El taquillazo que asusta a la policía de EEUU

Es el bombazo comercial del año. Se rodó con un presupuesto de 28 millones de dólares, recaudó 60 el primer fin de semana y ya roza los 170 millones en ingresos. Estrenada el pasado 14 de agosto y dirigida por Félix Gary Gray, viejo amigo de la banda, se ha convertido en la cinta más polémica en lo que llevamos de 2015. Según Forbes, ya se ha apuntado un doble récord: el de biopic musical más taquillero de la historia y el de cinta más rentable donde todos los miembros del reparto son negros. La película, además, ha recibido el respaldo de la crítica, con 7.5 puntos de media en la web de referencia Rotten Tomatoes, que recopila reseñas de estrenos cinematográficos.

Banda sonora de los disturbios

¿Qué convierte a N.W.A., el grupo protagonista, en un fenómeno tan crucial? Para empezar, son los padres del "gansgta rap", una robusta rama del hip-hop que explica la vida en el gueto desde el punto de vista de los jóvenes que afrontan la falta de oportunidades organizándose en pandillas y trapicheando con drogas. ¿Cuál fue el momento de gloria del grupo? Precisamente el disco Straight Outta Compton, publicado en 1988, que más tarde se convertiría en la banda sonora de los disturbios en Los Ángeles en 1992, tras la sentencia absolutoria a los agentes que propinaron una paliza el año anterior a Rodney King, un afroamericano desarmado que no había querido detener su vehículo por temor a superar el nivel de alcohol en sangre. La agresión, grabada en vídeo por testigos, encendió los ánimos en decenas de barrios donde el abuso policial era cotidiano.

Nuestra película habla sobre el pasado, pero también sobre el presente, ya que todavía es normal ver abusos, palizas y homicidios en las noticias

Ese año el álbum alcanzó los tres millones de copias vendidas en Estados Unidos. "Nada ha cambiado desde la paliza a Rodney King", declaró el mes pasado Ice Cube, miembro de N.W.A. "En esa época el jefe de policía de Los Ángeles era Daryl Gates, que había declarado una 'guerra a las bandas' que en realidad era una guerra contra cualquier joven negro que vistiera como las bandas. Nuestra película habla sobre el pasado, pero también sobre el presente, ya que todavía es normal ver abusos, palizas y homicidios en las noticias. Nos enfrentamos a los mismos problemas que antes, pero con más teléfonos móviles para grabarlos. Es un problema de gente abusando de sus posiciones de poder", denuncia.

Temor por las vidas de los agentes

¿Quiénes se han puesto más tensos con el triunfo de la película? Sin duda, el departamento de Policía de Los Ángeles. Su impresión es que la popularidad de la película "pone en peligro la seguridad de los agentes", que ahora mismo están "temiendo por sus vidas" a causa del mensaje de "odio a la policía" que presuntamente transmite el guión. Así describe la situación la web TMZ: "Los agentes con los que hablamos comparten un sentimiento: la película retrata al departamento de policía de Los Ángeles como una máquina de dar palizas". Dennis Zine, oficial retirado, opina que es un momento histórico explosivo para publicar la cinta, debido a la alta tensión racial en el país tras las muertes causadas por la policía en Ferguson, Florida o Baltimore, entre otros lugares.

En esos puntos de EE.UU, controles rutinarios y agentes de gatillo fácil acabaron con la vida de jóvenes afroamericanos como Trayvon Martin, Michael Brown y Freddie Gray. El acoso a la comunidad negra en los barrios pobres de mayoría afroamericana es tan intenso que ha alimentado la creación del movimiento social Black Lives Matter (Las vidas negras importan), dedicado a denunciar la incesante brutalidad policial en el país. Desde la otra orilla, las autoridades ven el conflicto de otra manera: "El éxito de Straight Outta Compton es gasolina que aviva el fuego del odio a la policía", apunta Zine. La inmensa mayoría de los mandos entrevistados acusan 'off the record' a Universal Studios de poner los beneficios por encima de la paz social.

Racismo cultural

El conflicto de la policía de Los Ángeles con la película comenzó el mismo día del estreno. La publicación LA Weekly informó de que se habían destinado el triple de agentes a la proyección que a cualquier otro estreno de tamaño similar. La histeria desatada hizo que Universal ofreciera a los cines reembolsarles cualquier gasto extra de seguridad en el que creyeran necesario incurrir. Poco más tarde, el estudio aclaró que no estaba dispuesto a pagar, sino a colaborar en los planes de seguridad de las salas. Por su parte, la cadena de noticias CNN también provocó una intensa polémica al informar de la cinta con el titular "Película de hip-hop registra largas colas, sin ninguna violencia".

¿Se considera noticia, entonces, que los amantes del rap consigan ir al cine sin liarse a tiros? Un titular así hubiera sido impensable en un película sobre la mafia o en un taquillazo criptofascista de Chuck Norris en los ochenta. ¿Sigue vivo el racismo cultural que denunciaban N.W.A. en sus letras? Parece que sí. Animados por la sequía de noticias de agosto, la prensa estadounidense se enzarzó en un agitado debate sobre si la ausencia de violencia en las proyecciones se debía a la seguridad extra o al hecho de que la gente suele ir al cine a disfrutar, normalmente sin una uzi o una AK-47 a cuestas.

Violencia machista

La cinta también ha desatado denuncias feministas. Michel'le Toussaint es cantante de r&b, ex novia de Dr. Dre (uno de los cerebros del grupo) y madre de uno de sus hijos. Al ver la película, denunció que el guión omitía las agresiones de las que fue víctima por parte del rapero (que llegó a romperle la nariz y varias costillas). Es obligado señalar que la cinta es una versión oficial, donde algunos miembros del grupo ejercen incluso como productores. Poco después de la denuncia de Toussaint, saltaron las de otra ex pareja, Dee Barnes, periodista musical a quién Dre. llegó a golpear públicamente en 1991 en los baños del club Po Na Na Souk de Hollywood.

Barnes ha publicado este verano un extenso artículo en la revista Gawker titulado "Esto es lo que falta en "Straight Outta Compton": mi historia y la de otras mujeres que fueron golpeadas por Dr Dre". La periodista y víctima de violencia machista también señala que en la película no se reconocen los méritos profesionales de las mujeres que contribuyeron a la carrera de N.W.A. y que los únicos personajes femeninos incluidos son groupies.

Dr. Dre se disculpó el pasado 21 de agosto en un artículo en el New York Times: "Hace veinticinco años, yo era un hombre joven que bebía demasiado y no era capaz de digerir su éxito. Mi vida no tenía estructura. Dicho esto, no considero que estas circunstancias puedan servir como excusa para las cosas que hice. Hoy llevo 19 años casado y cada día trabajo para ser un hombre mejor para mi familia. Hago todo lo que está en mi mano para parecerme lo menos posible al joven que fui". A pesar del arrepentimiento público, se ha criticado que no comentara los abusos de manera individualizada y que tampoco reconociera que durante años se dedicó a minimizarlos. Su compañero Ice Cube, conocido por su chulería, quitó hierro a la polémica: "Damos la bienvenida a otras películas que cuenten nuestra historia desde otra perspectiva. Se han rodado mil cintas sobre Elvis, así que podemos soportar unas cuantas más sobre N.W.A. Hay cosas más importantes que eso que fueron excluidas del guión", sentenció.

"Straight Outta Compton" tiene previsto su estreno en España el 13 de noviembre.