Almodóvar gana el León de Oro en Venecia con una reivindicación de la eutanasia: "El ser humano debe ser libre para vivir y morir"
El director manchego hace historia en una calurosa noche veneciana con La habitación de al lado, su primera película en inglés, protagonizada por Tilda Swinton y Julianne Moore
A Pedro Almodóvar le habían visto embarcar un avión con rumbo a Venecia. Otro día cualquiera no hubiera sido noticia, pero no precisamente el día de clausura de la 81° edición de la Mostra de Venecia. Para quienes cubrimos la cita cinematográfica italiana, significó ponernos en estado de alerta máxima, ya que el director manchego competía este año por el León de Oro con La habitación de al lado, su primer intento en inglés.
Entre 21 títulos que competían este año, el largometraje protagonizado por Julianne Moore y Tilda Swinton, no abandonó las quinielas desde su primera proyección.
Esta historia que se centra en una amistad, la eutanasia y en una dañada relación materno-filial, basada en la novela de Sigrid Nunez, Cuál es tu tormento (Anagrama, 2021), había dejado un buen sabor de boca y generado excelentes críticas a pesar de que algunos medios estadounidenses afirmasen que les parecía "alejada de la realidad" la manera de hablar de Swinton y Moore, obviando, claro está todo lo que implica el microcosmo almodovariano.
A las seis en punto desafiando las altas temperaturas —tanto las climatológicas como las de los nervios— se inició el desfile por la alfombra roja mientras sonaban hit italianos del pasado y del presente eclipsados con el griterío de los cientos de personas que invadieron los predios del Palazzo del Cinema.
A las 18:45 Pedro Almodóvar llegó a la alfombra roja. Los gritos de ‘Peeeedroooo’ de los fotógrafos se empezaron a fundir con el coreo de ‘pedro-pedro’ que entonó el público. La masa congregada en las afueras del Palazzo fungió como un imán: Almodóvar no dudó ni un momento en acercarse a la gente para firmar autógrafos y fotografiarse con sus seguidores.
El León de Oro honorífico concedido a Almodóvar en 2019 constituyó una declaración de intenciones de parte de la Biennale di Venezia. Es que incluir una película del manchego en la competición por el León de Oro se había tornado una misión imposible ante el poderío del Festival de Cannes, donde los últimos años Pedro había presentado desde Todo sobre mi madre, pasando por Volver hasta Dolor y Gloria.
Con La habitación de al lado se sospechaba que Pedro escribiría otro capítulo en su carrera artística, y así ocurrió.
Pedroooooo ruge
Puntualmente como un vaporetto que lleva y trae a pasajeros entre las islas venecianas, comenzaba la gala que se inició con la premiación a las diferentes secciones paralelas, dejando para el final lo más jugoso. En los discursos de los ganadores hubo menciones al conflicto bélico entre Palestina e Israel, la crisis humanitaria en Gaza, además de los consabidos agradecimientos.
Con la entrada del jurado oficial, Isabelle Huppert empezó el discurso: "Tengo buenas noticias para vosotros: el cine está en buena forma", haciendo un repaso por los temas principales de las películas y alabando la preocupación y sobre todo la creatividad de sus directores.
Huppert barrió para casa, como bien se dice. "Merci Isabelle, Merci Isabelle, Merci Isabelle…", Vincent Lindon, ganador de la Copa Volpi por su protagónico en Jouer avec le feu (The Quiet Son, de Delphine y Muriel Coulin) no tuvo reparos en agradecerle a su compatriota, "muy chic premiar a un actor de tu propio país". El veterano actor, que interpreta a un padre modélico y amoroso cuyo hijo entra en las tinieblas de la extrema derecha, dio un discurso emotivo, además de extenso.
Una de las sorpresas fue la Copa Volpi a Nicole Kidman por Babygirl. La directora Halina Reijn leyó un comunicado de Kidman, que apenas había llegado a Venecia de vuelta al ser convocada, por la muerte repentina de su madre tuvo que emprender de nuevo el viaje de regreso para estar con su familia. "Te amamos Nicole", concluía la directora al borde de las lágrimas.
