Es noticia
¿Cuál es la película española que arrasa en China? El dragón se come el cine mundial
  1. Cultura
  2. Cine
más vista en el gigante asiático que en nuestro país

¿Cuál es la película española que arrasa en China? El dragón se come el cine mundial

La sexta película más taquillera del 2017 en el mundo ha sido 'Wolf War 2', una producción China, mientras España prepara su primera gran coproducción con el gigante asiático

Foto: Una imagen promocional de 'Wolf Warrior'. (Beijing Dongfang International Cultural Communications Company,)
Una imagen promocional de 'Wolf Warrior'. (Beijing Dongfang International Cultural Communications Company,)

Habla el dicho de poner una pica en Flandes, pero en pleno siglo XXI Flandes ha quedado desfasada y ahora las coordenadas apuntan algo más hacia oriente. China se despereza y le ha entrado hambre de comerse el mundo. Y en el caso del mercado cinematográfico, también. El pasado 2017, la industria cinematográfica del gigante asiático ha protagonizado dos hitos que podrían significar un cambio de paradigma tanto en la taquilla internacional como en la producción española: primero, colocando 'Wolf Warrior 2', una producción china, como la sexta película más taquillera del año —con 688 millones de euros de recaudación, y eso a pesar de un mercado limitado casi exclusivamente a Asia—, y segundo, estrenando una película española, 'Contratiempo' —protagonizada por Mario Casas y Bárbara Lennie y dirigida por Oriol Paulo—, que allí ha recaudado 23 millones de euros, siete veces más que en España. Un caso inédito.

Foto: Madrio Casas es Adrián Doria en 'Contratiempo'

Se quejaba el Grupo Furtivos en uno de sus últimos artículos, a principios de diciembre, de que el cine español "no sale ni a que le dé el aire": "Entre las más de 200 películas que se presentan a los premios Goya", explicaban, "apenas una docena ha tenido un cierto recorrido comercial por las salas de cine españolas. Hablamos de títulos que hayan reunido en sala a más de 50.000 espectadores. Se supone que una peli necesita gastar un mínimo de 300.000 euros en copias y publicidad para ser estrenada en más de 50 pantallas. Si el productor quiere recuperar (¡sólo recuperar!) esta cantidad, el filme tiene que ser visto por, al menos, 100.000 personas". Teniendo en cuenta que en 2017 tan sólo 25 películas españolas superaron los 100.000 espectadores... hagan cuentas.

¿El mercado chino para salvar la industria española?

'Contratiempo' llegó a la cartelera española hace ahora un año. Un 'thriller' ambientado en el norte de España con un cadáver de por medio y muchas mentiras y giros de guión de por medio. Y cuatro millones de euros de presupuesto que, a pesar de ser la séptima película más taquillera del año en España, los productores no consiguieron recuperar. Nada nuevo bajo el sol.

La sorpresa llega cuando aparecen las noticias de que en China la película está teniendo muchas descargas, lo que empuja a los productores a negociar la distribución en el país asiático, que acaba estrenando en sus cines la película y recaudando gracias a ella 23 millones de euros. "El caso de 'Contratiempo' es una referencia sobre todo de cara al futuro", advierte Larry Levene, director y productor español con fuertes lazos con la industria china. "Que se proyectase allí fue una decisión de China Film Group —la empresa estatal de cine más grande e influyente de la República Popular China— que llevaba detrás su apuesta por acabar con cuatro tabús muy importantes de cara al 'box office' chino. El primero de ellos es que, para que una película triunfe en China, tiene que tener contenido chino. El segundo es que debe tener alguna localización en China. El tercero es que debe participar algún actor o actriz chino. Y el cuarto es que, para que una película extranjera triunfe en China, tiene que ser americana".

placeholder Una imagen promocional de 'Contratiempo'. (Warner)
Una imagen promocional de 'Contratiempo'. (Warner)

"'Contratiempo' acaba con los cuatro tabús", prosigue Levene, productor de 'Katmandú' y de 'Thi Mai', entre otras. "Lo que supone una apertura para el cine extranjero no norteamericano en China. Al principio fue el boca a boca, pero luego fue el propio vicepresidente de China Film Group el que en persona tomó la decisión de distribuirla. Además, apostó decididamente por una gran campaña publicitaria: en el metro de Pekín, por ejemplo, ponían el tráiler constantemente. Para un futuro abre posibilidades importantísimas".

"Y en estos momentos hay varios proyectos en marcha que están buscando coproducción en China", adelanta el productor. Unas uniones fomentadas por el acuerdo que en 2014 firmaron el Gobierno de España y el de la República Popular China para "mejorar la cooperación entre los dos países en el campo cinematográfico" y "fomentar y facilitar la coproducción de películas por ambos países y promover el desarrollo de sus intercambios culturales y económicos". Y entre ellas está 'Dragonkeeper', la adaptación animada de la primera novela de la saga homónima escrita por Carole Wilkinson y producida por Dragoia Media —empresa radicada en A Coruña—, Movistar+, Atresmedia Cine y China Film Animation.

placeholder Una imagen de 'Dragonkeeper'. (Atresmedia)
Una imagen de 'Dragonkeeper'. (Atresmedia)

"'Dragonkeeper' no es un proyecto, es una realidad", subraya Levene, "y se estrenará para el Año Nuevo chino de 2020. Es prácticamente el primero de los proyectos acordados dentro del convenio bilateral de coproducción firmado entre España y China y abre enormemente un campo distinto, que es el del primer intento desde Europa por una coproducción con China que tiene vocación de no sólo triunfar en el mercado chino, sino en el mercado internacional. Es contarle un cuento chino a los chinos, porque es una leyenda china, pero con la estructura narrativa occidental". En teoría, de un presupuesto de 20 millones de euros —una cifra bastante poco habitual en el cine español—, China Film Group financiará el 50%. Y es que abrir mercado en un país de más de 1.300 millones de habitantes y contar con el beneplácito de un Estado que lo controla todo, no es peccata minuta.

