Los mejores sacos de dormir para hacer acampada, senderismo o 'trekking'

Elegir un saco de dormir no es tarea fácil porque va a depender de muchos factores. No existe el saco de dormir perfecto y el modelo que nos puede servir a nosotros puede no valer para otra persona: todo dependerá de nuestras necesidades, el clima y el uso que le vayamos a dar. Hay muchos tipos de sacos de dormir y, por eso, has de tener muchos aspectos en cuenta para acertar con tu compra. Hay sacos para acampada, ligeros, para adultos, para niños, acolchados, impermeables, de franela, de algodón, cómodos, para jóvenes, deportivos, para senderismo, para viajes, portátiles, para climas extremos, etc.

Una de las mejores opciones es este saco de dormir Millet, diseñado tanto para hombres como para mujeres. Además de protegerte del frío gracias a su fabricación con materiales aislantes, tiene un refuerzo térmico polar tanto en la cabeza como en los pies. Otra buena compra es la del saco de dormir Active Era, que aguanta condiciones extremas de hasta 10 grados bajo cero y que puede convertirse en el compañero de viaje ideal para los amantes de los festivales y las acampadas de verano.

El mejor, nuestra elección: Saco de dormir momia Millet

Este saco de dormir es uno de los mejores del mercado. Destaca por estar adaptado a la morfología femenina para pasar las noches abrigados y aislados del frío y la humedad. Su uso es ideal como ropa de cama complementaria durante la práctica de acampada, senderismo y trekking. Te va a garantizar el aislamiento e impermeabilidad gracias a su relleno sintético y al exterior de poliamida y reduce la pérdida de calor gracias a la solapa antifrío interna.

Este saco, además, tiene forma de sarcófago ajustada al cuerpo para un aislamiento óptimo, goza de refuerzo térmico polar en pies y cabeza y es un modelo ligero y fácil de transportar con funda de compresión incluida. Este modelo es combinable con cremallera a la izquierda, tiene capucha con cordón de cierre para minimizar la entrada de aire y va equipado con un práctico bolsillo interior para guardar accesorios al alcance de la mano. Mide 205 centímetros de largo, tiene un peso de 870 gramos y una capacidad de 3,5 litros.

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Alternativa: Saco de dormir rectangular Active Era

Es una de las propuestas con mejor relación calidad y precio. Está hecho de una cubierta exterior duradera y resistente a rasgaduras, con un cálido relleno aislante de 200 GSM. Estará siempre a una temperatura agradable y cálida hasta los 15 grados, teniendo un límite extremo de 3 bajo cero, lo que hace que se pueda usar a temperaturas bajas. Es compacto, liviano y fácil de transportar y guardar y se puede meter en la lavadora sin problemas.

Alberto y Carmen se hicieron con él para su hijo de 12 años: "Lo usó para un campamento en un albergue en el mes de junio, en Orense. Es un niño que suele tener calor y probando otros sacos finos, pero con algo de relleno sudaba un montón. Sin embargo, con éste, genial: no pasó calor ni tampoco frío. También tiene la ventaja de que es ancho ya que le gusta dormir con soltura, no sentirse apretado. Lo recomiendo 100%". Este saco de dormir tiene una valoración media de 4,3 sobre 5.

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Saco de dormir en forma de momia Active Era

Este modelo vale para cualquier ocasión y es perfecto para acampar o salir de noche. Es de tipo momia y está fabricado con poliéster 190T duradero (material exterior). En su interior tiene un forro interior de 150 g / m². Sus rangos de temperatura recomendados son confort de 18°C a 15°C y extremo hasta 5°C. Tiene un peso de 800 gramos y unas dimensiones de 2,10 metros de largo por 80 centímetros de ancho.

Lou explica que "lo compré para las colonias de mi hija de siete años en previsión de que lo pueda utilizar más veces, ya que también lo puede usar un adulto. Las medidas son tal cual lo pone en las especificaciones y no se pasa nada de frío. Además, es muy ligero. El único inconveniente que le veo es que no se puede lavar a máquina". Este saco de dormir tiene una valoración media de 4,3 sobre 5.

