Ganó 7 premios Goya y está en Netflix y Movistar+: la película histórica que fue un éxito y hay que ver sí o sí

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Las plataformas de ‘streaming’ siguen rescatando joyas del cine español que marcaron un antes y un después. Y una de ellas, sin duda, es este drama histórico de Alejandro Amenábar que triunfó en los Goya y conquistó a millones de espectadores. Disponible ahora en Netflix y Movistar+, ahora es el momento perfecto para (re)descubrir una película que combina historia, ciencia, religión y una producción visual impresionante.

Siete premios Goya, trece nominaciones y un éxito rotundo en taquilla. Ágora fue la cinta más taquillera en España en 2009, recaudando más de 21 millones de euros, una cifra nada desdeñable para una película de época, rodada en inglés y con un enfoque poco habitual en nuestro cine. Su protagonista, la brillante actriz británica Rachel Weisz, da vida a Hipatia de Alejandría, una astrónoma, matemática y filósofa que luchó por preservar el conocimiento en un mundo cada vez más dominado por el fanatismo religioso.

El Egipto romano del siglo IV sirve como telón de fondo para un relato tan fascinante como crudo. En medio de la tensión entre cristianos, judíos y paganos, Hipatia se convierte en un símbolo de la razón, la ciencia y la libertad de pensamiento. Su historia, pocas veces representada en la gran pantalla, conecta con temas universales y muy actuales: la intolerancia, el poder político de la religión o la marginación de las mujeres en el saber académico.

Uno de los grandes aciertos de Ágora es su producción. La película se rodó en Malta, donde se recreó minuciosamente la ciudad de Alejandría. Más de 10.000 metros cuadrados de decorado dieron vida a una biblioteca mítica, templos imponentes y el ágora que da título al filme. Todo con un nivel de detalle que le valió galardones como Mejor Dirección Artística, Mejor Vestuario y Mejores Efectos Especiales en los Goya de 2010.

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También se llevó el premio al Mejor Guion Original, escrito por el propio Amenábar junto a Mateo Gil, así como el de Mejor Fotografía, gracias al impecable trabajo de Xavi Giménez. La película combina planos íntimos con tomas aéreas que simulan la mirada del universo, reforzando la idea de que, frente al caos terrestre, el cosmos sigue su curso. Un recurso visual tan poético como impactante.

Además de su poderío visual, Ágora generó un fuerte debate en su estreno por su retrato del cristianismo primitivo, mostrado como una fuerza que, en su afán de dominio, arrasó con el conocimiento clásico. Aunque Amenábar dejó claro que su intención no era atacar ninguna creencia, sino exponer unos hechos históricos, la controversia solo aumentó el interés por la película.

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Con un presupuesto de alrededor de 50 millones de euros, fue la película española más cara hasta ese momento. Y, a pesar del riesgo, el público respondió. La figura de Hipatia, interpretada con una mezcla de fuerza y sensibilidad por Weisz, ha ido ganando peso como símbolo feminista y racionalista, inspirando a nuevas generaciones de espectadores y convirtiéndose en referente de un cine comprometido con la historia y el pensamiento.

Ahora que está disponible en streaming, Ágora se presenta como una oportunidad ideal para disfrutar de una película que lo tiene todo: épica, reflexión, belleza visual y una historia tan real como relevante.