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El homenaje silencioso (y emotivo) a David Lynch en los Oscars del que muchos no se han dado cuenta: es un guiño a una de sus películas más emblemáticas
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El homenaje silencioso (y emotivo) a David Lynch en los Oscars del que muchos no se han dado cuenta: es un guiño a una de sus películas más emblemáticas

Fue un auténtico guiño visual a la historia (la cinematográfica y la no tanto) que compartieron

Foto: David Lynch fotografiado en 1989. (Getty Images/Acey Harper)
David Lynch fotografiado en 1989. (Getty Images/Acey Harper)

La alfombra roja de los Premios Oscar 2025 ha dejado, como siempre, grandes momentos, pero uno de los más emotivos (y no tan comentados) fue protagonizado por Isabella Rossellini, quien rindió un homenaje discreto pero profundo a su expareja, el director David Lynch, fallecido en enero de este año.

La actriz, nominada por su papel en Cónclave, se presentó con un vestido de terciopelo azul que rememoraba su paso por la alfombra roja en 1987 y evocaba la icónica película Terciopelo azul de Lynch. Un guiño visual a la historia (la cinematográfica y la no tanto) que compartieron.

El terciopelo azul es un precioso detalle estético a la vez que una pieza cargada de historia. En la película de 1986, Rossellini lució una bata de este mismo material que la firma Dolce & Gabbana ha reinterpretado en el diseño para los Oscars. Con ello, la actriz recordó a su papel de Dorothy Vallens, un personaje que, al igual que el vestido, reflejaba las complejidades y contradicciones de su figura en la historia del cine.

Isabella no solo homenajeó a Lynch con su vestimenta, sino también con sus pendientes, un tributo a Ingrid Bergman, su madre. Estos pendientes, que pertenecieron a la famosa actriz, fueron llevados por Bergman durante su nominación al Oscar en 1979.

placeholder Isabella Rosellini en la alfombra roja de los Oscars (EFE)
Isabella Rosellini en la alfombra roja de los Oscars (EFE)

Este detalle adicional fue otro toque emocional en un evento tan significativo: todo un guiño a los que ya no están. Un homenaje familiar que vinculaba el cine, el legado y el amor.

Además de su hermoso look, Isabella posó junto a Laura Dern, otra de las musas de Lynch, con quien compartió varias películas. Ambas coincidieron en Corazón salvaje, uno de los proyectos más recordados del director. El apoyo mutuo entre estas dos mujeres se convirtió en otro de los gestos más entrañables de la noche, cerrando así un círculo de homenajes a la figura de Lynch, que siempre supo rodearse de grandes talentos.

Foto: Lynch en 2004. (Getty/Gilles Mingasson) Opinión
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El vestido de terciopelo azul y los pequeños pero poderosos detalles de Rossellini en los Oscars 2025 fueron una estupenda manera de hacer un guiño a dos figuras atemporales en un mundo en el que todo cada vez es más volátil: algo que solo el buen cine puede lograr.

La alfombra roja de los Premios Oscar 2025 ha dejado, como siempre, grandes momentos, pero uno de los más emotivos (y no tan comentados) fue protagonizado por Isabella Rossellini, quien rindió un homenaje discreto pero profundo a su expareja, el director David Lynch, fallecido en enero de este año.

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