Muere a los 89 años Diane Ladd: estrella legendaria de 'Corazón salvaje', tres veces nominada al Oscar y madre de Laura Dern

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La industria del cine despide a una de sus figuras más queridas. La actriz estadounidense Diane Ladd, nominada tres veces al Oscar, falleció este lunes, 3 de noviembre, a los 89 años en su casa de Ojai, California. La intérprete deja atrás una carrera de más de seis décadas, marcada por su talento, sensibilidad y compromiso con el arte. Su trayectoria brilló tanto en el cine como en la televisión, con una filmografía que supera los 140 títulos.

Fue su hija, la también actriz Laura Dern, quien anunció la noticia a la revista Variety con un emotivo mensaje: “Mi increíble heroína y madre, Diane Ladd, un regalo inmenso para mí, falleció esta mañana conmigo a su lado. Fue la mejor hija, madre, abuela, actriz, artista y alma compasiva que jamás hubiera imaginado. Fuimos afortunados de tenerla. Ahora vuela con sus ángeles”.

La relación profesional y personal con su hija fue una de las más admiradas de Hollywood, no solo por su vínculo familiar sino por la complicidad artística que compartieron durante décadas. En cualquier caso, a lo largo de su carrera, Ladd no solo destacó por su talento, sino también por su capacidad para combinar fuerza y ternura en cada papel.

Una carrera marcada por el talento y las nominaciones

Nacida el 29 de noviembre de 1935 en Laurel (Misisipi) bajo el nombre de Rose Diane Ladner, fue hija del veterinario Preston Paul Ladner y de la actriz Mary Bernadette Ladner, lo que marcó su destino artístico desde muy joven. Ladd debutó en el cine en los años sesenta con Los ángeles del infierno, dirigida por Roger Corman, y rápidamente se ganó un lugar en Hollywood gracias a su carisma y versatilidad. Alcanzó su primera nominación al Oscar como actriz de reparto con Alicia ya no vive aquí (1974), de Martin Scorsese, donde interpretó a Flo, una camarera de carácter fuerte y entrañable.

Su segunda candidatura llegó con Corazón salvaje (1990), la icónica película de David Lynch, en la que encarnó a una madre posesiva y perturbada, inspirada en la villana de El mago de Oz. Allí compartió escenas con su hija Laura Dern, quien daba vida a la joven protagonista. Un año después, hicieron historia al ser las primeras actrices madre e hija nominadas al Oscar por la misma película, El precio de la ambición (1991), donde Ladd interpretaba a la abogada de la ingenua Rose, papel encarnado por Laura.

Más allá de estos títulos, Ladd participó en películas tan diversas como Chinatown, Primary Colors, 28 días, Joy o Burt Munro: un sueño, una leyenda, y trabajó también como directora y guionista en La señora Munck. Su compromiso con la televisión le valió tres nominaciones al Emmy por series como Alice, La doctora Quinn o Tocados por un ángel.

Su colaboración con Laura Dern fue constante: trabajaron juntas en proyectos como Ruth, una chica sorprendente, Daddy and Them, Inland Empire y la serie de HBO Iluminada. Su conexión artística se extendió incluso al plano literario, cuando publicaron el libro Honey, Baby, Mine, donde compartían conversaciones íntimas sobre la vida, la maternidad y la muerte.

Tres matrimonios, dos hijas y una gran pérdida

Ladd tuvo una vida personal llena de amor y dolor. Su primer matrimonio fue con el actor Bruce Dern, con quien se casó en 1960. De esa unión nacieron dos hijas: Diane Elizabeth (1960-1962), fallecida trágicamente a los 17 meses, y Laura, nacida en 1967. La pérdida de su primera hija fue un golpe del que nunca se recuperó del todo. La pequeña murió tras sufrir una hemorragia cerebral provocada por un golpe en la cabeza al caer en la piscina familiar.

Ladd habló abiertamente de aquella tragedia décadas después: “Se golpeó la cabeza y perdió el conocimiento. Todo sucedió en un instante. Y murió, y eso nunca se supera. Un niño no debería morir antes que sus padres”, confesó en una entrevista con CBS News. El dolor de aquella pérdida influyó profundamente en su matrimonio con Bruce Dern, que terminó en divorcio en 1969.

Años más tarde, la actriz contrajo un segundo matrimonio con William A. Shea Jr., unión que duró entre 1973 y 1976. Su tercera boda fue con Robert Charles Hunter, exejecutivo de PepsiCo, con quien compartió más de dos décadas, desde 1999 hasta la muerte de él el 31 de julio de 2025, a los 77 años, apenas tres meses antes que ella.

Su hija Laura siempre destacó la fortaleza con la que su madre enfrentó la vida. En múltiples ocasiones la describió como “mi ejemplo de amor y resistencia”, y ambas encontraron en su arte una manera de sanar las heridas del pasado. Con el paso del tiempo, madre e hija convirtieron el dolor en inspiración y la pérdida en una lección de amor incondicional. Diane Ladd deja un legado inmenso. Su talento y sensibilidad la convirtieron en una de las grandes damas de Hollywood, una intérprete que supo brillar sin estridencias y que será recordada no solo por sus papeles, sino por la humanidad con la que vivió su vida dentro y fuera de la pantalla.