Brody Corbet recogía su León de Plata a Mejor director por The Brutalist, una película que estuvo en boca de todo el mundo desde su primera proyección, no sin antes darle las condolencias a Nicole Kidman, y después de nombrar a todos los directores con quienes compartió la contienda italiana, agradeció a su equipo. Con un explosivo discurso con palabrota incluida generando aplausos.
El emotivo drama desarrollado en la Primera Guerra Mundial, Vermiglio, firmado por la italiana Maura Delpero, ganó el León de Plata Gran Premio del Jurado. "Debemos defender la cinematografía y la belleza", decía Delpero sobre este filme "difícil".
A la pregunta de la presidenta Isabelle Huppert, ¿quién es el ganador como Mejor película de la 81° edición de la Mostra de Venecia?, formulada por la actriz y ex modelo Sveva Alviti, presentadora de la gala, Huppert menciona La habitación de al lado de Pedro Almodóvar. Los aplausos irrumpieron una vez más en la Sala Grande del Palazzo del Cinema.
Pedro se quita las gafas, abraza a su hermano Agustín y se enfila a recoger el premio de manos de Pietrangelo Buttafuoco, presidente de la Biennale, con la sala en pie. Quizás no fueron los 17 minutos de ovación que tuvo La habitación de al lado la noche de estreno, pero allí estaban las ganas de celebrar al director español.
Pedro empezó en inglés agradeciendo a su familia, a su hermano Agustín, a su asistente Lola García, a sus colaboradores. Que no siempre ha estado tan feliz como lo estaba en esos momentos con el León de Oro en la mano. "Es mi primera película en inglés, pero su espíritu es español", dijo como introducción para pasarse a su idioma materno no sin antes permitirse una pequeña broma como válvula de escape de la emoción que casi le pudo: "Es la primera vez que uso gafas, ¿lo podéis creer?".
Después de agradecer al jurado y a la selección de Alberto Barbera en "una edición tan brillante como la de este año", hacía notar el director. Almodóvar quiso compartir el León de Oro con todo su equipo, especialmente con Julianne Moore y Tilda Swinton por su talento, generosidad y confianza, "realmente este premio les pertenece a ellas", dijo.
"Es una película sobre dos mujeres, que son Julianne y Tilda, como director uno de los privilegios es que somos el primer testigo cuando ocurre un milagro frente a la cámara, tanto Tilda como Julianne han convocado un milagro muchos días durante el rodaje y nunca tendré palabras suficientes de agradecimiento para ellas", decía con la voz a punto de quebrársele.
"La película habla de una mujer que agoniza en un mundo agonizante y de la persona que decide compartir con ella sus últimos días, acompañar a un enfermo terminal, estar al lado, a veces sin decir ni una palabra, es una de las grandes cualidades que poseemos las personas". "La película no solo habla de la solidaridad sin límites del personaje de Julianne Moore, sino también de la decisión del personaje de Tilda Swinton de terminar con su vida cuando esta solo le ofrece un dolor sin solución".
"Despedirse de este mundo dignamente creo que es un derecho fundamental, no es un asunto político, sino humano, y es desde la humanidad desde donde hay que abordarlo, aunque los gobiernos tengan que articular las leyes adecuadas para que esto se pueda llevar a cabo". "Sé que este derecho atenta contra cualquier religión o credo que tenga a Dios como única fuente de vida, y, por lo tanto, de terminar con ella. Yo les pediría a los practicantes de cualquier credo que respeten y no intervengan en decisiones individuales al respecto".
"El ser humano debe ser libre para vivir y para morir cuando la vida sea insufrible", concluía Almodóvar con el público poniéndose de pie.
Que Almodóvar retornase a la contienda italiana con Madres paralelas en 2021 —incluida la polémica teta desnuda en su póster promocional— , además del brazo de Penélope Cruz, quien ganó ese año la Copa Volpi por su rol protagónico en el mencionado filme, apuntaba a la reanudación del romance veneciano que esta noche de la culminación de la 81° edición de la Mostra de Venecia alcanzaría otro nivel.
