El director de 'Parásitos' genera aplausos y risas con 'Mickey 17'
La espera llega a su fin. El tercer largometraje en inglés del aclamado director coreano y protagonizado por Robert Pattinson, finalmente desembarca en la Berlinale
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Después de varios montajes, intentonas de ir a los festivales de Cannes y Venecia del año pasado, de variopintas estrategias de lanzamiento y de fechas tentativas de estreno que se fueron derribando como naipes expuestos al viento, Mickey 17, la nueva película de Bong Joon Ho, encontró su plataforma de lanzamiento en la 75 edición de la Berlinale, concretamente desde la sección Berlinale Special.
Con respecto a la proyección exclusiva para influencers en Londres celebrada hace unos días, que tantas ronchas levantó en la prensa internacional, haremos como que no cuenta. Que quede asentado en el protocolo que rencorosos no somos, pero lo de olvidar se nos da muy mal.
Después de hacer historia al ganar con Parásitos (2019) la Palma de Oro en Cannes y luego varios Oscar, incluidos el de Mejor película y Mejor director, Bong Joon Ho intenta nuevamente jugar en territorio extranjero al llevar al cine la novela de Edward Ashton, Mickey7 (con el número adherido al nombre), publicada en 2022.
Robert Pattinson, Naomie Ackei, Toni Collette, Mark Ruffalo, Steven Yeun y Anamaria Vartolomei encabezan el nutridísimo elenco de esta aventura de ciencia ficción que se desarrolla entre la tierra, el espacio y un planeta cubierto de nieve donde habitan seres parecidos físicamente al gusano gigante de Dune, pero capaces de entablar comunicación.
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Las expectativas esta mañana en la primera proyección para la prensa planeaban a lo largo y ancho de la Berlinale Palast, el retraso de más de 10 minutos no las apaciguó, al contrario. Como nota curiosa —algo que nunca había ocurrido en una proyección de prensa—, guardas de sala pasaron fila por fila para recordar que hasta esta noche a las 19:00 horas estábamos embargados. La reiteración llegó más tarde vía micrófono cuando la paciencia —más no las expectativas— ya mermaba entre los presentes.
Pero volvamos a Mickey 17, aplaudido, reído y disfrutado a pesar de los sinsabores de la espera. Se trata de un cuento loquísimo, que transita a través de todas las formas posibles de la comedia, donde sí hay sangre, algo de acción y un despliegue de excelentes actuaciones que bordean lo deliciosamente grotesco.
La historia va de un tal Mickey Barnes (Pattinson en su mejor momento y dándolo todo) que abandona la tierra en el año 2054, huyendo de una especie de mafia, con otras cientos de personas, para colonizar el lejano planeta Niflheim. Unos variopintos aventureros siguen el ambicioso plan de colonización para implantar 'una especie superior' aupado y ejecutado por Kenneth Marshall (Ruffalo como nunca), un político —cruce entre Donald Trump, Elon Musk, Javier Milei, Putin y un pastor radical (da igual cuál…)— y su esposa Ylfa (Colette haciendo un fabuloso despliegue de sus dotes de comedia) que funge de pinganillo de su muy manejable marido. Cualquier parecido con el dúo nicaragüense Ortega - Murillo (y parejas parecidas), corresponde a la inspiración libre del creador de esta historia.
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Sin saberlo, y por la mera pereza de leer las opciones de emigración, Mickey, un tipo ingenuo e impresionable, se postula como un 'expendable', lo cual implica que podrá ser replicado/impreso una y otra vez al servirle al proyecto como conejillo de indias. Que si hay que probar vacunas, la atmósfera en Niflheim, virus, gases, cambios drásticos de temperatura, etc., allí está Mickey cuál ratón de laboratorio. '¿Qué se siente morir?', es, pues, la pregunta recurrente que con genuina curiosidad o burda saña le hacen sus colegas colonos.
Mickey que conserva sus recuerdos con cada nueva réplica y cuyo carácter va cambiando paulatinamente, mantiene una relación amorosa con la agente de seguridad Nasha (Ackie, todo un descubrimiento), uno de los personajes que dará 'la sorpresa' en esta historia. La cosa se complica cuando Mickey17, que por avatares del destino ha sobrevivido a su última misión, se ve las caras con Mickey18, una versión, digamos algo diferente que su predecesor.
Bong Joon Ho desembarcó en Berlín, también gélida y cubierta de nieve, con una buena parte del elenco. Junto a él, Pattinson, Ackei, Collette, Yeun y Vartolomei armaron una algarabía, apenas se asomaron al photo call. El entusiasmo continuaría durante la rueda de prensa, donde Robert Pattinson confesaría, al igual que los otros actores presentes, que literalmente saltó para no dejar escapar la oportunidad de trabajar con el director sudcoreano.
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El doble salto mortal con alta dificultad le salió bien al actor inglés. Con Mickey 17 Pattinson reafirma nuevamente sus ganas de seguir arriesgando, literalmente poniendo toda la carne en el asador, hasta hacernos gritar '¡¿Quién cuernos recuerda Crepúsculo?!'
A lo largo de la conferencia de prensa que se hizo esperar y que duró unos 30 minutos, salió a colación el parecido entre la ficción de Mickey 17 con la realidad y 'prominentes personajes' de allí fuera.
El director coreano despejaría las incógnitas sobre las inspiraciones para el desarrollo del político mesiánico Kenneth Marshall. Que sus referencias fueron malos políticos coreanos, pero ninguno corresponde a la actualidad, diría. "Como la historia siempre se repite, podría parecer que me estoy refiriendo a alguien del presente", argumentaba Bong en la rueda de prensa y cuál Houdini añadiría, "incluso si hago algo pensando en un hecho del pasado, parece que me estuviese refiriendo al presente".
Después de Okja (2017) y Rompenieves (2013, basada en la novela gráfica Le Transperceneige, de Jacques Lob y Jean- Marc Rochette), Bong Joon Ho se marca su nueva aventura en inglés, manteniéndose en las arenas de la ciencia ficción, donde se siente a sus anchas.
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Desde allí, y combinando al antojo con aventura, thriller, fantástico, sátira y comedia, Bong toca temas que en efecto nos remiten al presente o a un futuro inminente. Si en Okja planteaba el tema moral del hiperconsumo y sobreproducción de alimentos a toda costa, en Mickey 17 habla de la neocolonización, de los discursos radicales y del fascismo, del poder ejercido —y seguido— por seres amorales y viles, pero también de la capacidad de los seres humanos de no perder las esperanzas en hacer las cosas bien.
De una cosa podemos estar seguros: sea en inglés o en coreano, con extrañas criaturas o sin ellas, con personajes esperpénticos o no, desde la ciencia ficción o desde cualquier otro género cinematográfico, Bong Joo Ho siempre va a cuestionar a la humanidad, su evolución y su pérfida involución
Después de varios montajes, intentonas de ir a los festivales de Cannes y Venecia del año pasado, de variopintas estrategias de lanzamiento y de fechas tentativas de estreno que se fueron derribando como naipes expuestos al viento, Mickey 17, la nueva película de Bong Joon Ho, encontró su plataforma de lanzamiento en la 75 edición de la Berlinale, concretamente desde la sección Berlinale Special.