Junto al holandés tampoco estarán los lesionados Metzelder, Cannavaro, Heinze, Baptista y Soldado.