"La cultura necesita dejar de ser un arma arrojadiza entre la izquierda y la derecha"

La noche de los Goya de ayer fue la noche de La isla mínima pero también la noche de la celebración de un año histórico para el cine español. Una noche de fiesta en la que el ministro de Cultura, José Ignacio Wert, volvió a sentarse entre actores, directores o productores para escuchar una reivindicación fundamental: Ha sido nuestro año y "ahora la pelota está en su tejado", tal y como explicaba Alberto Rodríguez, director de La isla mínima con su Goya a mejor director en la mano.

"Nosotros estamos aquí esperando. Ahora mismo la pelota esta en su tejado y el problema es suyo, no nuestro. Nosotros hemos demostrado que a pesar de todos los incovenientes, de dificultades, del IVA, del recorte de subvenviones y de todo lo que ha planetado este Gobierno podemos hacer películas y podemos hacerlas muy bien. A pesar de todo esto, esteaño se ha hecho cine muy variado y que encima ha llegado al público. Por eso, la cultura necesita dejar de ser un arma arrojadiza entre la izquierda y la derecha de este país de una vez. Eso es lo más importante", explicaba el director aEl Confidencial al concluir la gala.

No se puede quejar el ministro ni el PP de que ha sido una gala subida de tono o que nos hemos metido con alguien. Ha sido muy elegante y respetuosa

Su película se ha llegado diez de las 17 estatuillas a las que optaba convirtiéndose en la gran triunfadora de la noche. Algo, añadía, que no esperaba."2014 ha sido un año fántastico. Por eso, entre otras cosas, pensaba que los premios iban a estar más repartidos. Hemos tenido suerte, pero lo más importante es que este año ha sido un año muy potente con películas muy buenas".Fiesta,por tanto, sí pero sin olvidar todo lo que lastra a esta industria. Algo que también compartía Javier Gutiérrez, protagonista de su película mientras admiraba su cabezón.

"Nosotros hemos puestoesta noche mucho de nuestra parte. No se puede quejar el ministro ni el PP de que ha sido una gala subida de tono o que nos hemos metido con alguien. Ha sido muy elegante y respetuosa, porque tenía que ser así. Creo que teníamos que disfrutar de una noche y de recoger lo que hemos sembrado", comentaba el ganador a Mejor Actor Protagonista. Es más, proseguía, "si quieres ha sido una nochecon un punto de indiferencia a los que nos gobiernan que creo que no se merecen participar de esta fiesta".

Gutiérrez aseguró estar "aterrizando" por el premio, además de "muy orgulloso del trabajo hecho", y valoró la velada como "la noche ideal para La isla mínima. 10 Goyas de 17 tal y como se presentaba la batalla ha sido un buen número". Y más allá de ello, "ha sido un año inmejorable para el cine. Ojalaque el año que viene mantengamos eselistón aunqueva a ser complicado. Hay que ser realista. Hahabido un fenómeno social como ha sido Ocho apellidos vascos que ha abierto la puerta a que otras películas tuviésemos el favor de publico y, en ese sentido, ese buque de proa no sési va a existir el año. Sí habrá películas muy buenas y espero que sigamos contando con el beneplácito de un público que por fin se ha dado cuenta de que se hacen grandes peliculas con poco dinero".

Bárbara Lennie fue otra de las grandes triunfadoras de la noche con el premio a Mejor Actriz protagonista por Magical Girl, él unico premio que se llevó al final el filme de Carlos Vermut. Volada y del revés, Lennie explicó a este periódico que el cine español se mueve en una "ambivalencia. Por un lado, parece que todo va muy bien pero, por otro, viivmos como su fuéramos una infra industria", aseguró. Y sobre Wert afirmó: "No ha dicho ni mu. El verá lo que hace. No sé. La verdad es que me desubica tanto su manera de estar y ser que no se muy bien que decir".

La noche también fue especial paraNerea Barros, que se llevó el Goya aMejor Actriz Revelación por La isla mínima. Emocionadísima -o de subidón como no paraba de repetir besando su premio- quiso dedicar su premio a todas "esas madres que luchan cada día por salir adelante" como su personaje en La isla mínima. Barros, además, quiso destacar la importancia de este 2014 porque "hemos roto esa distancia con el público.Ya tenemos al público de nuestro lado", decía. ¿Y a las instituciones? "Todos cometemos errores, yo la primero, pero deben entender que estamos todos en el mismo barco. Tenemosque ponernos de acuerdo e ir juntos para mejorar este país. Somos maravillosos los españoles, sólo tenemos que creérnoslo y trabajar juntos. Espero que los políticos se suban al barco porque el publico y el cine ya están en el mismo barco".

El reconocimiento al efecto Ocho apellidos

Los Goya también reconocieron ayer el taquillazo del año que tan buenos datos ha reportado al cine español: Ocho apellidos vascos. La película se llevó tres premios de interpretación de los cinco a los que optaba. Dani Rovira, mejor Actor revelación además de conductor de la gala, destacó anohe la responsabilidad que supone un premio como este en una primera película. Asegurando que "nunca va a dejar de hacer comedia", la pregunta obligada era por esos "orcos del Estado" a los que hizo mención en la gala.

"Los orcos del Estado son esos seres oscuros que a veces se cuelan y se meten en puestos oficiales que a lo mejor deberían estar ocupados por gente con vocación, empatía y humanidad y cuando no sucede es como pequeño orco. Los orcos, las arcas y las arcás, como dicen en Sevilla", bromeaba.

Karra Elejalde y Carmen Machise llevaron también los premios a actores de reparto. Antes de entrar a la gala, ambos aseguraban que no estaban nervioso y la tranquilidad les fue mejor que bien. "Lo estamos pasando muy mal en esta profesión. Este año ha servido para maquillar un poquito las cifra,pero la verdad es que tenemos un problema. Tenemos un tumor endémico y necesitamos a un Gobierno que defienda realmente nuestro cine y una ley de defensa del cine la de Francia. Aquí estamos con todo el culo abierto al cine americano y que nos den por todos lados", aseguraba Elejalde con su segundo cabezón en la mano.

"Es una reconciliación con el públicocuando no había pelea, pero no había amor y ahora es cierto que hay algo. El espectador español se siente orgulloso de su cine igual que nos sentimos los que lo hacemos", concluía para remachar que ahora es el turno del Gobierno."Me gustaría que se hiceran cargo de lo que ha pasado este año porque con las dificultades que nos ponen encima, con este IVA y con todo,hemos llenados sus arcas. ¿Qué mas quieren?Vamos a empezar a pensar peor aún".