Un medievalista redescubre a un caballero de la Mesa Redonda olvidado durante siglos

En 2010, el joven medievalista franco-italiano Emanuele Arioli se encontraba consultando un manuscrito medieval (Las profecías de Merlín) en la biblioteca del Arsenal de París cuando hizo un descubrimiento que llamó su atención. Intercalados entre capítulos del texto, encontró los episodios de una novela artúrica que había sido completamente olvidada. Las aventuras eran las de un caballero, Ségurant le Brun, que luchaba contra un dragón imaginario.

La historia del caballero que luchó contra el dragón había estado perdida durante más de siete siglos y, sin embargo, fue ampliamente leída en diversos países europeos (Francia, España, Gran Bretaña o Italia) desde los siglos XIII al XV, experimentando variaciones y continuaciones. Ségurant fue un héroe muy popular durante la Edad Media, pero a finales del siglo XVI aproximadamente cayó en el olvido hasta que sus historias (dispersas en más de 20 manuscritos medievales en distintas bibliotecas del viejo continente) se terminaron perdiendo y olvidando.

Pero ahora, gracias a Arioli, tenemos de nuevo las historias de Ségurant le Brun con nosotros. Después de recorrerse las bibliotecas de toda Europa durante años en busca de los manuscritos perdidos, y tras una década de investigación, el investigador ha presentado por primera vez en español el texto de esta novela perdida. Ségurant, el caballero dragón contiene ilustraciones de los manuscritos originales y es un cruce de leyendas y culturas.

Ségurant apareció más tarde, cuando una novela anónima lo retrató como el mejor caballero de la Corte del Rey Arturo

La leyenda del rey Arturo surge tanto en Gran Bretaña como en la Bretaña francesa y en forma de trafición oral, pues no se registró por escrito hasta los siglos XII o XIII. En las aventuras del rey Arturo, conocidas por todos, se reunía alrededor de la Mesa Redonda con sus caballeros y andaban en busca del Santo Grial. Si bien es verdad que en estas primeras historias no aparecía Ségurant, que llegó más tarde (sobre el siglo XIII) cuando una novela anónima lo retrató como el mejor caballero de la Corte. Para que no pareciera raro que no se le hubiese mencionado en otras historias con Lanzarote, Tristán y los demás, sus propias historias sucedían en el mismo tiempo que el resto, pero de manera independiente.

En el caso de la historia recopilada por Arioli, se centra en el momento en que Ségurant abandona su tierra natal (la Isla Ignota) para reunirse con el rey Arturo y desafiar a sus paladines. A lo largo del camino gana innumerables torneos, lo que despierta la admiración de los caballeros de la Mesa Redonda. Es entonces cuando las hechiceras Morgana y Sibila conjuran la imagen de un dragón que escupe fuego por la boca (y Ségurant se lanza en su persecución).

Según Arioli, Ségurant es un caballero muy atípico porque no tiene una dama y su único objetivo es cazar al dragón, lo que abre un mundo muy diferente de novelas artúricas (las cuales son, en general, más serias), lo que esto la convertiría en una especie de don Quijote del siglo XIII. El autor tampoco descartó que aparecieran nuevos textos de caballeros artúricos inéditos en el futuro.