Denzel Washington echa la culpa al diablo de la bofetada de Will Smith a Chris Rock

La gala de los Oscar sigue dejando noticias que gotean sin cesar sobre lo sucedido entre Will Smith y Chris Rock. En los últimos días hemos conocido un vídeo grabado desde otra perspectiva que no dejaría en buen lugar a Jada Pinkett, la esposa de Smith, pero también hemos sabido que la policía intentó detener al actor durante la emisión de la gala, aunque finalmente desecharon la idea.

Ahora, Denzel Washington ha sido uno de los últimos en referirse a lo que sucedió en la noche del domingo 27 de febrero. El famoso actor fue uno de los que acudió a calmar a Will Smith en una pausa de la gala y después de que protagonizara el bochornoso episodio de la bofetada. Sin embargo, hasta ahora no había hablado públicamente sobre lo sucedido.

Denzel Washington fue el invitado estrella en la cumbre de liderazgo organizada por el famoso obispo evangélico T.D. Jakes. Y, durante las dos horas que duró su intervención, hubo tiempo para hablar de su carrera, pero también de lo sucedido en la entrega de los Oscar. Y el protagonista de 'American Gangster' o 'Huracán Carter' no rehuyó la cuestión.

La culpa es del diablo

Tal y como recoge la CNN, Washington habló claro sobre lo que pensaba que había sucedido: "Hay un dicho que dice que 'cuando el diablo te ignora, entonces sabes que estás haciendo algo mal'. Sabes, el diablo dice, 'oh, no, déjalo en paz, es mi favorito. No lo molestes'. Por el contrario, cuando el diablo viene a ti, tal vez sea porque estás tratando de hacer algo bien. Y por alguna razón, el diablo se apoderó de esa circunstancia esa noche".

Durante la charla, Denzel Washington añadió que tanto él como el actor y productor Tyler Perry estuvieron rezando con Will Smith después de lo que ocurrió con Chris Rock: "Afortunadamente, había gente allí, no solo yo, sino otras personas en el descanso. Tyler Perry vino de inmediato, justo allí conmigo".

El actor no quiso explicar sobre de qué hablaron en el escenario, pero sí tiene claro que él no es nadie para calificar lo sucedido con Will Smith: "¿Quiénes somos nosotros para condenar? No conozco todos los pormenores de la situación, pero sé que la única solución fue rezar". Sin duda, la de Washington es una voz más que autorizada para dar su versión sobre lo sucedido.