Clint Eastwood regresa a los sesenta

El nombre The Four Seasonsquizá no despierte tantos recuerdos como los títulos de muchas de las canciones que popularizaron. A este conjunto vocal de New Jersey debemos clásicos de los años sesenta como Sherry, Big Girls Don't Cry, Walk Like a Man o el exitazo Can't Take My Eyes Off You, versionado incontables veces por todo tipo de cantantes. El grupo y sus temas inspiraron un musical jukebox, al estilo del Mamma Mia de Abba, que se estrenó en 2005 en Estados Unidos y se ha representado en varios países de habla inglesa.

Esta pieza de Broadway es la base de la nueva película de Clint Eastwood. El veterano realizador es un reconocido melómano. Ya en el film con el que debutó tras la cámara, Escalofrío en la noche (1971), donde interpretaba a un DJ radiofónico acosado por una fan, la música juega un papel importante. Suya es una de las mejores aproximaciones al jazz jamás filmadas, Bird (1988), a partir de la figura de Charlie Parker. Y firmó uno de los documentales de la serie televisiva The Blues (2003) auspiciada por Martin Scorsese. Además ha compuesto la banda sonora de varias de sus últimas películas así como la de algún que otro título ajeno. A primera vista, por tanto, no resulta tan extraño que el director de Sin perdonlleve a cabo un biopic musical. Sorprende más que haya decidido adaptar un “jukebox” con éxitos pop de los sesenta.

Jersey Boys arranca de forma prometedora. A partir de la narración de uno de los cuatro integrantes de The Four Seasons, Tommy DeVito (Vincent Piazza, el Lucky Luciano de Boardwalk Empire), la película recuerda los inicios en la música de unos chavales italoamericanos en el New Jersey de los años cincuenta. Los jóvenes se dedican a perpetrar pequeños crímenes sin mucho éxito al tiempo que empiezan a cantar en un club.Desde la voz evocadora y canalla de Tommy, la película parece situarse a medio camino entre Uno de los nuestros (Martin Scorsese, 1990) y un musical nostálgico de la época. Todo ello con un punto de comedia a la italiana. Pero a medida que la formación The Four Seasons cobra cuerpo, el film también se amolda a las convenciones más previsibles del biopic musical.

Jersey Boys recorre casi todos los lugares comunes del género: las dificultades iniciales, la “iluminación” que permite dar con el nombre definitivo del grupo, el primer éxito, el fichaje por una gran discográfica, el padrinazgo por parte de un productor famoso, los encontronazos entre los miembros del grupo, la incapacidad de un cantante siempre de gira para conciliar la vida de familia con la profesional, la aparición en el show televisivo de Ed Sullivan, la crisis, el éxito inesperado cuando su carrera parecía en franca decadencia, el reencuentro años más tarde tras su entrada en un Hall of Fame...

El otro elemento que le otorga personalidad al film es el toque Eastwood. El director se detiene en aquellos aspectos del personaje que más le interesan. De manera que el cantante Frankie Valli (John Lloyd Young, que ya interpreta este papel en el musical original), además de ser un hombre pequeño con una gran voz, también se mueve, como tantos otros personajes de la carrera del director, según un código ético propio y diferente a lo establecido que le lleva a tomar decisiones heroicas. Eastwood se centra en la fidelidad de la estrella de la música a sus orígenes en New Jersey, que no olvida incluso años después de haberse marchado de allí.

A pesar de sus buenos momentos de humor y de la viveza que transmiten las canciones, Jersey Boys también se empapa de ese tono melancólico presente en buena parte de la carrera de Clint Eastwood. Y nos ahorra la histeria propia de tantos otros biopics musicales, que pasan de la euforia al drama, del gran éxito al fracaso estrepitoso, de los focos deslumbrantes a las zonas sombrías.

A pesar de ello, Jersey Boys se sitúa lejos de obras maestras como Bird. Además de ser un tanto convencional, el film también adolece de algunos problemas de ritmo que resultan insólitos en un narrador nato como Eastwood. Y comparte con J. Edgar, su anterior película dedicada al mandamás del FBI, una vistosa problemática con la caracterización de los intérpretes: el maquillaje y la peluquería parecen propios de un telefilm de bajo presupuesto y no los de una producción de Hollywood. El director, afortunadamente, no da otros síntomas de baja forma. Ya se encuentra rodando su nuevo film, American Sniper, inspirado en la figura real de un francotirador.

Jersey Boys

Director: Clint Eastwood

Guión: Marshall Brickman y Rick Elice

Duración: 134 mins

Género: Biopic musical

Nacionalidad: Estados Unidos