El mayor competidor de Hollywood

Desde hace unos años, los estudios de Hollywood también han visto en China una posible tabla de salvación para sus frágiles cuentas. Muy sonado fue en 2016 el caso de 'Warcraft', del director Duncan Jones, que con más de 132 millones de euros de presupuesto no consiguió recuperar más de 39 millones en la taquilla estadounidense, un descalabro mayúsculo, salvado in extremis por la recaudación conseguida en China, que fue de más de 177 millones. Otro ejemplo es la quinta entrega de la saga 'Mission: Impossible', coproducida con China Movie Channel, que ganó 162 millones de euros en Estados Unidos frente a 112 millones en China. A lo que hay que sumar el caso de 'Wolf Warrior 2', la primera película china en convertirse en el sexto título más taquillero del año a nivel mundial. Aunque en Estados Unidos y Australia ha recaudado una cifra irrisoria, al menos ha hecho valer el peso demográfico de un país en expansión.

Por eso las grandes majors han optado por ir introduciéndose de forma paulatina con coproducciones, mezclando estrellas de Hollywood con grandes actores asiáticos famosos como protagonistas de historias que beban de la tradición china o que, al menos, integren parte de la cultura china. Sin los beneficios del país asiático, la superproducción 'La gran muralla', protagonizada por Matt Damon y Tian Jing y dirigida por Zhang Yimou, hubiese sido un auténtico fiasco. 'Fast & Furious 8' ha sido la segunda película más vista en China en 2017, doblando casi la taquilla estadounidense, al igual que la última entrega de 'Transformers'. Extrañamente, 'Star Wars' todavía no ha conseguido abrirse un hueco preeminente.

placeholder Un fotograma 'Wolf Warrior 2'
Un fotograma 'Wolf Warrior 2'

Según los datos, en 2017 la venta de entradas de cine en China supuso unos ingresos de 7.051 millones de euros, unos números que, si siguen creciendo, harán que el mercado audiovisual chino sobrepase a Hollywood en pocos años. Sin embargo, hasta ahora ha sido un mercado muy protector con su producción nacional: en 2012, el acuerdo del Gobierno chino con la Organización Mundial del Comercio estableció un límite de 34 estrenos extranjeros anuales, mayoritariamente estrenos de Hollywood. Para saltarse la cuota, sólo queda el resquicio de la coproducción, supervisada por el Estado, y en la decisión de cuáles serán esas 34 películas que formarán parte de la cuota intervienen los tabús no escritos de los que habla Levene, a los que hasta ahora las productoras se han ceñido siempre. Y otra cuestión que deben tener en cuenta las producciones con actores occidentales es el problema de los rasgos faciales, como admite Levene. "Nosotros somos más parecidos para ellos. La variabilidad genética de los chinos es superior a la de los caucásicos, así que les resulta muy difícil distinguir nuestros rasgos".

El segundo escollo es que "China tiene una muralla mucho más grande que su Gran Muralla, que es internet", admite Levene. "Ninguna de las grandes plataformas son accesibles, ni YouTube ni Google. Si estás en China y buscas Google te aparecerá en un perfecto inglés 'not found' [no encontrado]. Tampoco el cine extranjero se libra del bloqueo. Pero hay una fórmula de saltarse el bloqueo, que es a través de las redes VPN [servicios web que ocultan la dirección I.P.]. Los que acceden son formadores de opinión, influencers, que marcan bastante tendencia".

Sin embargo, China también empieza a ser consciente de su posición estratégica: en los próximos años planea aumentar el límita de estrenos extranjeros en sus cines y sigue firmando convenios de coproducción por todo el mundo. Su objetivo: cumplir las predicciones que auguran que, para 2020, la industria de cine china liderará la producción mundial con más de 800 títulos anuales y casi 9.000 millones de recaudación de taquilla. Un gran depredador para Hollywood, un salvavidas para el cine español.

Habla el dicho de poner una pica en Flandes, pero en pleno siglo XXI Flandes ha quedado desfasada y ahora las coordenadas apuntan algo más hacia oriente. China se despereza y le ha entrado hambre de comerse el mundo. Y en el caso del mercado cinematográfico, también. El pasado 2017, la industria cinematográfica del gigante asiático ha protagonizado dos hitos que podrían significar un cambio de paradigma tanto en la taquilla internacional como en la producción española: primero, colocando 'Wolf Warrior 2', una producción china, como la sexta película más taquillera del año —con 688 millones de euros de recaudación, y eso a pesar de un mercado limitado casi exclusivamente a Asia—, y segundo, estrenando una película española, 'Contratiempo' —protagonizada por Mario Casas y Bárbara Lennie y dirigida por Oriol Paulo—, que allí ha recaudado 23 millones de euros, siete veces más que en España. Un caso inédito.

Hollywood
El redactor recomienda