Es noticia
La exposición al plomo pudo proteger el cerebro de los Homo sapiens
  1. Cultura
veneno como ventaja evolutiva

La exposición al plomo pudo proteger el cerebro de los Homo sapiens

Una exposición natural al plomo pudo otorgar a los Homo sapiens una ventaja neurológica decisiva frente a los neandertales, según un nuevo estudio

Foto: Los cráneos de un homo neanderthalensis (izqda), y un homo sapiens se muestran en la exposición que el museo de la universidad de Alicante. EFE
Los cráneos de un homo neanderthalensis (izqda), y un homo sapiens se muestran en la exposición que el museo de la universidad de Alicante. EFE

Un equipo internacional de científicos ha hallado indicios de que la exposición al plomo, metal tóxico comúnmente vinculado a daños neurológicos, jugó un papel inesperado en la evolución humana. Según el estudio, publicado en Science Advances, esa exposición podría haber dado ventaja adaptativa a los Homo sapiens frente a los neandertales.

Los investigadores analizaron el contenido de plomo en 51 dientes fósiles pertenecientes a especies humanas y prehumanas, con edades comprendidas entre 100.000 y 1,8 millones de años. Las muestras incluyeron restos de Homo sapiens, neandertales, especies tempranas de Homo, así como Australopithecus, Paranthropus y otros géneros más distantes. En el 73% de los especímenes se detectaron señales de exposición episódica al plomo (71 % en homínidos de géneros como Australopithecus, Paranthropus y Homo), informa Science Alert.

Estas concentraciones no se atribuyen necesariamente a actividad humana, sino a fuentes naturales: actividad volcánica, incendios forestales o procesos geológicos que liberan plomo en agua y alimentos. Los patrones difieren entre especies: por ejemplo, los dientes de Paranthropus robustus mostraron pocas bandas de plomo y de bajo nivel, mientras que los de Australopithecus africanus y otros Homo presentan exposiciones más frecuentes, posiblemente debido a bioacumulación a lo largo de la cadena trófica.

Experimentos con cerebros en miniatura

Para explorar cómo esta exposición podría haber afectado a diferentes poblaciones humanas antiguas, los científicos usaron organoides cerebrales (mini-cerebros cultivados en laboratorio) con variantes de un gen llamado NOVA1. Una variante corresponde a la que predomina en humanos modernos; la otra está más presente en neandertales y especies extintas.

Para explorar cómo la exposición podría haber afectado a diferentes poblaciones humanas antiguas, los científicos usaron organoides cerebrales

Cuando estos organoides se sometieron a exposición al plomo, los que tenían la variante neandertal experimentaron una alteración significativa en la actividad del gen FOXP2, importante para el desarrollo del lenguaje y el habla. En cambio, los con la variante humana mostraron menor daño. El equipo interpreta que la variante humana de NOVA1 pudo ofrecer una resistencia neurológica frente a los efectos tóxicos del plomo, lo que, en un escenario de entornos contaminados naturalmente, habría favorecido una mejor supervivencia y capacidades comunicativas.

El estudio no afirma con certeza que el plomo haya sido la causa de nuestra ventaja evolutiva sobre los neandertales, pero introduce una hipótesis provocadora: una presión ambiental tóxica —en lugar de una apenas tolerable— pudo haber moldeado variaciones genéticas con consecuencias profundas en nuestra biología cerebral. Los autores destacan que esta investigación pone de relieve lo complejo de la historia evolutiva humana: un agente considerado puramente dañino en la actualidad podría haber sido un factor de selección diferencial hace cientos de miles de años.

Un equipo internacional de científicos ha hallado indicios de que la exposición al plomo, metal tóxico comúnmente vinculado a daños neurológicos, jugó un papel inesperado en la evolución humana. Según el estudio, publicado en Science Advances, esa exposición podría haber dado ventaja adaptativa a los Homo sapiens frente a los neandertales.

Arqueología
El redactor recomienda