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Simon y Garfunkel hacen al fin las paces tras décadas de turbulenta relación
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una reconciliación épica

Simon y Garfunkel hacen al fin las paces tras décadas de turbulenta relación

La reconciliación abre las puertas a que puedan volver a actuar juntos. La última vez que ambos compartieron escenario fue en 2010, en un homenaje a Mike Nichols, director de 'El Graduado'

Foto: Simon & Garfunkel (EFE)
Simon & Garfunkel (EFE)

Art Garfunkel ha decidido tender un puente sobre las turbulentas aguas de su relación con Paul Simon, un vínculo marcado por décadas de altibajos y una última fase de años de frialdad total. El icónico dúo musical de los años 60 dio recientemente el primer paso hacia la reconciliación durante un almuerzo en el que Garfunkel pidió perdón a Simon por una antigua entrevista en la que, según sus palabras, le había causado dolor. “Lloré cuando me dijo cuánto le había afectado”, comentó Garfunkel al Sunday Times, reconociendo que en aquel momento quiso distanciarse de la imagen “cursi” del grupo. “Qué tonto fui”, confesó.

El encuentro, que tuvo lugar hace dos semanas, dejó un impacto positivo en ambos. Según Garfunkel, los dos artistas, ahora en sus ochenta, han hecho planes para volver a encontrarse, independientemente de si la música vuelve a ser un nexo de unión o no. “Quería disculparme antes de que fuera demasiado tarde. Ahora creo que hay un clima maravilloso entre nosotros. Pero cuando lo recuerdo, siento ganas de llorar. Todavía siento el calor de su abrazo”, compartió el cantante, quien cumplió 83 años el pasado 5 de noviembre, informa la agencia de noticias Ansa.

Paul Simon y Art Garfunkel crecieron juntos en el barrio de Queens, Nueva York, y llegaron a ser uno de los dúos más prolíficos de los años sesenta, con éxitos como America, Mrs. Robinson y The Sound of Silence. Sin embargo, la relación se deterioró tras el lanzamiento de Bridge Over Troubled Water en 1970, y aunque hubo reuniones ocasionales, como el legendario concierto en el Central Park en 1981, la magia de los primeros años no se logró restablecer, y nunca volvieron a componer juntos.

En 2001, Simon expresó su deseo de reconciliarse algún día, sin prisas, pero antes de que fuera demasiado tarde. La última vez que ambos compartieron un escenario fue en 2010, en un homenaje al director Mike Nichols, creador de El Graduado, la película que los catapultó a la fama en 1967 gracias a la banda sonora que compusieron para ella. Simon, quien ha seguido componiendo, lanzó su último álbum, Seven Psalms, el año pasado, una obra que él considera un testamento espiritual, consciente de haber entrado en la recta final de su vida.

En marzo, Simon reveló que está perdiendo la audición en un oído, lo que complica su capacidad para escuchar las notas con precisión

Los problemas de salud han sido otra constante en los últimos años. En marzo, Simon reveló que está perdiendo la audición en un oído, lo que complica su capacidad para escuchar las notas con precisión y mantener el tono. Por su parte, Garfunkel sufrió una parálisis parcial de las cuerdas vocales en 2010, aunque recientemente volvió al estudio para el nuevo álbum de su hijo, Father and Son.

Art Garfunkel Jr., hijo del cantante, se mostró esperanzado sobre el posible retorno de la dupla. “Papá estaba feliz tras el encuentro”, comentó, y reveló que su padre le había dicho que Paul es “como un hermano, su familia”. Según el joven Garfunkel, existe la posibilidad de que los dos artistas vuelvan a reunirse en un gran evento televisivo o benéfico, e incluso podría haber nuevas canciones si reciben el impulso adecuado por parte de la industria musical.

Art Garfunkel ha decidido tender un puente sobre las turbulentas aguas de su relación con Paul Simon, un vínculo marcado por décadas de altibajos y una última fase de años de frialdad total. El icónico dúo musical de los años 60 dio recientemente el primer paso hacia la reconciliación durante un almuerzo en el que Garfunkel pidió perdón a Simon por una antigua entrevista en la que, según sus palabras, le había causado dolor. “Lloré cuando me dijo cuánto le había afectado”, comentó Garfunkel al Sunday Times, reconociendo que en aquel momento quiso distanciarse de la imagen “cursi” del grupo. “Qué tonto fui”, confesó.

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