Una película asiática con una puesta en escena milimétrica redefinió el romance en pantalla, al convertir el silencio en relato. Veinticinco años después de su estreno, la cinta de Wong Kar-Wai sigue enamorando al público, que en España tiene la oportunidad de recuperarla en la plataforma de streamingFilmin.
El título es In the mood for love (Deseando amar), y su leyenda se sostiene desde su presentación a competición oficial en el Festival de Cannes, donde Tony Leung obtuvo el premio a Mejor actor, siendo el primer intérprete de Hong Kong en lograrlo.
Seleccionada por su país para competir en los Oscar en película internacional, la historia, situada en el Hong Kong de 1962, acompaña a dos vecinos, Maggie Cheung y Leung, que descubren la infidelidad de sus parejas y, sin llegar a consumar su propia atracción, levantan una de las grandes arquitecturas del deseo en el cine contemporáneo.
El tempo sostenido, la economía de diálogos y un montaje que convierte la repetición en rito emocional: La fotografía, llevada a cabo por Christopher Doyle y Mark Lee Ping Bin, hace del pasillo, el marco de la puerta y el reflejo, una partitura visual, mientras los qipaode Cheung y los desplazamientos laterales establecen un vocabulario de gestos que el espectador aprende a leer.
Además, la banda sonora, con temas en español de Nat King Cole, contribuye a esa atmósfera de nostalgia coreografiada, que tantos directores han tomado como referencia cuando exploran el slow cinema o la "estética del encuadre". Por todo ello, In the mood for love se estudia hoy como una sugerente obra maestra de la historia del cine.
Una película asiática con una puesta en escena milimétrica redefinió el romance en pantalla, al convertir el silencio en relato. Veinticinco años después de su estreno, la cinta de Wong Kar-Wai sigue enamorando al público, que en España tiene la oportunidad de recuperarla en la plataforma de streamingFilmin.