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El reloj del Titanic que se paró en pleno naufragio (y que ahora sale a subasta)
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El reloj del Titanic que se paró en pleno naufragio (y que ahora sale a subasta)

Cientos de artículos relacionados con la célebre catástrofe se venderán al mejor postor en Henry Aldridge & Son, una casa de subastas en Inglaterra

Foto: El reloj a subasta. (Henry Aldridge and Son / SWNS)
El reloj a subasta. (Henry Aldridge and Son / SWNS)
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Cualquier objeto mínimamente relacionado con el Titanic es un sinónimo de interés por parte de la población. Ahora, se pondrán a la venta una serie de ellos, relacionados, claro está, con aquel fatídico viaje que terminó en 1912 de la peor manera posible. Entre los más relevantes se encuentra un reloj de bolsillo perteneciente a una de las víctimas que quedó congelado en el tiempo aquella noche.

Es uno más de los cientos de artículos que se subastarán en Henry Aldridge & Son, una casa de subastas de Devizes, (localidad en Inglaterra), que está especializada en recuerdos del barco. También hay una postal escrita por un pasajero de primera clase, el hombre de negocios británico Richard William Smith, que fue garabateada a lápiz y enviada desde Cork (Irlanda).

El matasellos indica que fue enviada el 11 de abril de 1912, sobre las 15.45 horas, es decir, unos tres días antes de que Smith y otras 1.500 personas perecieran en el mar. La correspondencia (probablemente una de las últimas de Smith) dice: "He tenido un buen viaje por Queenstown. Me voy a la tierra de las barras y estrellas. Espero que estéis todos bien en casa, un cordial saludo". Se vende con un precio orientativo de 10.000 libras.

La postal: "Me voy a la tierra de las barras y estrellas. Espero que estéis todos bien en casa, un cordial saludo"

Asimismo, forman parte de la subasta (denominada Titanic, White Star y recuerdos de transporte) dos relojes de bolsillo vinculados a la tragedia. El ya mencionado, congelado para siempre en el tiempo, pertenecía a Ramón Gómez, un pasajero uruguayo de primera clase que pereció en el accidente aunque intentó agarrarse a una silla de cubierta en un intento de salvarse. Es un reloj suizo Zenith de plata y oro y se venderá por unas 80.000 libras esterlinas. Quedó congelado en la eternidad del tiempo a las 4.53, dos horas y media después de que el barco se hundiera.

La familia conserva el reloj desde hace 112 años, pero ahora lo vende en la subasta. Después del desastre, el Cónsul General de Uruguay en Nueva York fue a Halifax, Nueva Escocia, Canadá, para reclamar el cuerpo y los efectos personales de Gómez, que fueron enviados a su hermano en Uruguay. Los subastadores dicen que su reloj es "uno de los recuerdos emocionalmente más poderosos" del desastre que hayan vendido jamás.

"Es una auténtica pieza de museo y puede representar fácilmente la pieza central de cualquier colección del Titanic"

"El hecho de que el reloj esté congelado en el tiempo por el frío del Atlántico Norte que se lo llevó a él y al Titanic lo confirma como uno de los objetos más poderosos emocionalmente hablando que hemos vendido del barco", señalaron. "Es una auténtica pieza de museo y puede representar fácilmente la pieza central de cualquier colección del Titanic o de relojes antiguos".

También se subastará otro reloj de Tiffany & Co. en oro, de 18 quilates, regalado a un héroe del naufragio por tres viudas. En el interior del estuche se puede leer la inscripción: "Presentado al Capitán Rostron con la más sincera gratitud y aprecio de los tres supervivientes del Titanic el 15 de abril de 1912: la Sra. John B. Thayer, la Sra. John Jacob Astor y la Sra. George D. Widener".

Cualquier objeto mínimamente relacionado con el Titanic es un sinónimo de interés por parte de la población. Ahora, se pondrán a la venta una serie de ellos, relacionados, claro está, con aquel fatídico viaje que terminó en 1912 de la peor manera posible. Entre los más relevantes se encuentra un reloj de bolsillo perteneciente a una de las víctimas que quedó congelado en el tiempo aquella noche.

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