El fenómeno Custodio: cómo un aceitunero de Jaén ha llevado su libro al 1 de Amazon

Cuando Custodio José Pérez Pérez atiende a El Confidencial desde Pegalajar, un municipio agrícola del suroeste de Jaén de menos de 3.000 habitantes, su novela ocupa el número 1 del top de ventas de Amazon. No las categorías de “libro romántico erótico” o “ficción negra”, que por pura lógica también lidera, sino el número uno absoluto en libros. “¡Por delante de Ken Follett o Dan Brown!”, añade, y suena más a sorpresa que a fanfarroneo.

Ha sido fácil localizarlo. Ni agentes de prensa, ni editoriales, ni otros intermediarios. Custodio responde rápidamente al correo con extensión de Gmail que figura en su página web y se muestra encantado de hablar. Desde que el pasado jueves 9 de octubre apareciese durante 20 minutos en La revuelta, su vida ha dado un vuelco y ha pasado a convertirse en una personalidad viral que, como presume por teléfono, no tiene haters.

El de Custodio es un fenómeno sin parangón en tiempos recientes. No es la primera persona en saltar a la fama gracias a su aparición en La revuelta (ahí están Detective Murciano y Zorrífico), ni el primer escritor en hacerse famoso desde el anonimato (como María del Carmen Rodríguez del Álamo, alias Megan Maxwell), ni la primera figura en unir a toda España por su simpatía (recordemos Chiquito). Es una amalgama perfecta de todos ellos. También, un ejemplo de cómo la televisión sigue mandando en la era de la fragmentación social.

“El otro día estaba paseando al perro por el pueblo y se paró un coche en mitad de la carretera porque se querían hacer una foto conmigo”, explica. “Ayer fui a un concierto de Mägo de Oz y la gente me paraba”. Una fama sobrevenida que contrasta con un día a día anónimo. Ha dedicado la mañana a las tareas del hogar, a cuidar de su suegra y su nieta y, ya por la tarde, a escribir. Su mujer trabaja en los olivares, pero él ya no lo hace porque padece de vértigos, así que contribuye con su literatura.

Ha sido carpintero, antenista, ha trabajado en un estanco y en la cooperativa

Una pasión infantil que solo ha cuajado en los últimos años. Hasta entonces, ha sido carpintero, antenista, ha trabajado en un estanco y en la cooperativa de su pueblo. Custodio comenzó a escribir a finales de 2022, después de que se le ocurriese el argumento de su primera novela mientras recogía aceitunas. Se lo comentó a su mujer y le dijo que por qué no escribía un libro. Para San Valentín ya tenía en la calle su primer trabajo, Granada oscura, el actual número 1 de ventas.

No había recibido ninguna formación: era un autodidacta absoluto de la literatura. “Yo, como leo mucho y sobre todo novela negra, sabía la estructura y cómo lo hacen los autores”, explica. Como él mismo ha explicado, entre sus ídolos se encuentran Juan Gómez Jurado o Stephen King. Se identificaba con Carrie, por haber sido objeto de bullying. Solo más tarde se apuntaría a algún curso literario. En apenas tres años, ha escrito ya nueve novelas, de las que solo ha editado cinco porque la inversión que requieren le obliga a ir poco a poco, aunque ahora cuente con el apoyo de una pequeña editorial.

“Tienes que buscar maquetador, corrector, etc., y te sale por una pasta porque luego tienes que estar vendiéndolos tú y haciendo cursos de marketing”, explica. Custodio ha dedicado los últimos años a pasearse primero por ferias del libro, donde “los pequeños no vendíamos nada”, y más tarde en salones del cómic, donde “como todos somos autopublicados, al menos estamos en igualdad de oportunidades”. Sus lectores más fieles son de Granada y Jaén, ciudades que suelen aparecer en sus novelas. “La gente compra por el nombre”, admite. “Con mis libros me he movido sobre todo por ahí, cuando he salido a Estepona, Málaga y Sevilla, he vendido menos”. Entonces llegó Broncano.

20 minutos te cambian la vida

Cansado de ser un viajante de la publicación, y después de un evento que había sido particularmente decepcionante, Custodio se hartó y tomó una decisión. Le dijo a su mujer que iba a intentar como fuese darle su libro a Broncano, así que a mediados de septiembre cogió el primer autobús de Jaén a Madrid y se plantó en la capital. Allí llamó la atención del equipo y apareció en la bañera de invitados, donde en directo le dio a Broncano su libro y le arrancó una promesa: que si algún día le fallaba un invitado a última hora, contase con él.

El pasado miércoles, como el propio presentador confesó, se quedó sin invitado a última hora, así que decidió saldar la deuda. Custodio recibió la llamada mientas estaba con su suegra y su nieta, cocinando su especialidad gastronómica, contramuslos en air fryer. En unas horas, se plantó con el coche en Getafe. No pudo llegar más allá, porque como él mismo explicó en el programa, su automóvil es un Audi de 2006 diésel con pegatina B, así que no podía entrar hasta Gran Vía, donde se graba el programa. El equipo tuvo que desplazarse a la periferia madrileña para recogerlo.

Tiene la ventaja de que sus libros son 'print on demand', por lo que no se agotan

Custodio disfrutó de algo con lo que los escritores más veteranos ni pueden soñar. 20 minutos en prime time hablando, además, de su trabajo. El paraíso para todo departamento de comunicación de una editorial. Allí se ganó al público narrando su día a día con frescura (y emoción), explicando que él mismo dibuja las ilustraciones de sus libros y reivindicando que en vez de best sellers se lea a autores autopublicados y escritores pequeños. “Que Juan Gómez Jurado y Stephen King ya están podridos de dinero”, bromeaba.