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¿Cómo elegir un saco de dormir y qué tener en cuenta antes de comprar uno?

Elegir un saco de dormir no es fácil, ya que no se debe elegir ni el más caro ni el más barato. Tenemos que optar por el que más se adapte a nuestras necesidades. Estos son algunos factores que hay que tener en cuenta a la hora de ir a comprar uno:

• El rango de temperatura: son los grados en los que el saco te mantendrá en una temperatura de confort. Hay sacos que permiten soportar temperaturas muy bajas, mientras otros solo están indicados para temperaturas medias.
• Tamaño: los hay de diferentes medidas. Hay que tener en cuenta el ancho y, sobre todo, la altura de cada persona, comprando el saco que se adapte a la estatura de quien lo vaya a utilizar.
• Material: suelen estar fabricados con materiales a base de poliéster para garantizar la durabilidad. También es importante la suavidad y que el acolchado sea cómodo y no se desplace.
• Impermeabilidad: es importante que el material exterior sea siempre repelente al agua.
• Cierres: fíjate en el detalle de cómo son las cremalleras. Comprueba que se pueden abrir sin problemas desde dentro y que tienen sistema de sellado para un aislamiento pleno.
• Relleno: es muy importante. Revisa el material y el grosor, ya que eso será lo que te dará más o menos aislamiento y comodidad.
• Precio: depende del presupuesto que tengas para gastar. Recuerda que no siempre lo más caro es lo mejor.

¿Qué es un saco de dormir?

Se puede definir como una bolsa de dormir​ o sobre de dormir. Lleva una bolsa protectora diseñada para que una persona duerma en su interior. Dicho de otra manera, se puede decir que es una manta que se puede cerrar con una cremallera y hace de cama en situaciones concretas como acampadas.

¿Dónde puedo usar un saco de dormir?

El uso de un saco de dormir es muy amplio. Se puede usar en cualquier lugar como sustitutivo de una cama, pero los lugares más asiduos son en plena naturaleza:

• En la montaña.
• En el campo.
• En un bosque.
• En un albergue.
• En una habitación y encima de un cama o colchón cuando no hay sábanas.
• En el interior de un vehículo.
• En un jardín.

Se puede utilizar en cualquier lugar como sustitutivo de una cama, pero los lugares de uso más comunes son en plena naturaleza

El saco de dormir se puede utilizar en muchos más sitios donde quieras dormir a la intemperie. Es la mejor forma de estar protegido ante las bajas temperaturas de la noche y, al mismo tiempo, estar en contacto con la naturaleza.

¿Cómo dormir en el saco?

Dormir en un saco no tiene mucho misterio, pero siempre se recomiendan unos pasos antes de meternos y descansar en su interior.

El primer paso es preparar el lugar donde vamos a dormir. El saco debe estar aireado y bien estirado para que las fibras interiores estén perfectamente repartidas y consigamos la máxima comodidad. Si duermes a campo abierto, revisa bien que el suelo esté seco: nunca te tumbes en un suelo húmedo o mojado. Evita estar cerca del agua o charcos y también de hogueras, ya que cualquier chispa que contacte con el saco de dormir podría hacer que arda como una tea.

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Cuando despiertes, airea el saco, estíralo bien y dóblalo con cuidado para que las fibras aislantes del interior se conserven bien. El doblado es fundamental para que nos dure muchos años y para transportarlo con comodidad y facilidad.

Tipos de sacos de dormir

Hay varios tipos de sacos de dormir:

• Saco rectangular: tienen forma de rectángulo.
• Saco de momia: tienen forma de sarcófago.
• Doble saco: se usa mucho en alta montaña, ya que tiene dos sacos de plumas cosidos uno encima del otro y con costuras contrapuestas. De esta forma, consiguen un gran aislamiento.
• Saco de sábana: es una funda interior de tela que hace de sábana y su función es higiénica porque evita el contacto con el saco y con las mantas y colchones de los refugios, por ejemplo. Se lavan fácilmente en la lavadora.
• Funda de vivac: se usan para dormir al raso y funciona como la tercera capa impermeable de la vestimenta de montaña. Cortan el viento y protegen de la lluvia.

