Peris Romano: "Si no eres Almodóvar o Amenábar, o demuestras algo o no ruedas"

'Los miércoles no existen' es la historia de una carrera de fondo. Esa que comenzó cuando su director, Peris Romano, tenía 21 años. Tenía una amiga con la que nunca se veía los miércoles. Un día ella le dijo eso de "parece que los miércoles no existen entre nosotros". Y él, que empezaba a estudiar guion, vio que era un nombre estupendo para escribir una historia. La anécdota se convirtió en el guion de una película. El guion mutó en una obra de teatro, con dos versiones y canciones en directo que ha arrasado en la cartelera madrileña -este otoño comienza su quinta temporada y está a punto de llegar a los 100.000 espectadores-. Y el éxito ha hecho que la función se convierta por fin en un filme.

Pero 'Los miércoles no existen' también refleja la historia de cómo está el cine hoy. "Empecé la obra de teatro para llegar a este momento", afirma Romano, aunque "empiezas las cosas sin saber a dónde van a llegar y siendo un idealista, pero al final...". Lo que sí reconoce es que hoy para hacer cine en España "si no eres Almodóvar o Amenábar, o demuestras algo o rodar está complicado".

La crisis nos ha golpeado bien y ha sido una criba enorme para mucha gente de mi generación. Se ha perdido mucha gente muy buena por el camino

En su caso el peregrinaje para convertir su guion y su obra en una película implicó, a pesar del éxito evidente de la función, "que vinieran los productores, las cadenas de televisión, la distribuidora, posibles inversores... para ver cómo reaccionaba el público y tener la mayor seguridad posible de que podía funcionar". Es algo, prosigue, que no pasa con un guion convencional. "En nuestro caso ha estado bien porque al final todo salió, pero ha sido un proceso que ha desgastado mucho porque ibas quemando etapas", dice.

Este es uno de los ejemplos de las secuelas de la crisis sobre el cine español: la necesidad de generar un caso de éxito para que apuesten por un nuevo director [Romano ya había rodado '8 citas', junto a Rodrigo Sorogoyen, y era conocido por su trabajo en televisión]. "La crisis nos ha golpeado bien y ha sido una criba enorme para mucha gente de mi generación. Se ha perdido mucha gente muy buena por el camino. Mucha gente que vino a Madrid con ganas de estudiar y buscar su oportunidad y que se ha tenido que ir al pueblo, como quien dice, a reinventarse porque no había trabajo para todos", asegura. De todos modos, el caso de 'Los miércoles no existen' también lo defiende como una oportunidad nueva: "si hemos sido capaces de abrir la puerta a que los productores busquen en el teatro a nuevos autores a los que dar la oportunidad, eso que nos llevamos todos".

'Los miércoles no existen' es una película coral protagonizada por Inma Cuesta, Gorka Otxoa, Eduardo Noriega, Alexandra Jiménez, María León, William Miller y Andrea Duro. Retrata a una generación de jóvenes de entre 30 y 40 años que se enfrenta a ese momento de decisiones vitales y cambios en el que hay que hacer balance de lo esperado y de lo conseguido en clave de 'dramedia', como la define su director. La pareja, la infidelidad, la maternidad, el trabajo, la crisis personal y social están en una película trufada de canciones y situaciones cotidianas.

"He querido transmitir cómo la crisis nos ha llevado a tener que alargar nuestras decisiones vitales a una edad en la que, de repente, te encuentras que has dado prioridad a realizarte profesionalmente descuidando la familia, el ocio y los amigos o te das cuenta de que tienes que empezar de nuevo. Todas esas cosas son las que se plantean los personajes: si están donde realmente querían estar. No he querido enfatizar la crisis porque bastante mal lo hemos pasado pero está todo en el subtexto y, por su puesto, en situaciones como las que vive William o Gorka, que de un día a otro se puede pagar un piso en la Gran Vía, le despiden y se tiene ir fuera de España a trabajar", analiza Romano.

Lo que sí reconoce este director es que el periplo teatral le ha hecho mucho bien a la película. Lo primero porque "da tranquilidad saber que funciona y gusta" y, en segundo lugar, porque la obra no ha parado ni un segundo de remozarse, ajustarse y testarse. "Ha sido tal la experiencia que has podido hacer una partitura que sabes que funciona. Lo único que había que hacer era no cagarla al llevarla al cine y adaptarla al lenguaje cinematográfico sin perder la esencia que ya tenía", explica.

Con 'Los miércoles no existen' hemos conseguido llevar al teatro a una generación que no iba

Parte de esa esencia se encuentra en las canciones que van poblando el filme. "Surgen porque cuando teatralizo el guion lo que quiero hacer es una película en directo, porque nunca había hecho teatro. Yo era espectador de teatro, pero no un buen espectador. Quería precisamente captar a esa gente que, como yo, no iba al teatro y hacerlo respetando todo lo que el espectador habitual de teatro pide de una función", agrega Romano, que además se muestra especialmente orgulloso de que con 'Los miércoles no existen' "hemos conseguido llevar al teatro a una generación que no iba".

'Los miércoles no existen' ha ocupado la sexta posición en la taquilla en su primer fin de semana en los cines. Su director, además de continuar con la obra y a la expectativa con la película, ahora está centrado en la televisión. Ha escrito dos guiones para la nueva temporada de 'El Ministerio del Tiempo' y ha participado en el diseño argumental, escrito varios guiones y va a rodar cuatro capítulos de la adaptación de la novela 'La sonata del silencio', de Paloma Sánchez-Garnica, que emitirá en febrero en TVE.