En apenas unos días, sus ventas se han disparado, como él mismo ha comprobado en su cuenta de Amazon. Custodio sale por la tangente cuando se le pregunta por el número exacto (“muchos, muchos, una barbaridad”). Tiene una ventaja, que es que aunque él se ha quedado ya sin ejemplares, el modelo de la publicación de los primeros volúmenes es el de la impresión bajo demanda. Es decir, es Amazon quien se encarga de imprimirlos cuando recibe el pedido, así que potencialmente, puede vender infinitas copias de Granada oscura. Las tiradas de sus libros han sido de unas 75 a 100 copias.

Es el autor, no la obra

“Le ha tocado la lotería”, valora Jorge Corrales, escritor, guionista y autor de El escritor y la espía (Planeta), que publicaba un tuit en X aplaudiendo el éxito de Custodio. “Pues sí, me ha tocado la lotería”, concede este. Como recuerda Corrales, que publica con una de las grandes editoriales españolas, “todos los escritores soñamos con que nos pase algo así, y me alegro de que le haya tocado a él, un tipo muy sano y muy sincero”.

"El contraste funciona muy bien en televisión"

Porque la maquinaria comunicativa de las editoriales, incluso las grandes, está cada vez más lejos del prime time de la televisión. Para acceder a esos impenetrables minutos de oro resulta más rentable recurrir a procedimientos heterodoxos como echarle morro. O convertirse en un personaje que funcione en la tele, y Custodio lo es. “Algo que he aprendido en mi corta carrera como escritor es que la obra no importa, importa el autor: la gente no quiere oír hablar de tu novela, lo que importa mediáticamente es la obra”, añade Corrales.

“El contraste funciona muy bien en televisión”, explica Jimina Sabadú, crítica televisiva y novelista. “Si coges a este señor, con esa pinta de olivarero de Jaén, que te cuenta que escribe novelas de intriga y va a la televisión a intentar venderla, te cae bien al momento. Pero si ves a un profesor de instituto que ha escrito una novela histórica, como la mayoría de personas que escriben libros en España, es otro profesor de instituto que va a vender una novela”.

Sabadú cita Historias de la radio, dirigida por José Luis Sáenz de Heredia en 1955, como una película que puede evocar ese punto de cuento de hadas blanco de Custodio en La Revuelta. Una de las claves del fenómeno es el trato de tú a tú con el que Broncano o Grison tratan a Custodio, y la saludable autoconciencia de este. Nada más lejos de la explotación del friki de otros tiempos que hoy sería rechazada por el público generalista y que ha encontrado su refugio en internet.

“En la televisión te ve todo el mundo, y eso supone un filtro para tu entorno, es como si te hubiesen validado desde las alturas”, prosigue Sabadú, que ha publicado varias novelas, ensayos y dirigido una película, pero que es recordada entre familia, amigos y vecinos por su aparición en concursos televisivos. “Cuando he salido en Ahora caigo parece que he ganado el Nobel, mi frutero me quiere mucho porque he salido dos veces en Saber y ganar: salir en la tele te valida”, concluye.

A pesar de la supuesta fragmentación de audiencias, la televisión generalista sigue marcando la diferencia. “Los editores siempre dicen que lo que más notan es cuando sales en televisión, porque equivale a llegar a gente a la que nunca llegarías”, explica Corrales. “La televisión es más popular en el buen sentido, hay una competencia terrible en el mundo editorial y es una ventaja llegar a un público que generalmente no iría nunca a comprar un libro”. Él mismo aprovechaba la coyuntura para pedir a Broncano, medio broma medio en serio, salir en La revuelta explicando su tuit.

Lo interesante es que Custodio no ha aparecido como escritor, sino como un personaje que emerge de entre el público anónimo. Como añade Sabadú, los escritores ya no funcionan en televisión y, cuando aparecen, raramente hablan de su obra. Cita el ejemplo de Arturo Pérez-Reverte, que en su último paso por El Hormiguero se centró en política, guerras culturales y otros temas. “Si Custodio ha salido en La revuelta es porque les ha dado algo: frescura, humor popular… los escritores nos equivocamos y creemos que de cara al marketing lo importante es tener algo que contar, pero la obra no vende de por sí”, insiste Corrales.

"Los libros que mejor funcionan son los que compra la gente que no lee"

La gran pregunta es la posible continuidad del fenómeno Custodio. Es razonable pensar que puede estar recibiendo un aluvión de ofertas de editoriales de todo tipo, que se han encontrado con lo más codiciado: un personaje popular que vende libros tan solo con su nombre. “La clave está en ver cuáles son las reacciones y si las críticas son buenas”, valora Sabadú. “Vengo de un congreso donde decían que lo que más vende es lo que compra la gente que no lee, igual que las películas que mejor funcionan son las de la gente que no va al cine”. Todo sea dicho, Granada oscura tiene en Amazon una muy digna valoración de 4,5 (sobre 5) y 64 reseñas.

“Estoy seguro de que tendrá el buzón lleno de ofertas de editoriales y sospecho de cuáles, porque yo tuve la suerte de contar una historia en Twitter y que a los cinco días una editorial me hiciese una oferta”, concluye Corrales. “Ha tenido la osadía no solo de decirle a Broncano que le llevase como entrevistado, sino de lanzarse a publicar como sea para intentar hacerse un huequito”. Mientras tanto, Custodio prefiere tomárselo con calma. Aunque no tiene planes de volver a La revuelta en el futuro inmediato (quedó en que lo haría cuando tuviese un nuevo libro que presentar), a tenor de la presión popular, puede ser que tenga que ser mucho antes.