¿De qué están rellenos los sacos?

Los sacos están rellenos de dos materiales:

• Material sintético.
• Plumas.

Los sacos sintéticos son más baratos, no requieren un trato tan delicado y son más fáciles de encontrar que los de plumas.

Los sacos sintéticos son más baratos, no requieren un trato tan delicado y son más fáciles de encontrar que los de plumas

Los sacos de plumas tienen mayor amplitud térmica porque abrigan más y esto depende del relleno. Estos sacos son más pequeños a la hora de transportarlos y su uso más recomendable es para la montaña o lugares de clima muy frío.

¿Qué tipo de cuidados requieren?

Un saco de dormir requiere ciertos cuidados:

• Es muy importante desempaquetar correctamente los sacos y saber sacudirlos.
• Debemos entrar en el saco estando caliente y seco.
• Es recomendable, antes de meternos en el saco, hacer un poco de ejercicio. De esta forma se calentará antes.
• Airearemos el saco de dormir tras usarlo para que quitarle la humedad.
• Cuando lleguemos a casa, sacar el saco de la funda comprimible y colgarlo en una percha. Así no se estropeará.

¿Cómo recogerlo y transportarlo?

Recoger un saco de dormir es muy importante para que nos dure muchos años. Es, posiblemente, el mantenimiento más importante. Ante todo, hay que hacerlo con cuidado y mucha paciencia. Antes de recogerlo debe estar bien aireado, sin humedad y bien estirado para arrugar lo menos posibles las fibras interiores y aislantes.

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Una vez doblado como se indica en las instrucciones del saco (hacerlo metódicamente y sin prisa), hay que meterlo en su funda y cerrarlo bien. Evita llevarlo en un lugar que lo oprima, no pongas nada pesado encima ni al transportarlo ni al almacenarlo.

¿Qué es el rango de temperatura y por qué hay que considerarla?

El rango de temperatura de un saco de dormir es la temperatura mínima y máxima que te va a garantizar dicho saco. Este dato es importantísimo a la hora de elegir un modelo. Ten en cuenta que este rango térmico va a depender de la edad, el género, la grasa corporal, el estado físico, la alimentación y la hidratación de cada persona.

Hay cuatro rangos de temperatura: máxima, de confort, límite de confort y extrema. Cada una de ellas marca los grados de temperatura a los que se puede exponer una persona cuando utiliza un determinado saco. Es una información imprescindible y que hay que tener muy en cuenta ya que, en caso de no elegir el saco que más se ajuste a nuestras necesidades, podemos pagarlo caro.

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La norma europea EN 13537 es la que define un procedimiento que determina los límites de temperatura ambiental para el uso seguro de los sacos de dormir con respecto a sus propiedades térmicas. Cada saco tendrá esta información en su etiqueta. Ante cualquier duda, pregunta siempre a un especialista.

¿Cuáles son las mejores opciones del mercado?

El mercado está repleto de modelos y marcas de prestigio, pero los más destacados son: Western Mountaineering Sycamore, Marmot Fase 30, Sea to Summit Spark 2, Marmot Trestles Elite Eco 20, Teton Sports Celsius Regular, Mountain Hardwear Phantom Spark o el Patagonia 850. Además, tienes todas nuestras recomendaciones de los diez modelos anteriores mencionados, con la mejor relación entre calidad y precio.

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Con toda esta información ya tienes todos los conocimientos necesarios para poder comprar tu saco de dormir y disfrutar de tu salida a la naturaleza. Importante: si buscas un saco muy técnico para alta montaña, lo mejor es que acudas a un lugar especializado.

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