Qué hay de cierto y qué no en 'The Brutalist', la película de Adrien Brody nominada al Oscar
Gracias a la nueva obra de Brady Corbet, el actor neoyorkino podría ganar su segundo galardón como Mejor Actor Principal. El primero fue con la cinta 'El pianista'
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La película The Brutalist ha generado un gran debate entre los espectadores tras su éxito en los Globos de Oro y sus recientes nominaciones a los Oscar. La película de Brady Corbet, protagonizada por Adrien Brody, narra la vida de László Tóth, un arquitecto húngaro judío, que emigra a Pensilvania después de la Segunda Guerra Mundial. El papel podría brindarle al actor estadounidense su segunda estatuilla como Mejor Actor Principal, después de ganarlo en 2003 por El pianista.
Con una duración de 3 horas y 35 minutos, y coprotagonizada por Felicity Jones y Guy Pearce, el filme se presenta con el estilo de un biopic, explorando el impacto del protagonista en la arquitectura brutalista y su adaptación al sueño americano. Sin embargo, muchos se preguntan si la historia de Tóth es real o si la película se basa en hechos históricos.
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Pese a la sensación de autenticidad que transmite la cinta, László Tóth es un personaje completamente ficticio. No existen registros de un arquitecto con ese nombre que haya influido en el brutalismo, y la trama no se inspira en una figura concreta. Aunque la historia de Tóth refleja la experiencia de miles de inmigrantes europeos que reconstruyeron sus vidas en Estados Unidos tras la guerra, su biografía es una creación del guion.
Adrien Brody ha reconocido en una entrevista de CNN que su interpretación se basó en las vivencias de su madre, una inmigrante húngara, y en la estética de arquitectos como Marcel Breuer, Louis Kahn y Paul Rudolph, pero sin vincularse directamente a ninguno de ellos.
Hubo otro László Tóth
Curiosamente, el nombre László Tóth sí existió en la historia, pero no en el ámbito de la arquitectura. En 1972, un geólogo húngaro con ese nombre protagonizó un acto vandálico contra La Piedad de Miguel Ángel en el Vaticano, atacando la escultura con un martillo. No obstante, este incidente no tiene ninguna relación con la película.
The Brutalist es, en definitiva, una ficción que juega con la estética del realismo y la historia de la arquitectura moderna para construir una narrativa convincente, pero sin un referente histórico concreto.
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La película The Brutalist ha generado un gran debate entre los espectadores tras su éxito en los Globos de Oro y sus recientes nominaciones a los Oscar. La película de Brady Corbet, protagonizada por Adrien Brody, narra la vida de László Tóth, un arquitecto húngaro judío, que emigra a Pensilvania después de la Segunda Guerra Mundial. El papel podría brindarle al actor estadounidense su segunda estatuilla como Mejor Actor Principal, después de ganarlo en 2003 por El pianista.