El idilio de Pedro Almodóvar con la Mostra de Venecia se inició en 1983 cuando la cita italiana acogió en la desaparecida sección Mezzogiorno Mezzanotte la muy polémica Entre tinieblas, le valió un escándalo y un lugar en la arena internacional. "Nací como director en 1983 en Venecia", declararía muchos años después.
Cinco años más tarde regresaría al Lido con la ya icónica Mujeres al borde de un ataque de nervios, se puede afirmar que desde ese momento el nombre del director manchego se hizo aún más reconocible internacionalmente y dejó de ser un trabalenguas. Cuenta la leyenda que el entonces presidente del jurado, el legendario Sergio Leone, puso resistencia a que una comedia se llevara el máximo galardón de la Mostra. ¿Quién iba a decir que tras 36 años la actriz francesa Isabelle Huppert, como cabeza del jurado y una declarada seguidora del cine de Almodóvar, se encargaría de hacer algo de justicia cinematográfica?
Con el León de Oro, La habitación de al lado ha iniciado un carrerón, no será de extrañar que llegue a los Oscar. El Festival de Toronto será su próxima gran parada, sin Pedro, pero con Tilda y Julianne, para luego desembarcar en el Festival de Nueva York. En España, antes de su estreno en salas el próximo 18 de octubre, el loado primer filme en inglés del director manchego se proyectará en el Festival Internacional de Cine de San Sebastián, donde Pedro Almodóvar recibirá —¡finalmente!— la Concha de Oro Honorífica.
Premiados en la 81° edición de la Mostra de Venecia
Sección Oficial
- León de Oro a la Mejor película: La habitación de al lado, Pedro Almodóvar
- León de Plata Gran Premio del Jurado: Maura Delpero por Vermiglio
- León de Plata al mejor director: Brady Corbet por The Brutalist
- Premio especial del Jurado: Dea Kulumbegashvili por April
- Mejor guion: Murilo Hauser y Heitor Lorega por Ainda estou aqui ( dirigida por Walter Salles)
- Copa Volpi a la Mejor actriz: Nicole Kidman por Babygirl.
- Copa Volpi al Mejor actor: Vincent Lindon por Jouer avec le feu (The Quiet Son, de Delphine y Muriel Coulin)
- Premio Marcello Mastroianni a un intérprete emergente: Paul Kircher por Leurs enfants après eux (An Their Children after Them, de Ludovic y Zoran Boukherma)
- Premio FIPRESCI:
Sección Orizzonti
- Premio Orizzonti a la Mejor película: The New Year that Never Came, Bogdan Mureşanu
- Premio Orizzonti al Mejor director: Sarah Friedland por Familiar Touch
- Premio especial del Jurado Orizzonti: One of Those Days When Hemme Dies, Murat Firatoğlu
- Premio Orizzonti a la Mejor actriz: Kathleen Chalfant, Familiar Touch (de Sarah Friedland)
- Premio Orizzonti al Mejor actor: Francesco Gheghi, Familia (de Francesco Costabile)
- Premio Orizzonti al Mejor guion: Scandar Copti por Happy Holidays
- Premio Orizzonti al Mejor cortometraje: Who Loves the Sun, Arshia Shakiba
- León del Futuro – Premio Luigi de Laurentis al Mejor largometraje: Familiar Touch, Sarah Friedland
- Premio Orizzonti Extra del público Armani beauty: Shahed (The Witness), Nader Saeivar
Venice Immersive
- Premio al logro cinematográfico: Impulse: Playing with Reality, Barry Gene Murphy y May Abdalia
- Premio especial del Jurado: Oto’s Planet, Gwenael François
- Gran Premio: Ito Meikyu, Boris Labbé
Venecia Classics
Mejor película restaurada: Ecce Bombo, Nanni Moretti
Mejor documental: Chain Reactions, Alexandre O. Phillippe
A Pedro Almodóvar le habían visto embarcar un avión con rumbo a Venecia. Otro día cualquiera no hubiera sido noticia, pero no precisamente el día de clausura de la 81° edición de la Mostra de Venecia. Para quienes cubrimos la cita cinematográfica italiana, significó ponernos en estado de alerta máxima, ya que el director manchego competía este año por el León de Oro con La habitación de al lado, su primer intento en inglés.